¿Hay sonido en el espacio? Esto es lo que dice la ciencia
Uno de los grandes misterios de la ciencia moderna es desentrañar si existen sonidos en alguna parte del planeta, y cómo podríamos conseguir escucharlo.

El espacio, un gigantesco e infinito universo, ha sido objeto de fascinación y misterio para la humanidad durante siglos. Una de las preguntas que ha intrigado a científicos y entusiastas por igual es si el espacio está lleno de sonidos o si, por el contrario, es un lugar completamente silencioso. A lo largo de la historia, se han tejido muchas leyendas sobre los posibles sonidos del espacio, pero es la ciencia la que finalmente nos da una respuesta clara.
La mecánica del sonido nos dice que este se propaga a través de ondas mecánicas que requieren un medio material para viajar, como el aire en la Tierra. Sin embargo, el espacio intergaláctico es conocido por ser un vacío casi perfecto, con una densidad extremadamente baja de partículas. Por lo tanto, según los principios de la acústica, en el espacio no puede haber sonido tal y como lo conocemos en la Tierra. No hay moléculas en el espacio para vibrar y transmitir ondas sonoras.
- El silencio del espacio interestelar
- Sonidos de los planetas y las estrellas
- Los sonidos del espacio-tiempo
- La búsqueda de vida extraterrestre y su relación con el sonido en el espacio
- La paradoja de Fermi y la necesidad de buscar señales de radio
- El mensaje de Arecibo y otras iniciativas
El silencio del espacio interestelar
La densidad de materia en el espacio interestelar es sorprendentemente baja, alrededor de 0.127 partículas/cm3, en comparación con aproximadamente 10^20 partículas/cm3 en la Tierra. Esta falta de materia es lo que da lugar a un silencio total en el espacio intergaláctico. La ausencia de un medio material hace que no haya nada para transmitir ondas sonoras.
Sin embargo, a pesar del silencio aparente, los científicos han encontrado formas de «escuchar» al universo utilizando tecnologías avanzadas y observaciones de fenómenos cósmicos. La Agencia Espacial de Estados Unidos (NASA) ha sido pionera en la conversión de ondas electromagnéticas en ondas sonoras, lo que nos permite «oír» sonidos de objetos astronómicos lejanos.
Sonidos de los planetas y las estrellas
Aunque el espacio puede ser silencioso en términos de ondas sonoras audibles para los humanos, las sondas espaciales y los telescopios han capturado intrigantes sonidos producidos por objetos celestes. Por ejemplo, la sonda Cassini reveló el «canto» de Saturno, que es causado por las ondas de plasma intercambiadas entre el planeta y su luna Encélado. La sonda Juno también nos ha permitido «escuchar» a Júpiter, registrando un siseo agudo mientras penetraba su escudo magnético.
Además, la Tierra misma parece emitir un cúmulo de voces que resultan del efecto coro, producto de las ondas electromagnéticas emitidas en el campo magnético terrestre cuando son golpeadas por partículas solares. Estos sonidos, convertidos de ondas electromagnéticas a ondas sonoras, nos muestran que el universo está lleno de sorpresas sonoras.

Los sonidos del espacio-tiempo
Algunos de los fenómenos más violentos del cosmos, como la fusión de dos agujeros negros masivos, generan poderosas ondas gravitacionales. Según la teoría de la relatividad general de Einstein, la materia deforma el espacio-tiempo a su alrededor y los movimientos de la materia crean ondas de deformación que se propagan a la velocidad de la luz. Estas vibraciones pueden estirar y encoger el tejido del espacio, y aunque no las podemos escuchar como sonido en el sentido convencional, los científicos han desarrollado técnicas para «escuchar» las ondas gravitacionales y aprender más sobre los eventos cósmicos que las generan.
Así, el espacio es en su mayoría silencioso debido a la falta de un medio material para transmitir ondas sonoras. Sin embargo, gracias a las técnicas de sonificación y a los avances en la tecnología espacial, los astrónomos han logrado «escuchar» sonidos cósmicos provenientes de planetas, estrellas y eventos violentos en el universo.
Aunque no podamos escucharlos directamente con nuestros oídos, la ciencia nos ha proporcionado una manera de «escuchar» el universo y explorar sus maravillas auditivas. Así que la próxima vez que mires hacia el cielo nocturno, recuerda que, aunque en silencio, el espacio está lleno de agitación cósmica que espera ser descubierta y comprendida.
Sonificación: convirtiendo datos en sonidos
La sonificación es una técnica que permite convertir datos en sonidos para que puedan ser percibidos por el oído humano. Por ejemplo, las ondas electromagnéticas captadas por los instrumentos científicos pueden transformarse en señales audibles mediante un proceso de sonificación. Esto ha demostrado ser una herramienta valiosa en la investigación astronómica, permitiendo a los científicos detectar y estudiar fenómenos cósmicos de maneras que no serían posibles utilizando solo datos visuales.

La NASA ha sido una pionera en la detección de ondas gravitacionales, que son vibraciones del espacio-tiempo causadas por eventos cósmicos extremos, como la coalescencia de dos agujeros negros masivos.
La búsqueda de vida extraterrestre y su relación con el sonido en el espacio
La pregunta de si estamos solos en el universo ha sido una de las más grandes incógnitas de la humanidad. A lo largo de la historia, científicos, astrónomos y entusiastas han buscado indicios de vida más allá de nuestro planeta. Una de las herramientas utilizadas en esta búsqueda es la detección de señales de radio y la exploración de posibles sonidos extraterrestres.
¿Podrían los extraterrestres utilizar el sonido para comunicarse?
Si bien la búsqueda de señales de radio ha sido la principal estrategia de búsqueda de vida extraterrestre, algunos científicos también han explorado la posibilidad de que los extraterrestres utilicen otras formas de comunicación, como los sonidos. Específicamente, han considerado que los extraterrestres podrían comunicarse utilizando ondas sonoras de frecuencias diferentes a las que los humanos utilizan para la radio.
Sin embargo, esta idea es mucho más especulativa, ya que la propagación del sonido en el espacio requiere un medio material, como el aire en la Tierra. En el vacío del espacio, no hay aire ni moléculas para transmitir el sonido, por lo que la posibilidad de que los extraterrestres utilicen el sonido como forma de comunicación parece menos probable.
Algo que tuvo en cuenta Steven Spielberg para su película «Encuentros en la tercera fase», es que los extraterrestres podrían entender y comunicarse a través de la música.
La paradoja de Fermi y la necesidad de buscar señales de radio
En 1950, el físico Enrico Fermi planteó lo que se conoce como la «Paradoja de Fermi»: si hay tantas estrellas en el universo, muchas de las cuales tienen planetas, y algunas de esas civilizaciones extraterrestres son mucho más avanzadas que la nuestra, ¿por qué no hemos detectado ninguna señal de su existencia? Esta pregunta ha impulsado numerosos proyectos de búsqueda de vida extraterrestre.
Uno de los enfoques más conocidos en esta búsqueda es el proyecto SETI (Search for Extraterrestrial Intelligence, Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre), que se dedica a escanear el espacio en busca de señales de radio o patrones de frecuencias que puedan ser indicativos de tecnología extraterrestre. La idea detrás de esto es que las civilizaciones avanzadas podrían estar utilizando señales de radio para comunicarse entre sí, y estas señales podrían ser detectadas desde la Tierra.

SETI (Search for Extraterrestrial Intelligence) es un esfuerzo científico para detectar señales de vida inteligente más allá de la Tierra mediante la búsqueda de señales de radio o luz.
El mensaje de Arecibo y otras iniciativas
En 1974, el radiotelescopio de Arecibo en Puerto Rico envió el «Mensaje de Arecibo» al cúmulo estelar M13, a unos 25,000 años luz de distancia. El mensaje incluía información sobre la humanidad y nuestra posición en el espacio, con la esperanza de que una posible civilización extraterrestre lo interceptara y respondiera. Sin embargo, dado que M13 se encuentra a una distancia tan grande, la probabilidad de una respuesta es prácticamente nula.
Además del proyecto SETI, también se han llevado a cabo otras iniciativas para buscar señales extraterrestres. Por ejemplo, el radiotelescopio Green Bank en Virginia Occidental ha estado involucrado en proyectos similares, escuchando el espacio en busca de señales interesantes que podrían provenir de vida inteligente fuera de la Tierra.

El radiotelescopio de Arecibo, ubicado en Puerto Rico, fue el radiotelescopio más grande del mundo hasta su colapso en 2020. Era una herramienta clave en la búsqueda de señales extraterrestres y en la investigación astronómica.
¿Es posible escuchar el sonido de las ondas gravitacionales en el espacio?
No, no es posible escuchar directamente el sonido de las ondas gravitacionales en el espacio. Las ondas gravitacionales son perturbaciones en el tejido del espacio-tiempo, que se propagan a la velocidad de la luz. A diferencia del sonido, que requiere un medio material para propagarse, las ondas gravitacionales pueden atravesar el vacío del espacio sin problemas.