Los arqueólogos se quedan sin palabras ante este hallazgo de época romana. Tiene más de 2.000 años
El hallazgo de un túmulo sin restos humanos desvela la unión de tradiciones romanas y celtas en el estado de Baviera

El descubrimiento de los cimientos de un mausoleo romano en Alemania parecen haber desconcertado a la comunidad arqueológica y, de paso, haber abierto una nueva ventana al pasado de la provincia, antiguamente conocida como Raetia. Estamos ante un territorio que resultó clave en la expansión del Imperio Romano hacia el norte y que, además, nos ofrece una visión mucho más amplia de su encuentro con otras culturas en el viejo continente.
El increíble y monumental mausoleo romano de Baviera
Acudimos hasta el comunicado publicado por la Oficina Estatal de Baviera para la Protección de Monumentos para explicarte el hallazgo realizado junto a la localidad de Wolkertshofen, ubicada en el distrito de Eichstätt. De manera resumida, estamos ante un túmulo funerario monumental, pero con la curiosidad de que se trata de un tipo de construcción prácticamente desconocida en esta región del sur de Alemania.
Los arqueólogos de la Oficina Estatal de Baviera para la Protección de Monumentos ha identificado un círculo de piedra de doce metros de diámetro, que parece que fue construido con gran precisión y que está situado junto a una antigua vía romana. En uno de sus laterales aparece una pequeña estructura cuadrada, conocida como anexo, de dos metros que, según los expertos, pudo sostener una estatua.

Imagen del anexo cuadrado donde pudo haber estado erigida una escultura romana
También se sabe que el interior del túmulo estaba completamente vacío, algo que resultó clave para comprender el mausoleo recién descubierto. Este dato indica que no se trata de una tumba convencional, sino de un monumento conocido como cenotafio, es decir, una tumba vacía que se construye para honrar a alguien que ha sido enterrado en otro lugar. Mathias Pfeil, el conservador general, afirma:
No esperábamos descubrir aquí un monumento funerario de esta época y tamaño. El túmulo se encontraba justo en una importante ruta de tráfico romana, por lo que la familia creó un símbolo ampliamente visible para el difunto. La tumba era a la vez un lugar de recuerdo y una expresión de estatus social.
Entonces, ¿quién habría encargado la construcción de este monumento? Según la investigación, parece que estaba erigido cerca de una finca agrícola de alto nivel, con lo que su construcción pudo haber sido encomendada por una famila local de la élite, que tenía recursos más que suficientes para poder invertir en piedras talladas, en mano de obra especializada y, además, ubicar el cenotafio en un enclave estratégico, ya que aquella era la ruta que unía la población de Nassenfels con el valle del Altmühl.

Trabajo de campo en el círculo de piedras descubierto al norte de la localidad de Wolkertshofen
Este túmulo, descubierto durante las obras de un depósito de aguas pluviales en otoño de 2024, aporta una mayor comprensión entre la fusión de la tradición romana y la tradición celta. El monumento combina mausoleos circulares, propios del Mediterráneo, y montículos funerarios, más habituales en la zona centroeuropea.
Sabemos que la provincia de Raetia, y ahora también este cenotafio de Wolkertshofen, es uno de los lugares donde mejores muestras del mestizaje de culturas podemos encontrar en el norte del continente. Y es que el túmulo romano que protagoniza esta noticia apenas tiene comparación en todo el área de Baviera. Es por ello que este descubrimiento es una pieza fundamental para entender cómo la cultura romana se mezclaba con tradiciones de otras regiones cuando se extendía lejos de Italia. Y tenemos cada vez más pruebas de ello.