Los animales más venenosos del planeta: lista completa
Estos animales tienen una mordedura tan letal que algunos de ellos pueden matarte en cuestión de segundos.

Los seres humanos somos bastante simples a la hora de defendernos de los depredadores. El Homo Sapiens es el resultado de miles de años de evolución hasta encontrar una forma física que se adapte a nuestro entorno y metabolismo, pero cuando hablamos de fuerza bruta... salimos perdiendo. Siendo mamíferos medianos no disponemos ni de zarpas ni colmillos ni nada por el estilo, ni siquiera nuestras articulaciones están diseñadas para soportar demasiado peso. Aún así estamos en la parte alta de la cadena alimenticia, pero se lo debemos al cerebro principalmente, que nos ha ayudado a adaptarnos a nuestro entorno y usarlo a nuestro favor.
Sin embargo, los humanos tenemos nuestro tamaño e intelecto, pero un insecto diminuto podría romper fácilmente nuestra línea de defensas y ni nuestro sistema inmune ni nuestros grados universitarios pueden hacerle frente a la terrible amenaza. Hablamos del veneno, uno de los mecanismos de defensa más sorprendentes que nos ha regalado la naturaleza. Las criaturas venenosas poseen un arma letal capaz, en algunos casos, de acabar con presas o amenazas que multiplican por diez su tamaño.
Los 18 animales más venenosos del mundo
En el planeta hay muchas especies que utilizan el veneno para paralizar o directamente acabar con sus presas, y no todos son igual de letales. Si analizamos los componentes químicos del veneno y cómo este afecta a sus presas hay ciertas especies que destacan por encima del resto. En esta lista os enumeramos, sin ningún orden concreto, algunos de los animales más venenosos del planeta.
El topo europeo
Probablemente no esperabas encontrarte a los topos en esta lista, pero estos pequeños mamíferos no se andan con tonterías. Son animales excavadores y con un pobre sentido de la vista, pero lo compensan con una saliva venenosa para paralizar a sus presas en cuestión de segundos.

En humanos no tiene ese efecto, pero para las lombrices (que es el principal sustento de este animal) es letal. Tras la mordedura, las toxinas de la saliva penetran en el organismo de la lombriz y la paralizan, sin matarla. Es la manera que tiene el topo de mantener la comida fresca en todo momento.
La musaraña
Las musarañas son uno de los pocos mamíferos venenosos que nos encontramos en la Tierra. El veneno no se suministra a través de cavidades en los colmillos, como las serpientes, pero no se aleja demasiado. Las musarañas tienen unas glándulas en la base de los incisivos que dejan fluir el veneno en forma de saliva a través de unos surcos que tienen en los dientes.

La mordida de este animal es letal para sus presas y tremendamente dolorosa para otros pequeños mamíferos, pero los humanos no deberíamos preocuparnos demasiado por ella. Curiosamente, el veneno que nos inyecta no se diferencia mucho del de algunos reptiles.
El ornitorrinco
Otro animal que la gran mayoría de vosotros no se esperaría encontrar en esta lista, pero aquí está. Los ornitorrincos son unos animales extraordinarios, son mamíferos que ponen huevos y cuya anatomía parece un collage de partes del cuerpo de diferentes especies. Estos animales son naturales de este de Australia y de la isla de Tasmania, y aunque mucha gente no lo sabe, son venenosos.

Los ornitorrincos son capaces de acabar con sus presas gracias a sus patadas venenosas. Sí, has leído bien, los espolones en las patas de esta especie están impregnados de veneno lo suficientemente fuerte como para acabar con un perro mediano. La toxina que liberan no es letal en humanos, pero aún así no te recomendamos acercarte a las extremidades inferiores de este animal. Estos animales todavía no se encuentra en peligro de extinción, pero está justo al borde de que la Red List la catalogue como amenazada.
El monstruo de Gila
El nombre de esta especie ya atemoriza, y no es para menos. El monstruo de Gila es una de las dos únicas especies de lagartos venenosos en todo el planeta. Son animales originales de América del Norte, pueden llegar a superar los 60 centímetros de largo y son depredadores natos. Normalmente se alimentan de ratones, ranas, ardillas o otros mamíferos pequeños, pero si uno de estos te muerde, estás en problemas.

El veneno del monstruo de Gila no es letal para los humanos, pero una mordedura puede causar un intenso y agudo dolor. El veneno proviene de unas glándulas situadas en la mandíbula inferior, y fluye al exterior a través de unos surcos presentes en los dientes. Si este animal te muerde, podrá provocarte serias hemorragias, bajada en la presión arterial y una sensación de dolor punzante que puede extenderse hasta los 5 días.
Serpiente marrón rey
El ejemplo perfecto de lo letal que puede ser la fauna australiana. Esta serpiente habita en las zonas del norte, este y centro del país, y es considerada la serpiente venenosa más grande de Australia. Este animal puede llegar a medir los dos metros y medio de largo, pero quizá el tamaño nos haga un favor a los que estamos expuestos a su mordedura. Vas a querer ver venir a esta serpiente, ya que si te coge desprevenido, puede ser lo último que hagas.

Esta especie no es una de las más letales para humanos, de hecho llevamos ya muchas décadas sin un ataque mortal a su nombre. La mordedura, si no se trata a tiempo, puede ocasionar necrosis local y un intenso e insoportable dolor, que en el peor de los casos deriva en la necesidad de amputación o en la muerte. Lo curioso es que esta serpiente es capaz de inyectar una enorme cantidad de hasta 150mg de veneno de una mordida.
La araña reclusa
Esta, junto con la Viuda Negra, es una de las arañas más letales de todo el continente americano. Su veneno puede provocar una grave necrosis en la zona afectada, y los síntomas varían entre náuseas, vómitos, fiebre, erupciones cutáneas y dolor muscular y articular. No es un veneno mortal para el ser humano, aunque en algunos casos se ha documentado que su mordedura ha llegado a provocar coágulos en la víctima, que en algunos casos ha derivado en fallecimiento.

Por fortuna para nosotros, no es una araña particularmente agresiva. La mayoría de las picaduras de esta especie son accidentales, en defensa propia, y solo suelen morder cuando son presionadas contra la base de la piel. Sus colmillos no son lo suficiente largos como para traspasar la tela de la ropa, en la mayoría de los casos. Lo más habitual es que las mordeduras se sucedan con despistes a la hora de calzarse o ponerse unos guantes de trabajo.
La raya azul moteada
Este habitante del Océano Índico tropical y Pacífico occidental esconde un peligroso aguijón venenoso en su cola. A pesar de su aspecto inofensivo y su tamaño, la picadura de este animal puede ocasionar en humanos un dolor agudo que se puede mantener latente durante horas. No es un veneno letal para nosotros, pero es la herramienta principal de este animal para acabar con sus presas (que suelen ser peces o pequeños moluscos) en segundos.

Quería introducir a esta raya en la lista dado que, aunque el veneno no es letal para humanos, la picadura sí puede serlo. Estos animales suministran el veneno a través de un aguijón en la cola, que utilizan a modo de arpón. Steve Irwin, el conocido naturalista, falleció en 2006 a causa de una picadura de este animal, que le atravesó el corazón de un latigazo con la cola.
La viuda negra
Sin duda, la subespecie de araña más famosa del mundo. Además de dar vida al superhéroe de Marvel, esta araña es célebre por ser una de las más peligrosas del planeta. Son animales que habitan en diferentes zonas de latinoamérica y EEUU, y son animales solitarios y caníbales. Pese a la fama que se le atribuye, estas arañas no son particularmente agresivas.

El veneno que producen es neurotóxico, y bloquea la transmisión de impulsos nerviosos, paralizando el sistema nervioso central. El veneno de esta especie raramente resulta letal, pero puede generar un intenso dolor abdominal y dificultad respiratoria. En niños y personas adultas enfermas, puede provocar la muerte.
El crótalo adamantino
El crótalo adamantino o cascabel diamantino del este es la serpiente más venenosa de norteamérica. Pertenece a la familia de las víboras y es la serpiente de cascabel más larga de los EEUU, título que sostiene gracias a sus 240 centímetros de longitud máxima. Es una especia que se encuentra en zonas rurales principalmente a la altura de Florida, y cuya mordida es letal para el ser humano.

Cuando te clava los colmillos, este animal es capaz de inyectarte una dosis de veneno de entre 400 a 1000mg, dependiendo de la mordida. Una dosis de tan solo 100 o 150mg puede acabar con la vida de un ser humano si no se trata la mordedura en el momento del ataque.
El pez león
Que no te engañe su indiscutible belleza, el pez león es un animal más peligroso de lo que parece. Dos de los radios o "púas" de su aleta dorsal están equipados con glándulas venenosas que liberan una toxina que en humanos puede causar una parálisis respiratoria, insuficiencia circulatoria y episodios de fiebre.

Al ser un animal tan hermoso, muchos buzos se han acercado demasiado para apreciarlo, y han sufrido las consecuencias. Cuando este animal se ve acorralado se zarandea con el objetivo de arañarte o pincharte con sus extremidades venenosas. Si lo consigue, estarás dos días con intenso dolor y dificultad para respirar. Es un animal peligroso, pero no letal en la gran mayoría de los casos.
El pez piedra
El que sí es letal es el pez piedra. Este animal vive a ras de suelo en el fondo marino, y es muy difícil de ver a simple vista gracias a su habilidad innata para mimetizarse con su entorno. Sin embargo, el camuflaje no es su mecanismo de defensa principal, para esto tiene su poderoso veneno.

Pez piedra
Este animal tiene en la espalda 13 espinas protuberantes que inyectan una neurotoxina capaz de acabar con un ser humano adulto en cuestión de horas. Si no se trata la picadura, el veneno del pez piedra causará un insopòrtable y agónico dolor que desembocará en la muerte en tan solo 6 horas.
El krait común
Esta serpiente es una de las más peligrosas de la India y Bangladesh, donde el 50% de las muertes por mordedura de serpiente son a causa de este animal. Es una serpiente principalmente nocturna, y prácticamente todos los encuentros que tiene con humanos son de noche. El gran peligro de esta especie es que su mordedura no duele, y muchas víctimas no se dan cuenta de que les han mordido hasta que se empiezan a manifestar los primeros síntomas.

El veneno neurotóxico provoca que los músculos de la cara se tensen, y dificulta la respiración. Si no se trata la mordedura, hay entre un 70 u 80% de posibilidades de que la víctima muera en el transcurso de cuatro a ocho horas.
La Mamba negra
Esta es una de las serpientes venenosas más célebres del planeta, y tiene bien merecida su fama. Es la segunda serpiente venenosa más grande, con una media de tamaño entre los dos y los tres metros. Viven tanto en tierra como en los árboles, y son capaces de moverse a grandes velocidades en distancias cortas, alcanzando hasta los 20kmph. El nombre le viene atribuído por el color negro azulado de sus fauces cuando las abre en actitud desafiante.

Su veneno es extremadamente peligroso, ya que contiene una mezcla letal de neurotoxinas y cardiotoxinas. Con una inyección superficial puede administrarte una dosis letal que hace que te colapsen los pulmones en cuestión de minutos. Además, es capaz de suministrar mucho veneno con cada mordida.
La King Cobra
Si la mamba negra era la segunda serpiente venenosa más grande, aquí tenemos a la medalla de oro. Este gigante reptil habita en zonas de la India, China, Tailandia, Indonesia y alrededores y mide de media 5 metros de largo. Es considera para muchos como la "reina" de todas las serpientes, de ahí su nombre y la infinidad de apodos que se le atribuyen: la serpiente real, la comedora de serpientes...

Su veneno se compone principalmente de neurotoxinas, y de una sola mordedura puede inyectarte de 200 a 500 miligramos, una dosis letal para cualquier humano. La particularidad de esta especie es que tiene la capacidad de escupir pequeñas descargas de veneno, y si el líquido te entra en una herida o en los ojos, ya puedes despedirte. Con tan solo 7 mililitros, el veneno de esta serpiente es capaz de matar a un elefante.
El escorpión acechador de la muerte
Es escorpión amarillo o "acechador de la muerte" es una de las especies más letales, y habita en el norte de África y en Oriente Medio. Habita en zonas principalmente desérticas y su longitud varía entre los 9 y los 11 centímetros. No es un escorpión particularmente grande pero su veneno es increíblemente peligroso.

La picadura de este escorpión contiene un elevado número de neurotoxinas, pero en la gran mayoría de los casos las dosis inyectadas no son mortales. Aún así puede acabar con la vida de un adulto con problemas cardíacos o un niño. La particularidad de su veneno es que contiene péptido clorotoxina, un elemento que tiene un papel importante en los nuevos tratamientos contra tumores cerebrales en humanos. Un litro de su veneno puede venderse por aproximadamente 10 millones de dólares.
El caracol cono
Este animal, que parece un caracol ermitaño inofensivo, es en realidad un peligroso depredador. Estos animales habitan en arrecifes de coral y utilizan un poderoso arpón impregnado en veneno para acabar con sus presas. Es un animal con un rango de movimiento muy limitado, pero la velocidad con la que puede "disparar" su aguijón no le da capacidad de reacción ni a los peces más rápidos.

El veneno se compone por una amalgama de compuestos diferentes, con diferentes tipos de neurotoxinas y un cóctel de péptidos que es capaz de acabar con la vida de un adulto si la picadura no se trata. Curiosamente, el veneno de estas especies ha demostrado que puede ayudar a crear tranquilizantes para uso médico 1000 veces más eficaces que la morfina.
El pulpo de anillos azules
Pese a su indiscutible belleza, estos pulpos son uno de los animales más venenosos del planeta. Habitan en las aguas poco profundas del Océano Pacífico, y no sus tentáculos miden de media unos 10cm. Son fácilmente distinguibles gracias al vibrante color amarillo del cuerpo con anillos azules repartidos por toda la superficie. Se alimentan principalmente de pequeños peces y cangrejos, pero si tienes la mala suerte de que te muerda, ve diciendo adiós.

Una dosis de veneno de estos animales contiene tetrodotoxina, una poderosa neurotoxina que bloquea los canales de sodio, causando una parálisis motriz. A día de hoy no existe una cura para tratar la picadura de este animal, cuyo veneno actúa en cuestión de minutos. En tan solo media hora puede acabar contigo. Una sola dosis tiene veneno suficiente para acabar con 26 hombres.
La avispa de mar
En este artículo hemos enumerado algunos de los animales con el veneno más potente del planeta, pero no necesariamente en orden. Sin embargo, nos hemos dejado al rey para el final, ya que este animal es considerado como la criatura viva más letal del planeta. Se trata de la avispa de mar, una peligrosa medusa que habita principalmente en las costas australianas. De ella brotan más de 70 tentáculos de 80 centímetros cada uno.

Si uno de esos tentáculos te roza la piel, estás sentenciado. Tras el primer contacto ya experimentarás un dolor casi insoportable, con visible irritación y escozor en la piel. Cuando pasen 20 minutos sufrirás el síndrome irukandji, que provocará intenso dolor en todo el cuerpo y triplicará tu ritmo cardíaco. A raíz del acelerón, la tensión sanguínea también se duplica, lo cual desemboca en una embolia cardíaca e, inevitablemente, en la muerte.