Las baterías portátiles no sólo sirven para cargar nuestro móvil
Con un mercado que no para de innovar, y una tendencia de minimizar las dimensiones de nuestro móvil, sobre todo en lo que a grosor se refiere, los powerbanks o baterías portátiles están cobrando mayor relevancia que nunca con una simple premisa: poder cargar nuestro dispositivo cuándo y dónde queramos, sin tener que estar pegados a un enchufe.
Pero como veremos a continuación, cargar nuestro móvil no es, ni de lejos, la única función que tienen estas baterías portátiles.
Las baterías portátiles no se limitan únicamente a cargar móviles
Los powerbank se han ido dando a conocer gracias al mercado de los smartphones y cada vez son más populares entre los consumidores debido a su gran utilidad para salvarnos de un apuro en caso de agotar nuestra batería si estamos fuera de casa.
Cuando hablamos de ellas, lo primero que se nos viene a la mente es un móvil, que su uso se restringe a ello, pero la realidad es que no, tienen muchas más utilidades de las que pensamos.
Una batería externa tiene el mismo funcionamiento que un cargador convencional por USB, con la diferencia de que se alimenta de la batería que hay en su interior, lo que significa que podremos usarla sin problemas en otros dispositivos electrónicos que tengamos.
Pero, ¿hay algo a tener en cuenta antes de utilizar nuestra batería portátil en otros dispositivos?
Esa es la pregunta que muchos de nosotros se hará a la hora de utilizar una de estas baterías portátiles y más aún si no las hemos usado nunca o simplemente, no tenemos mucha experiencia con este tipo de dispositivos.
La respuesta es simple, y es que casi cualquier cosa que admita carga mediante USB podremos cargarla con una batería externa. Esto es debido a que, normalmente, las salidas de todas los powerbanks suele ser de USB a 5 Voltios, la cual coincidirá casi seguro con el mismo voltaje que hay impreso en el cargador de tu dispositivo. Si la salida de nuestro móvil es de 5 Voltios no tendremos de qué preocuparnos, puesto que será compatible con estas baterías.
Pero no sólo importa el voltaje, puesto que si nos fijamos tanto en el cargador como en la batería nos daremos cuenta de que hay inscritos unos amperajes, que nos muestran en el caso del móvil a la velocidad que cargará nuestro dispositivo. De esto no hay que preocuparse, ya que si el cargador de nuestro dispositivo es de menor velocidad (el del móvil suele ser de 2,1A), cargará a su velocidad correspondiente, y si es mayor, notaremos que la carga será algo más lenta.
Entoces, ¿qué dispositivos podremos cargar?
Una vez revisado que hayamos cumplido con lo dicho anteriormente, es hora de ponerse manos a la obra. Pero, exactamente, ¿qué podemos cargar? y, ¿cuántas veces?
Pues todo dependerá de la capacidad en miliamperios (mAh) de la que disponga tanto nuestro powerbank, como el dispositivo que queramos cargar. Por ejemplo, si usamos una batería externa de 10.000 mAh, podremos cargar dos veces un smartphone con una capacidad de 2.500 mAh, además de una tablet de 5.000 mAh. A partir de aquí, las posibilidades son infinitas y ya será tu decisión decidir qué powerbank se adapta más a ti y tus dispositivos electrónicos.
Esperamos que te hayan sido de ayuda estos consejos y si estás decidiendo comprar una batería portátil, conozcas los factores a tener en cuenta a la hora de comprar una.
Fuente: elandroidelibre