La gente de Nueva York quiere devolver la Estatua de la Libertad a su color original de hace un siglo
La Estatua de la Libertad no ha sido toda la vida de color verde azulado, antes era de color cobrizo y podría volver a serlo.
A lo largo y ancho de nuestro mundo hay monumentos muy famosos. Entre ellos se encuentra la Torre Effiel, el Taj Mahal, el Coliseo o la Estatua de la Libertad. En concreto esta última se ha convertido en una imagen icónica de Nueva York. Esta enorme estatua destaca por muchas cosas, incluido su color verdoso, pero ¿sabías que esto no siempre fue así? Antes era dorada y podría volver a ser así.
La Estatua de la Libertad llegó a Nueva York en 1883 tras ser regalada por Francia a la ciudad. Su construcción y montaje se alargó durante tres años hasta que fue inaugurada en agosto de 1886. El momento fue épico y todos los neoyorkinos saludaron con felicidad la estatua que iba a dar la bienvenida a partir de ahora a todos los emigrantes que llegaban a la ciudad.
Algunos en X quieren volver a ver la estatua de color dorado
Una vez inaugurada la Estatua de la Libertad presentaba un color dorado a causa del bronce con el que había sido construida. Este color fue característico durante años hasta que los agentes climatológicos empezaron a cambiarla. El bronce al oxidarse se vuelve de color verdoso, que fue lo que le pasó a la gran estatua.
Poco a poco, con el inicio del nuevo siglo las tonalidades de todo el monumento cambiaron y así se llegó al verdoso que todos hoy conocemos. Sin embargo, desde hace varios días en la red social de X muchas personas están hablando de volver al color original, al color dorado que fue en 1886.
This is unironically an awesome idea. https://t.co/1We0E6yMMT pic.twitter.com/PYsKJC4Xqw
— Samuel Hammond 🌐🏛 (@hamandcheese) September 5, 2023
Como bien ha recogido Iflscience en un artículo reciente, varios usuarios de X han estado proponiendo de forma no irónica limpiar la Estatua de la Libertad para devolverla a su color original en dorado. La verdad es que pese al tamaño del monumento no sería descabellado hacerlo. De hecho, la Torre Effiel de París cambia de color al ser pintada cada siete años.
La idea propuesta por algunos en X ha recibido miles de me gustas, pero no es un plan firme. La última vez que las autoridades propusieron restaurar el color original los neoyorkinos protestaron enérgicamente porque ya se habían acostumbrado al verdoso de la estatua.
Si en un futuro esto se acaba haciendo realidad las gentes de Nueva York podrán volver a disfrutar de la tonalidad cobriza, pero también de la repetición del proceso de oxidación. Puesto que el cobre se volvería de nuevo verdoso con el paso de los años por los agentes naturales y la lluvia ácida. El tiempo nos dirá si habrá cambios en la gran Estatua de la Libertad.