Tres betas de Apple en una experiencia sorprendente
Cuando reúnes tres sistemas operativos en fase beta, cualquier cosa puede ocurrir. Esta es mi experiencia.

Antes de comenzar a desgranar mi experiencia, quiero poner en perspectiva, como alguna que otra vez ya he hecho, cómo, poco a poco, he conseguido crear un mundo digital alrededor de los dispositivos de Apple, a falta de su famoso reloj, para ganar en eficacia y fluidez a la hora de trabajar, jugar, entretenerme o, simplemente, pasar largos tiempos muertos. Apple ha conquistado mi día a día. ¿Lo habrán hecho también sus versiones beta de software?
iOS 13 y la nueva vida del iPhone Xr
Como ya imaginas, ese modelo de iPhone, en concreto el color rojo, es mi teléfono personal. A pesar de que me encanta la personalización y las posibilidades que Android otorga a sus terminales, siempre acabo queriendo volver a los brazos de la manzana mordida. Si el iPhone Xr había sido el teléfono menos equipado el año pasado, ya que carecía de ciertos elementos como el 3D Touch, biseles de acero o doble cámara, con esta actualización de software casi nos ponemos a la altura de los hermanos mayores.
iOS 13 en el iPhone Xr fluye a las mil maravillas
Llevo casi tres semanas con la segunda beta para desarrolladores y tengo que decir que no he tenido apenas problemas con el sistema operativo. He leído artículos en internet y visto vídeos en YouTube escenificando un montón de situaciones complicadas y, en mi caso, todo está fluyendo como debería. La implementación del 3D Touch es un gran añadido, aunque no lo utilizo demasiado por falta de costumbre. La excelente batería del dispositivo no se ha resentido lo más mínimo, cosa de agradecer.
Algunos errores no han empañado la experiencia
Como puntos negros, si es que pueden considerarse así, la carga de algunas páginas web se ha vuelto un poco más lenta, pero nada que impida utilizar Safari. No he tenido ningún cierre forzado de aplicaciones, aunque utilizando auriculares Bluetooth sí he tenido que realizar varias conexiones, debido a que no conseguía subir o bajar el volumen de reproducción. Además, algunas notificaciones se quedan en el limbo, ya que la pantalla no se enciende ni suenan al llegar, pero sí aparecen en el Centro de Notificaciones. Aún así, para ser mi primera experiencia, estoy muy contento con mi nuevo iPhone Xr y iOS 13.
iPadOS y la llegada de la productividad
Con la nueva versión de iOS, llamada iPadOS, a mi iPad Air de última generación sí he tenido que enfrentarme a algún problema más que en el teléfono móvil, pero no volvería a la versión anterior de iOS, ya que la actual me aporta muchas funcionalidades en el día a día. En primer lugar, y siendo uno de los principales motivos por los que adquirí este dispositivo, el Apple Pencil, no sé si por la constante idea de que ha ganado en latencia, me resulta más fluido en su utilización.

El escritorio de iPadOS luce espectacular. Apple
Este iPad se desorienta fácilmente
Apple ha añadido, en un movimiento muy interesante, la posibilidad de tener widgets en la primera pantalla de iconos, pudiendo dejarlos anclados a la misma. Aquí surge el primer problema, ya que si tienes activada la opción de rotación automática, pasar de modo horizontal a modo vertical, al menos en mi caso, provoca que casi nunca se lleve a cabo. Hay que bloquear y desbloquear el iPad para que todo vuelva a su sitio.
La descarga de archivos aún necesita ser pulida
La aplicación de Archivos, fundamental ahora mismo para la gestión de multitud de carpetas y documentos, también tiene un problema a la hora de revisar aquellas descargas realizadas desde Safari. En la mayoría de ocasiones, se generan un par de archivos, uno con el que se puede interactuar y otro que hay que eliminar manualmente, siendo contadas las ocasiones en que hay que reiniciar la descarga. Quitando estos detalles, diría que iPadOS también ha resultado vencedor en esta versión preliminar.
macOS Catalina y los problemas de rendimiento
Aquí es donde toca hablar mal de una versión beta del software. En este caso, mi MacBook Pro es el elemento principal en mis horas de trabajo a bordo de esta página web. A pesar de que soy un usuarios de macOS casi exclusivamente para asuntos relacionados con el trabajo y la productividad, con lo que no lo utilizo de forma intensiva durante el día, sí me resulta poco gratificante descubrir lo que es una mala versión beta. Lo primero que me gustaría decir, porque lo estoy sintiendo ahora mismo, es que el ordenador se calienta de una manera que nunca antes había notado. Las temperaturas han subido, pero no es la razón, porque me ha sucedido en días más fríos.

macOS Catalina debe mejorar mucho aún. Computer World
Es un dolor de cabeza redactar noticias en Safari
Cuando utilizo el navegador de Apple, Safari, y me dispongo a redactar algunos de los artículos que soléis leer a menudo en Urban Tecno, empieza la odisea. Apertura de pestañas ralentizada, escribir 20 caractéres para que aparezcan al cabo de cinco segundos de golpe y mal colocados o error en la descarga de ficheros es mi día a día en la beta de macOS Catalina. Por si fuera poco, algunas unidades de discos duros externos no se reconocen a la primera y algunas aplicaciones, que ya tenía instaladas, no pueden abrirse. Casi todo mal en esta nueva versión, aunque el sistema promete alegrías. Quizás a partir de octubre, ¿verdad Apple?