El coche eléctrico y las multas de tráfico, la curiosa correlación que existe en Holanda
¿Quién nos iba a decir que poseer un coche eléctrico nos puede hacer caer en la trampa del radar de velocidad? Este es el fenómeno que está produciéndose en Holanda.

El coche eléctrico cuenta con toda una serie de ventajas y desventajas respecto a las mecánicas que equipan los automóviles tradicionales. Entre las virtudes podemos destacar un comportamiento más dinámico, la no emisión de partículas contaminantes o el menor coste de mantenimiento, entre otros.
Entre sus desventajas, llama la atención su dificultad para encontrar puntos de carga rápida, el mayor precio que tienen las opciones de partida o la baja autonomía que tiene esta alternativa. Para los próximos años, se espera un fuerte crecimiento en su demanda, lo cual podría desencadenar en un incremento exponencial de los ingresos de las arcas públicas.
La recaudación por multas se está incrementando de la mano del coche eléctrico
La vía para la obtención de fondos podría ir de la mano de la mano de las multas y sanciones de tráfico. ¿El porqué? Para observar esta curiosa interpretación sobre el incremento de la recaudación futura habría que mirar el modelo que está teniendo lugar en Holanda. Con una creciente presencia de opciones eléctricas, se está produciendo el siguiente fenómeno.
¿Por qué el erario público está obteniendo cada vez mayores fondos a través de las multas de tráfico? Para entenderlo mejor, es necesario acudir a una de las principales fortalezas de las mecánicas eléctricas; la capacidad de aceleración. Bajo esta tecnología, se cuenta con una presencia del par máximo instantáneo, lo cual repercute directamente en esta especificación.
Como consecuencia de ello, los radares móviles y fijos situados en las principales ciudades de Holanda están 'cazando' a un mayor número de usuarios que apostaron, en su día, por una alternativa sostenible con el medioambiente. Veamos cómo se ha conseguido establecer esta correlación positiva entre ambas variables.
Unos datos que confirman la relación positiva entre estos parámetros
Según se puede leer en el portal de noticias Electrek, a raíz de los datos publicados por la oficina nacional de estadísticas CBS, hasta el 66% de los conductores de automóviles con tecnología eléctrica ha recibido una multa por exceso de velocidad en el último año. Tal y como podrás imaginar, esto se está convirtiendo en un filón para las arcas del Estados del país del norte de Europa.
Esta correlación no es tan evidente si comparamos los datos con los registrados por los usuarios que todavía cuentan con automóviles basados en el uso de recursos fósiles. En los mismos resultados llama la atención ver cómo el 28% de los conductores de vehículos con motores de gasolina registraron una 'receta' por el mismo motivo.
El coche eléctrico en Holanda cuenta con más multas de tráfico en promedio
En el caso del diésel, mecánica que ofrece una mayor aceleración al comienzo del empuje, el 46% de los consumidores ha tenido su correspondiente multa por exceso de velocidad. ¿Existe, por tanto, una evidencia de que en el futuro se incrementarán las multas de estas características? Es pronto para constatar este hecho, pero parece ser que sería mucha coincidencia.
Es cierto que los motores eléctricos invitan a mantener pisado el acelerador. La no disposición de varias marchas hace que el incremento de velocidad parezca ser más sosegado. Ahora bien, ¿es tan llamativa esta percepción como para influir en estos resultados? Quizás, lo más sensato sea ser prudente a la hora de enfatizar que sí existe una correlación.
Unos datos que salpican de forma notoria a Tesla
Entre los fabricantes de coches eléctricos, Tesla es el summum. Esto, como es lógico, ha tenido consecuencias directas sobre muchos de sus propietarios. Según se puede leer en el portal citado anteriormente, de los 9.000 usuarios que cuentan con una unidad del Model S o Model X, hasta el 75% ha recibido una notificación de infracción por parte de las autoridades holandesas.

El Tesla Model X seguirá siendo la punta de lanza de la línea de crossovers de Tesla. Slash Gear
Es importante recordar, a estos efectos, que la berlina o el crossover, pese a sus dimensiones y tamaño, es capaz de acelerar de igual modo que muchos de los deportivos que podemos encontrar en el mercado de automóviles de combustión interna. Esta es la prueba que podría determinar que realmente sí puede existir una correlación positiva entre las multas y la disposición de esta tecnología.
Los datos recogidos están basados sobre un total de multas por valor de 5,8 millones
Estos datos han sido basados en la publicación de multas por parte del erario público holandés. En total, en un año se llegaron a multar a 5,8 millones de usuarios relacionados con la movilidad. ¿Qué ocurre en otras áreas geográficas en las que el coche eléctrico está comenzando a superar a las alternativas clásicas?
Sería interesante poder tener acceso a mercados como el noruego para comprobar si, efectivamente, existe una relación entre ambas variables. Aun así, las conclusiones mencionadas anteriormente hablan por sí solas.