Aparte de fugas y huracanes, la NASA tiene otro problema para llegar a la Luna: el cohete caduca en diciembre
Artemis I se enfrenta a un posible problema derivado de los atrasos. ¿Tienen fecha de caducidad algunos de sus componentes? Todo parece indicar que sí.

En el año 1969, el ser humano llegó a la Luna gracias a una misión comandada por los Estados Unidos en plena Guerra Fría. Se convirtió en un símbolo de poder y, tal fue la inversión que requirió que, pasados ya más de 50 años, no se ha vuelto a intentar algo parecido. Esto llama todavía más la atención a sabiendas de que la tecnología actual es infinitamente mejor en todos los sentidos. La Nasa, en cambio, ha comenzado a llevar a cabo movimientos para repetir lo logrado en el siglo XX. La clave la tiene el términos Artemis.
Artemis se compone de un total de 3 misiones espaciales. La tercera de ellas se espera que pueda servir para llevar una tripulación a la Luna. Las versiones I y II se encargarán de llevar a cabo todos los movimientos previos para lograrlo. El primero de los cohetes debería haber comenzado su viaje hace ya unas semanas, pero lo cierto es que ha tenido que retrasarte en varias ocasiones debido a la presencia de condiciones climatológicas adversas y por algún que otro fallo mecánico. Esto es un problema, ya que, al parecer, esta tecnología tiene fecha de caducidad.
Veamos, por tanto, a qué provoca la tecnología que ha sido desarrollada para peinar el área próxima a la Luna, por qué estos impedimentos pueden hacer peligrar los plazos fijados a nivel teórico y, por supuesto, cuál podría ser la próxima ventana de lanzamiento que podría tener lugar a lo largo de las próximas semanas. ¿Quién nos iba a decir que la fecha de caducidad podría ser el último palo puesto a la rueda?
Artemis I y por qué caduca el cohete en diciembre de este año
Artemis I se ha enfrentado a toda una serie de problemas durante estos últimos meses, pero aún podría haber un problema añadido. Artemis I tiene algunos componentes utilizados en la maniobra de lanzamiento que tienen fecha de caducidad. De acuerdo con la información proporcionada por Gizmodo, si el lanzamiento no se realiza en el mes de diciembre, los impulsores deberán ser objeto de una inspección técnica para garantizar su buen funcionamiento. Se trata, por tanto, de un punto de especial relevancia que podría incentivar su puesta en marcha más rápidamente.
Al parecer, desde que se coloca la primera gran pieza en el cohete, el lanzamiento debería producirse en un lapso de 12 meses. En el caso de Artemis I, la primera pieza caducaría el día 9 de diciembre, y la siguiente el día 14. Se trata, por tanto, de un momento especialmente crítico. La toma de una decisión es requerida para los próximos días o, de lo contrario, podríamos estar ante un retraso muy notable en los plazos que se han venido fijando.
Son elementos especialmente complejos, por lo que habría que mover toda la estructura mediante la maquinaria que usa la NASA para transportar los cohetes. Además, esto puede suponer un gran riesgo en lo que se refiere a inversión, ya que nos encontramos ante unas operaciones que suelen traducirse en varios millones de dólares.
¿Serán los retrasos el principal problema de la misión Artemis? Cabe destacar que el primero de los intentos de lanzamiento tendría que haber tenido lugar el 29 de agosto. Desde entonces, ha habido 2 ventanas de lanzamiento en las que no ha sido posible llevar a cabo la maniobra. La primera de ellas coincidió con el huracán Ian, mientras que en la segunda la tormenta tropical Nicole fue la causante del rechazo. Sea como fuere, la misión no ha comenzado en el mejor de los escenarios posibles.
