Elon Musk levanta polémica de nuevo: quiere un billón de dólares de parte de Tesla
Una retribución histórica preocupa a los accionistas de la compañía estadounidense
El paquete de compensación propuesto para Elon Musk, que podría superar los mil millones de euros si se cumplen las metas más ambiciosas de Tesla, divide a los accionistas. Algunos lo ven como un incentivo histórico para disparar el valor de la compañía, mientras que otros ya temen que este incentivo convierta a la empresa en rehén de un líder excesivo en sus gestos y opiniones, además de una persona que no tiene una dedicación exclusiva a la empresa.
Elon y el incentivo del billón de dólares
Será el próximo 6 de noviembre cuando Tesla someta a votación de sus accionistas la propuesta para entregar a Musk más de 423 millones de acciones, un hecho que elevaría su participación en la compañía hasta casi un 29%. La cifra es tan colosal que, según los cálculos de la asesoría Institutional Shareholder Services, podría superar los mil millones de euros si la compañía alcanza los objetivos previstos, que exigen multiplicar su valor hasta los 8.500 millones de dólares.
Sin embargo, como cabía esperar, la magnitud del plan ha generado un choque frontal entre los defensores de que estamos ante un incentivo histórico que garantiza la ambición del empresario y los críticos que aseguran que esto es simplemente es cheque estratosférico que amenaza con menospreciar el valor de los accionistas y que no asegura que Elon Musk dedique más a Tesla frente a proyectos como SpaceX, Neuralink o xAI.
Seguro que te estás preguntado cuáles son esos objetivos que hemos mencionado. Según la información publicada en Ars Technica, estos van desde la producción de 20 millones de vehículos, pasando por lograr diez millones de suscripciones de conducción autónoma o desplegar un millón de robotaxis, hasta conseguir otro millón de robots de inteligencia artificial.
Quienes están en contra de que los objetivos marquen el incentivo de Elon Musk aseguran que muchas de esas metas son tan ligeras que hasta podrían cumplirse sin que existan verdaderos avances e innovaciones, ya que simplemente con comercializar productos de terceros se podrían inflar las cifras. Y dado que la anterior votación tuvo polémica, ahora parece que el escenario ha cambiado.
Tesla ha trasladado su sede a Texas, donde la legislación permite que tanto Elon como su hermano Kimbal puedan votar, siendo este un detalle que puede resultar definitivo. Sabemos que Tesla ha crecido exponencialmente gracias a la figura de Elon Musk, pero, quizás, ¿esto ha creado una excesiva dependencia en su figura? Veremos cómo transcurre la reunión del 6 de noviembre.