Los 9 coches más emblemáticos utilizados por la Policía Nacional

La Policía Nacional suele disponer de una flota de vehículos que incluye automóviles de diversas marcas. Los fabricantes llegan a acuerdos con el Ministerio del Interior para dotar a los agentes de herramientas necesarias para combatir el crimen organizado y realizar cualquier actuación. En la mayor parte de los casos, no se precisa de opciones muy potentes, por lo que se busca el equilibrio para conseguir una propuesta con una gran relación calidad-precio.

Así, bajo estas variables, se adquieren los automóviles que forman parte de la Policía Nacional. Se trata de una decisión importante, ya que implica determinados cambios respecto a cualquier modelo convencional de calle. La principal modificación está directamente relacionada con la parte trasera, la cual está dominada por un tipo de asiento que difiere en exceso a lo que veríamos en un modelo de calle. En lugar de asientos acolchados, encontraremos una especie de plataforma de plástico duro, lugar en el que viajarán las personas detenidas.

Veamos, por tanto, cuáles han sido los 9 coches más emblemáticos usamos por la Policía Nacional, por qué se decantaron por estas unidades y, por supuesto, por qué son las alternativas de las que tenemos un mayor recuerdo.

Los 9 coches más usados por la Policía Nacional

La Policía Nacional es un cuerpo presente en la mayor parte del territorio nacional, por lo que la flota de automóviles no es precisamente pequeña. Cada ciertos años, se lleva a cabo una remodelación, por lo que muchas unidades terminan siendo dadas de baja. ¿Cuáles son las propuestas más interesantes que podemos encontrar en la industria? He aquí algunos que otros ejemplos.

SEAT 1500

SEAT es una de las marcas más representadas en la lista. Su origen español era clave para que las Fuerzas del Estados se decantasen por su utilización. El modelo 1500 fue usado en la época de los 'grises' y, posteriormente, durante la democracia. Coincidiendo con la década de los ochenta, poco a poco fueron dejándose en desuso debido a las múltiples mejoras introducidas un poco más tarde.

SEAT 131

El SEAT 131 se convirtió en uno de los coches más famosos que había en el parque automovilístico en España. Curiosamente, el fabricante decidió crear su propia versión para ofrecerla como coche de patrullaje y al servicio del cuerpo policial. Del mismo modo que en el caso anterior, coincidió su uso con la transición y, posterior, democracia, siendo la década de los ochenta el momento en que tocó la renovación.

Talbot Horizon

En la década de los años ochenta, la Policía Nacional utilizó el Talbot Horizon, un vehículo que destacaba, principalmente, por contar con un precio muy interesante. A cambio se obtenía un vehículo muy fiable, cuestión que se confirmó con el paso de los años. ¿Sabías por qué se les suele decir 'maderos' a los miembros de este cuerpo? Este automóvil era de color marrón.

SEAT Ritmo

El SEAT Ritmo era un vehículo utilitario que también fue un vehículo policial. Su principal ventaja estaba en el precio. Pese a que pudo usarse en alguna que otra misión especial, su desempeño estaba limitado al patrullaje común. No es recordado como el vehículo más eficiente de cuantos ha tenido la Policía Nacional desde su fundación.

Citroën BX

El Citroën BX fue utilizado, principalmente, en la década de los noventa. La opción usada contaba con una mecánica de 105 CV, la cual destacaba por ser muy fiable. De igual modo, la presencia de soluciones como el sistema de suspensiones lo convertía en una alternativa muy interesante para poder circular, en determinadas ocasiones, por pistas.

El Citroën BX es uno de los automóviles más destacados de la Policía Nacional en los años noventa.

Desempeñó su papel, incluso, posteriormente a la entrada en el nuevo siglo, convirtiéndose así en una de las alternativas más importantes del cuerpo policial. Su principal diferenciación era la amplitud interior y las novedades que incluía en términos de innovación este modelo francés. Tras tener en cuenta todo su recorrido comercial, lo único que se puede decir es que fue un completo éxito.

Peugeot 306

El fabricante francés también tuvo presencia en la seguridad de España. Lanzado en el año 1993, extendió su cadena de montaje hasta el año 2002. Durante todo este tiempo, la Policía Nacional contó con parte de su flota con este modelo. Se trataba de una alternativa que estaba especialmente centrada en el patrullaje en la ciudad. Sus dimensiones lo convertían en un coche muy callejero, pudiendo colarse por cualquier resquicio.

Citroën Xantia

Coincidiendo una etapa con el Citroën BX, el Xantia permitía comprender cómo el vehículo anterior había quedado ya algo obsoleto. Con su sistema de suspensión hidroneumática era posible circular por terrenos algo más complicados que por el simple asfalto. Se trató, sin duda alguna, de una remodelación en el cuerpo que permitía extender el uso de los vehículos policiales.

Destacaba, principalmente, por disponer de una gran amplitud interior y una mecánica diésel muy eficiente y, sobre todo, fiable. A muchos de estos vehículos, les tocó el cambio de unidades con una gran parte de su vida útil aún por cumplir. Se trata, sin duda alguna, de uno de los automóviles más históricos y con mejor fama dentro del cuerpo.

SEAT Toledo

Nuevamente, toca buscar en el cajón de productos nacionales. El Toledo ha sido un histórico en el Cuerpo Nacional de Policía. Se ha utilizado en multitud de ocasiones debido a tratarse de una berlina con múltiples oportunidades. Con un diseño sencillo y el empleo de materiales de calidad intermedia, era posible carrozarlo para ser vehículo policial a un buen precio.

El SEAT Toledo es uno de los automóviles más icónicos del CNP.

Desempeñó su trabajo durante la década de los noventa y, parcialmente, durante los primeros años de los 2000. Coincidió con el Citroën Xantia, la otra gran berlina disponible durante estos años. Poco después fue sustituido por modelos del mismo segmento con las novedades del momento. Aun así, es recordado como una de las alternativas más completas de la época.

Citroën Xsara Picasso

Este puede ser, sin duda alguna, el modelo más representativo del CNP. Puede que sea por su increíble rendimiento o porque se trata la opción que más has podido recordar en los últimos año. Se trata del, quizás, primer crossover usado en el ámbito policial. Contaba con un nivel de amplitud particularmente notable, el cual destacaba, además, por disponer de mecánicas HDI muy eficientes.

Ver uno en servicio cada vez es más complicado. Al fin y al cabo, el mercado actual está repleto de opciones mucho más interesantes, tales como el Peugeot 3008. Este último, de hecho, se ha convertido en uno de los automóviles más utilizados por este cuerpo.