El telescopio James Webb de la NASA consigue detectar el agujero negro supermasivo más antiguo
Una vez más, el telescopio más famoso del planeta vuelve a sorprender a propios y extraños.

Toparse con objetos cósmicos que se aproximen al momento del Big Bang, en términos astronómicos, no es algo que suceda todos los días. En este artículo, los agujeros negros son los auténticos protagonistas, aunque también te hablaremos de algunas galaxias antiguas, nada que ver con nuestra Vía Láctea, hogar del Sistema Solar, de la creación de estrellas en estos rincones del cosmos y de la evolución del universo.
El agujero negro supermasivo más viejo ha sido localizado
El telescopio más fascinante de nuestra era continúa mostrándonos lo que existe más allá de la Tierra y en esta ocasión ha conseguido encontrar una galaxia realmente lejana. Un equipo de científicos, a través de una publicación en la revista The Astrophysical Journal Letters, han identificado un anciano agujero negro, en una galaxia bautizada como CEERS 1019, que parece datar de 570 millones de años después del Big Bang.
🔭 Breakthrough discovery! NASA's Webb Space Telescope spots the universe's oldest active supermassive black hole, J0313-1806! A cosmic time capsule,this ancient behemoth offers a window into the early uni secrets.Launching in October,Webb aims to unveil more cosmic mysteries!
— Hassan Basharat (@HassanBasharat4) July 17, 2023
En este estudio también se han conseguido identificar otros dos agujeros negros, con 1.000 millones y 1.100 millones años después de la explosión cósmica, y 11 nuevas galaxias, de cuando el universo que conocemos únicamente tenía entre 470 y 675 millones de años. Esta abundancia de información ha sido recopilada gracias a la labor desarrollada en el proyecto CEERS, auspiciado por Steven Finkelstein, profesor de astronomía de la Universidad de Texas.
La galaxia en cuestión parece ser muy relevante, no sólo por su antigüedad sino por la baja masa de su agujero negro, 9 millones de masas solares, que es bastante menos de lo que otros agujeros negros supermasivos muestran, siendo la masa de algunos de 1.000 millones de masas solares. Siempre se ha sospechado que estos agujeros negros más pequeños existían, pero ahora tenemos pruebas de ello.
No es habitual poder observar galaxias tan lejanas, pero el equipo de astrónomos ha conseguido revelar la estructura de la galaxia CEERS 1019 como tres aglomeraciones brillantes en lugar de la típica forma de disco. Además, también se ha conseguido descifrar que el ratio de consumo de gas es el más elevado compatible con la formación de estrellas.
Los otros dos agujeros negros descubiertos también tienen una masa baja, unas 10 millones de veces la masa solar, y están localizados en las galaxias CEERS 2782 y CEERS 746. Dale Kocevski, del Colby College, afirma que:
Los investigadores han sabido desde hace tiempo que debían existir agujeros negros de baja masa en el universo primitivo. Webb es el primer observatorio que puede capturarlos con tanta claridad. Ahora, pensamos que los agujeros negros de baja masa podrían estar por todas partes, esperando a ser descubiertos.
