Ucrania prueba su robot: puede transportar munición y quitar minas. Podría ser clave para la guerra
Ucrania tiene un nuevo "perro robot" con cuatro ruedas que podría utilizarse para llevar munición a los lugares indicados. Se llama DODGER y es una solución inteligente para evitar bajas inncesarias
En el vertiginoso escenario de la guerra moderna, la tecnología se erige como un pilar fundamental, transformando no solo las tácticas, sino la propia naturaleza del conflicto. Cada avance, por pequeño que sea, busca ofrecer una ventaja decisiva. La automatización y la robótica han irrumpido con fuerza en este ámbito, prometiendo soluciones para las tareas más peligrosas y repetitivas, salvaguardando así la vida de los combatientes y optimizando los recursos. Es una carrera contrarreloj por la innovación.
En medio de la tensión y la necesidad, emergen nuevas herramientas diseñadas para operar en los entornos más hostiles, redefiniendo los límites de lo que es posible en el campo de batalla. Un desarrollo reciente ilustra esta tendencia de añadir soluciones tecnológicas de última generación tales como los drones, que se han convertido en un pilar fundamental.
DODGER, la silenciosa máquina de guerra ucraniana que promete revolucionar el conflicto
Ucrania ha dado un paso significativo en la modernización de sus capacidades militares con la introducción de un robot terrestre multipropósito, actualmente en fase de pruebas operativas. Este vehículo no tripulado, diseñado para ser un activo crucial en las líneas de combate, tiene la capacidad de transportar cargas pesadas, incluyendo municiones, y, lo que es aún más relevante, desempeñar un papel vital en la remoción de minas según apuntan desde el medio especializado Interesting Engineering.
The Ukrainian MoD authorized the "DODGER" UGV for service in the Ukrainian military. Reportedly capable of carrying up to 250 kg, it can be used for minelaying, logistics, and CASEVAC. https://t.co/xnHQeuZWww pic.twitter.com/xkpgaWQgIJ
— John Hardie (@JohnH105) June 23, 2025
El prototipo, concebido como una plataforma robusta y adaptable, está siendo evaluado en condiciones reales para garantizar su fiabilidad en el campo. Su capacidad para llevar hasta 250 kilogramos de equipo o suministros lo convierte en un valioso apoyo logístico, reduciendo la exposición del personal a los riesgos inherentes al traslado de materiales bajo fuego enemigo.
Pero es su función de desminado la que podría marcar una diferencia estratégica. La guerra actual ha dejado vastas extensiones de terreno sembradas de artefactos explosivos, dificultando el avance y poniendo en peligro tanto a militares como a civiles. La habilidad de este robot para identificar y neutralizar estas amenazas de forma autónoma representa un avance significativo en la seguridad de las operaciones.
Este desarrollo no solo subraya la creciente dependencia de la tecnología robótica en el teatro de operaciones moderno, sino que también refleja la urgencia de Ucrania por encontrar soluciones innovadoras que puedan mitigar algunas de las mayores amenazas que enfrentan sus fuerzas. Un robot con estas capacidades podría no solo salvar vidas, sino también acelerar la movilidad de las tropas y la recuperación de áreas disputadas, alterando potencialmente el equilibrio en el conflicto. La integración exitosa de este tipo de sistemas podría ser un punto de inflexión, al permitir una mayor eficacia operativa con un menor riesgo humano.