Las carreras de automóviles autónomos prometen ser divertidas y sin riesgo para los pilotos
¿Sabías que existe una competición en la que participan coches autónomos de carreras? La Indy Autonomous Challenge sirve para comprender lo que está por llegar en los próximos años

Los coches autónomos plantean llevar la movilidad por carretera a una nueva dimensión. Esta tecnología se ha convertido en el pilar central de algunos fabricantes, lo cual nos lleva a pensar acerca de lo mucho que podrían cambiar algunos de los elementos de esta industria. ¿Qué ocurrirá con el mundo de la competición? Al parecer, sí habrá carreras de automóviles autónomos y, curiosamente, serán divertidas y sin riesgo para los pilotos.
Las carreras de coches autónomos ya son una realidad y, curiosamente, son entretenidas
El coche autónomo no ha parado de mejorar su propia tecnología con el paso del tiempo. Lo que, quizás, desconocías, es que existe una competición denominada Indy Autonomous Challenge. En ella, los equipos disponen de vehículos de carreras a los que se les ha agregado un equipo de cámaras y sensores, contando con el nivel más alto de autonomía. Se trata de una primera aproximación que permitiría entender cómo serán en el futuro este tipo de pruebas. Las carreras de automóviles autónomos no mostrarán una correlación inversa con las emociones o las prestaciones disparatadas.
De hecho, en la última prueba celebrada en el pasado mes de enero, algunos modelos que compitieron llegaron a superar los 230 km/h de velocidad punta. Los monoplazas utilizados son versiones modificadas del chasis Indy NXT, por lo que disponen de una configuración puramente próxima al mundo de la competición. Además, se cuenta con una instalación hecha a medida para no alterar notablemente la aerodinámica y peso del conjunto del vehículo. Es un trabajo exhaustivo que requiere de varias hora de trabajo para que el sistema quede perfectamente integrado.
Madhur Behl, profesor asociado de Robótica e Inteligencia Artificial, Universidad de Virginia, ha mostrado cómo es el funcionamiento de esta tecnología a través de las imágenes anteriores. Tal y como se puede apreciar en las mismas, el rendimiento de los automóviles no dista en exceso de lo que se podría ver en cualquier competición con pilotos de carne y hueso. Se trata de pruebas que contribuirán a una mejora continua de la tecnología para, posteriormente, poner en práctica las innovaciones obtenidas.
La precisión y el margen de error en este tipo de pruebas se convierten en los pilares centrales de la tecnología. Gracias al uso de la inteligencia artificial aplicada, es posible obtener un mejor paso por curva con el paso de las vueltas. La eficiencia tiene margen de mejora, pero la disposición de las mejores centralitas y sensores disponibles es lo que garantizará el éxito en cada una de las pruebas del campeonato.