La Starship de SpaceX termina sus pruebas de vuelo y da inicio a una nueva era de megacohetes orbitales
El vuelo número 11 del coloso de ingeniería aeroespacial marca el fin de una generación y el inicio de la siguiente

Ayer, 13 de octubre de 2025, a las 18:35 horas, en horario de Texas, la Starship volvió a despegar desde el Golfo de México. Este fue un vuelo que ya queda marcado como un punto de inflexión en la historia de SpaceX, ya que además de ser el ensayo número once de la nave más ambiciosa jamás construida, también fue la última prueba de la segunda generación de Starship y la primera generación del cohete Super Heavy.
SpaceX da la bienvenida a una nueva generación de megacohetes
Desde la rampa de lanzamiento Pad 1, que también fue utilizada por última vez hace apenas unas horas, la Starship arrancó de manera simultánea sus 33 motores Raptor y se dirigió hacia la frontera del espacio exterior. La maniobra de encendido de los seis motores de la etapa superior, antes de completar la separación, volvió a ser todo un éxito y dio comienzo al vuelo espacial, tal y como relatan en el comunicado publicado en la página web de SpaceX.
Watch Starship's eleventh flight test → https://t.co/YmvmGZTV8o
— SpaceX (@SpaceX) September 29, 2025
https://t.co/zIRMX5mh9K
Mientras tanto, el cohete propulsor, conocido como Super Heavy, comenzó la maniobra de retroceso tras la separación. Con la zona de amerizaje ya planificada frente a la costa, doce de los trece motores se encendieron en una primera fase, para acabar consiguiendo un encendido completo en una excepcional maniobra. El cohete llegó a flotar sobre el agua, deteniendo su caída antes de apagarse y posarse en el océano. Este es, por cierto, un ensayo fundamental a la hora de poder tener una reutilización plena de toda la Starship.
La etapa superior tampoco se quedó atrás. Tras alcanzar la velocidad y trayectoria previstas, consiguió desplegar con éxito ocho simuladores de satélites Starlink y también logró encender de nuevo sus motores. Esta es una maniobra crítica, que está pensada para poder realizar futuras reentradas controladas y para tener éxito en posibles misiones interplanetarias. Si tenemos que dar una nota a la arquitectura Raptor de la etapa, sería todo un sobresaliente en esta ocasión.
Starship is executing a banking maneuver that mimics the final approach it would take while returning to Starbase for a catch on a future mission pic.twitter.com/t4Al1xg7Xe
— SpaceX (@SpaceX) October 14, 2025
Al regresar de la atmósfera, también se puso a prueba el escudo térmico. Sabemos que la Starship soportó las condiciones de descenso y que los ingenieros consiguieron obtener multitud de datos sobre su desempeño. Y es que, además de las condiciones habituales, estos hicieron todo lo posible por poner al límite de sus capacidades al escudo, con el fin de poder extraer el máximo de información posible.
Y es que el vuelo número 11 no solo fue un simple ensayo, sino que ha sido toda una declaración de intenciones: cerrar una generación y dar paso a la siguiente. SpaceX ya tiene varias unidades en construcción de la próxima era de la Starship, que está previsto que realicen misiones orbitales, trasvases de combustible en órbita y, por qué no soñar con ello, futuros viajes a la Luna y Marte. La era del transporte espacial reutilizable parece estar más cerca que nunca.
