En el mar Mediterráneo hay tiburones blancos, y los más grandes de la historia se encontraron en esas aguas

El mar Mediterráneo es el hogar de millones y millones de peces y, como era de esperar, también hay presencia de tiburones. Estos, en la mayor parte de los casos, se encuentran en lo más alto de la cadena trófica, pero lo cierto es que aún hay más. ¿Es posible encontrar tiburones blancos en estas aguas? En el pasado se han producido avistamientos de estos grandes depredadores y, sin duda alguna, estamos ante un tipo de animal que es muy sibarita a la hora de escoger hábitat.

El mar Mediterráneo, con el paso del tiempo, se ha convertido en un refugio para este tipo de animales. La ausencia de pesca furtiva e indiscriminada ha permitido que pequeños núcleos familiares y dispersos hayan podido reproducirse con mayores garantías de supervivencia. Aun así, encontrarse con uno de estos en la costa sigue pareciendo algo prácticamente imposible. Pese a ello, es importante tener en cuenta que a tan solo unos pocos kilómetros de la costa es posible encontrarse con algún escualo perteneciente a la especie más aterradora.

Veamos, por tanto, qué indicadores nos demuestran que la presencia de tiburones blancos en el mar Mediterráneo es algo probable, por qué se trata de una alternativa que ha venido ganando peso en las últimas décadas y, por supuesto, hasta qué punto pueden convertirse estas aguas en algo parecido a lo que ocurre en áreas como Sudáfrica o Hawai, entre otras.

El mar Mediterráneo y el inesperado refugio de tiburones blancos

Ojalá y pudiésemos relacionar al tiburón ballena con el mar Mediterráneo, pero lo cierto es que el máximo depredador del medio marino sí tiene presencia en estas aguas. Afortunadamente, sabemos que todos los reportes apuntan a que Deep Blue, el tiburón blanco más grande del mundo, no ha visitado estas costas. Aun así, ¿por qué es preciso llevar a cabo nuevas investigaciones en torno a la presencia de estos escualos?

El tiburón blanco es el principal depredador de los mares y océanos de todo el mundo. Imagen: Wikipedia

De acuerdo con National Geographic, los primeros reportes sobre avistamientos de tiburones blancos se remontan al año 1998. Por aquel entonces, un padre estaba pescando en su pequeña lancha junto a su hijo. De repente, el hilo de la caña de pescar se tensó, habiendo picado el anzuelo una cría de un tiburón zorro. Tras intentar acercar el animal a la embarcación, otro animal más grande y perteneciente a la misma familia de peces emergió de la nada para quitar el tributo. Sin duda alguna, se trató de un tiburón blanco.

Aun así, múltiples documentos y otras pruebas sirven para comprender que la relación de estos escualos con el mar Mediterráneo no es nueva debida al cambio climático. De hecho, las antiguas civilizaciones ya sufrieron los ataques de estos increíbles y peligrosos animales. De hecho, el primer ataque documentado relacionado con este animal apunta al año 725 a.C. ¿Dónde crees que tuvo lugar? Efectivamente, en el mar Mediterráneo.

Los grandes tiburones blancos fueron, sin duda, en un momento mucho más abundantes en el Mediterráneo de lo que son en la actualidad. Alessandro De Maddalena, profesor adjunto de Zoología de Vertebrados en la Universidad de Milano-Bicocca

Es importante tener en cuenta que se está llevando a cabo un proceso de identificación a nivel mundial para detectar cómo se producen los movimientos migratorios de estos animales. Visitar el mar Mediterráneo no suele estar dentro de sus planes, pero lo cierto es que, en ocasiones, la presencia de una mayor cantidad de comida puede hacerles sentirse atraídos por estas aguas. Sea como fuere, la probabilidad de ser atacados por este depredador es muy baja, ya que únicamente se reportan unas pocas decenas de ataques anuales a nivel mundial.