Tres cosas que puedes comprar y que seguramente no sabías que tienen tecnología de la NASA
La NASA ha creado muchas patentes en su historia. ¿Cómo se han utilizado después? He aquí 3 ejemplos clave.

La NASA cuenta con presupuestos increíbles para poder desarrollar todo tipo de innovaciones. Al fin y al cabo, la búsqueda de productos interesantes que puedan servir para mejorar las condiciones de los astronautas en el ámbito espacial es una de las principales premisas desde hace unas décadas. Gracias al desarrollo de esta política, hemos podido disfrutar de importantes novedades tecnológicas a lo largo de este tiempo. Algo parecido puede decirse del sector de la Defensa, el cual nos ha otorgado una serie de soluciones de gran valor añadido.
¿Cuáles son los inventos que nos han permitido disfrutar, por ejemplo, de una mayor calidad de vida? Entre las propuestas que han encontrado una segunda vida comercial ha sido el conocido papel de aluminio que todos conocemos. ¿Quién no ha usado este tipo de producto para envolver un bocadillo? Es, sin duda, un material muy cómodo que surgió como elemento clave ignífugo en el campo de la ingeniería aeroespacial. Hay otros ejemplos igualmente interesantes, pero vamos a centrarnos en 3 opciones en particular.
Veamos, por tanto, cuáles son las claves para entender por qué la NASA consiguió ofrecer segundas utilidades a determinadas aleaciones o productos, cuáles son las claves que determinaron su estandarización en el mercado y, por supuesto, hasta qué punto es posible que se disponga de nuevas soluciones en el medio y largo plazo. La clave radica en su capacidad para desarrollar programas de investigación con presupuestos millonarios y de gran envergadura.
La NASA y su gran tradición para obtener tecnologías con aplicaciones prácticas
La NASA está en constante búsqueda para mejorar sus propuestas de lanzamiento y, sobre todo, para obtener la información preciada sobre el Universo. Para ello, dispone de un equipo de profesionales que se encarga de la producción de toda una serie de aleaciones, así como el desarrollo de otras muchas tecnologías que, en ocasiones, nos permiten disfrutar de tecnologías de nueva factura. He aquí 3 de los ejemplos más características que se pueden encontrar en el mercado.
Tecnología LiDAR para predecir catástrofes naturales y calidad del aire
¿Cómo medir la calidad del aire en un determinado lugar? Es cierto que hay una serie de productos que se encargan de absorber aire ambiental para, posteriormente, analizarlo. Sin embargo, hay otra forma para medir la calidad del mismo. Para ello, basta con utilizar un radar con sensor LiDAR parecido al que se puede observar en la industria del coche autónomo. Gracias al uso de un rayo láser en particular, es posible disfrutar de un análisis poco después del comienzo de la exposición.
Otro de los usos interesantes de esta tecnología nacida para desarrollar su función en el ámbito aeroespacial lo podemos encontrar en la montaña. Este tipo de rayo láser permite conocer la profundidad a la que se encuentra la roca en caso de estar cubierta por una capa de hielo. Gracias a esta tecnología, es posible anticipar los efectos del cambio climático y, por supuesto, predecir la cantidad de agua que hay en un determinado estadio de la montaña.
Es importante precisar que este tipo de tecnología fue utilizado en la misión que llevó al rover Perseverance a la superficie de Marte. Se trata, por tanto, de una tecnología que, si es objeto de investigación, puede incorporar nuevas funciones adicionales en el medio y largo plazo. Todo dependerá de si el sector privado está dispuesto a llevar a cabo nuevos programas de investigación al respecto.
Una aleación de aluminio creada en exclusiva para la mecánica de una nave espacial
En una plataforma de lanzamiento de una nave espacial, junto a sus correspondientes tanques de combustible, es necesario aislar determinados elementos clave. La temperatura supera, fácilmente, los 1.000 grados centígrados, por lo que es fundamentar disponer de materiales aislantes. Una nueva aleación de aluminio, denominada NASA-427, fue introducida en el programa de cohetes Ares de la NASA. Posteriormente, la empresa Evinrude decidió incorporar esta solución en el ámbito privado.

Evinrude introdujo la aleación creada por la NASA en sus motores fueraborda. Imagen: Recambios Evinrude
Esta firma se encarga de la producción de motores fueraborda. Se pudo comprobar cómo la gama de motores E-TEC incorporaba esta nueva propuesta entre su equipamiento. Gracias a su uso, se conseguía disponer de un aislante que permitía un mayor desarrollo de potencia sin que hubiera una problemática con el sobrecalentamiento. De repente, la flexibilidad para incrementar el caballaje de estos motores era muy superior a todo lo que había habido en el pasado.
De igual manera, este tipo de aleaciones se ha mostrado muy óptima a la hora de llevar a cabo otro tipo de proyectos, tales como su incorporación en pinzas de freno, ruedas de aluminio y otros elementos clave susceptibles al calentamiento producido por el rozamiento.
Aerogel, la solución para combatir el frío mediante las prendas de ropa
Tradicionalmente, hemos estado acostumbrados a combatir el frío con capas de ropa con materiales tales como la piel, el plumón u otras soluciones extraídas directamente de los animales, como el borrego. Ahora bien, ¿sabías que el aerogel es cada vez más utilizado en la industria textil? Sus características le permiten a esta innovación hacerse un hueco en este peculiar mercado.
El aerogel es una solución que permite la creación de prendas de ropas que no requieran una gran cantidad de capas, por lo que lo que la ligereza es una de sus principales cualidades. En términos de nicho, las empresas que acostumbran a crear ropa para la práctica de deportes de montaña tienen un gran recorrido a la hora de introducir este tipo de innovaciones.
De igual manera, el aerogel de polimida transparente podría utilizarse en otros ámbitos muy distintos. De acuerdo con la información que ofrece la NASA, su resistencia le permitiría sustituir al vidrio como elemento determinante en las lunas de los vehículos. Al fin y al cabo, esto tendría una implicación directa en el consumo energético y en la eficiencia del conjunto. Se trata, por tanto, de un elemento clave para disfrutar de deportes en los que el frío puede marcar la diferencia.
