Los astrónomos se echan las manos a la cabeza. Un asteroide que venía hacia la Tierra resulta ser un coche lanzado al espacio por Elon Musk
El mandamás de la compañía celebró por todo lo alto el hito, que ahora parece querer regresar a nuestro planeta

Ocurrió en el año 2018. Desde la plataforma 39A de la NASA, en el Kennedy Space Center, tuvo lugar el lanzamiento del primer Falcon Heavy y, en el interior del cohete, se encontraba un Tesla Roadster color rojo cereza medianoche. Una broma realizada en la actual red social X por parte de Elon Musk, acabó convirtiéndose en una de las imágenes más icónicas de la historia de los lanzamientos espaciales. Sin embargo, parece que el coche ha regresado a las inmediaciones de su anhelado planeta.
El asteroide que tenía la forma de un coche de Tesla
A principios de este mes, un astrónomo amateur parecía haber descubierto un nuevo asteroide, bautizado como 2018 CN41, que se encontraba en la trayectoria de la Tierra. Su recorrido le había llevado a pasar a uno 240.000 kilómetros de nuestro hogar, mucho más cerca que la propia órbita de la Luna. En un primer instante, el peligro de colisión con la Tierra parecía ser bastante real.
Fue el Centro de Planetas Menores, un organismo del Observatorio Astrofísico Smithsoniano, el que emitió un comunicado, publicado el día 2 de enero de 2025, en el que se especificaban las características del objeto celeste. Sin embargo, en menos de un día, dicho comunicado fue desmentido por la propia institución, que acabó por desvelar la naturaleza del objeto.
La información publicada al día siguiente aseguraba que no estábamos ante un asteroide que surcaba el espacio exterior, sino que se trataba del Tesla Roadster que había sido lanzado desde las instalaciones de la NASA en el año 2018. De hecho, el nuevo comunicado afirmaba:
La designación de 2018 CN41, anunciada en MPEC 2025-A38 el 2 de enero de 2025, está siendo eliminada (...) Al día siguiente, pudimos comprobar que la órbita coincidía con el objeto artificial 2018-017A, la etapa superior del Falcon Heavy con el Tesla Roadster. La designación 2018 CN41 está siendo borrada y será catalogada como omitida.
El medio Independent asegura que el astrónomo amateur que se encuentra detrás del fallido descubrimiento del asteroide dijo estar "enfervorizado" cuando envió la identificación al Centro de Planetas Menores, aunque empezó a tener dudas acerca de la naturaleza del objeto cuando comprobó cuál era su órbita.
Jonathan McDowell, astrónomo del centro de astrofísica Harvard-Smithsonian, fue el que confirmó las sospechas iniciales del astrónomo amateur, únicamente conocido por la inicial G, posteriormente. Jonathan asegura:
El lanzamiento del Falcon nunca cruzó por mi mente. Casi tomo la conclusión de que era un NEO real (un objeto cercano a la Tierra) y dejo de buscar, pero pregunté por la Lista de Correo del Centro de Planetas Menores, solamente para eliminar esos pensamientos finales.
El propio G, el astrónomo amateur anónimo, asegura que "por lo menos, conseguimos filtrar algunas observaciones de no-planetas-menores de la base de datos del Centro de Planetas Menores". Ahora, queda por averiguar qué es lo que sucederá con el Tesla que vaga por el espacio y que parece que quiere volver a visitar a sus creadores en la Tierra. No parece que exista riesgo de colisión, y si esto sucediese, parece casi seguro que el vehículo se desintegraría al atravesar nuestra atmósfera.