Corea del Norte enseña sus misiles balísticos en una presentación inaudita en la que sale Kim Jong-un
Imágenes oficiales muestran la producción continuada de misiles balísticos de corto alcance pese a las sanciones internacionales
Corea del Norte ha enseñado algo muy poco habitual: cómo fabrica sus misiles. Los medios oficiales del país han publicado imágenes de una fábrica donde se ven varios misiles balísticos en plena producción. En concreto, aparecen al menos dos versiones del misil Hwasong-11. Las fotos no solo sorprenden por mostrar la fabricación de estas armas, sino por la aparición del líder norcoreano, Kim Jong Un.
Corea del Norte enseña su fábrica de misiles Hwasong-11
Este no es un movimiento propagandístico típico del país asiático. En multitud de ocasiones, el máximo dirigente de la hermética nación monta escenas perfectamente orquestadas para enseñar las bondades de su ejército y el peligro que supondría entrar en conflicto con ellos. Sin embargo, en esta ocasión, las imágenes no muestran un escenario preparado, sino filas de misiles completos o casi terminados, dispuestos en lo que parece una cadena de producción real.
Para muchos expertos, según lo publicado en la página especializada Army Recognition, esa falta de preparación previa no es habitual en la comunicación norcoreana y sugiere que existe un mensaje calculado: el programa de misiles no solo sigue vivo, sino que está funcionando a pleno rendimiento.

Misiles Hwasong-11 dispuestos en una fábrica norcoreana
El análisis de las imágenes indica que se están fabricando de forma simultánea dos versiones de los misiles Hwasong-11, conocidas fuera del país como KN-23 y KN-24. Y ambas comparten una característica clave, ya que utilizan combustible sólido. Gracias a ese tipo de propulsión, estas armas pueden estar almacenadas durante mucho tiempo y estar listas para su lanzamiento con muy poca preparación.
Si tenemos que destacar las principales características de estas armas, podríamos decirte que el Hwasong-11 KN-23 es capaz de alcanzar objetivos situados entre 400 y 800 kilómetros y se lanza desde vehículos móviles. Eso significa que es capaz de moverse, ocultarse y disparar sin apenas aviso. Y como no sigue una trayectoria alta y previsible, deja muy poco margen de reacción y dificulta que sistemas defensivos.
Por su parte, el Hwasong-11 KN-24 sacrifica alcance para ganar precisión. Este misil está pensado para golpear objetivos muy concretos, como bases militares o infraestructuras clave. Pero, como imaginarás, más allá de especificaciones técnicas, el mensaje que quiere lanzar Corea del Norte es político. Mostrar que puede fabricar varios modelos de misiles al mismo tiempo es una clara señal de que su industria militar funciona con normalidad, pese a las sanciones internacionales.
Sin embargo, los misiles Hwasong-11 son solo una parte de un programa armamentístico mucho más amplio, que incluye armas de mayor alcance y nuevas tecnologías. Ahora, con estas nuevas imágenes, el país asiático está dejando claro que su capacidad militar no se ha frenado y que continúa siendo un rival temible en hipotéticos escenarios bélicos.