La historia del youtuber que estafaba a pensionistas
Una sentencia saca a la luz la historia de estafas de un youtuber que vivía por y para los coches de lujo.

Pocas veces solemos contar historias con un tinte tan oscuro como la que vas a leer a continuación, pero entre que existe un componente de engaño a través de internet y que, para añadir más leña al fuego, uno de los procesados tiene un canal con bastante aceptación en YouTube, creo que merece la pena que conozcas los entresijos de la noticia polémica del día.
Un timo de órdago
A nadie se nos escapa que la habilidad para engañar y estafar a la gente es algo súmamente nocivo para la sociedad. Sin embargo, si las personas engañadas, como pudo ser el caso en España de las famosas preferentes de Bankia, son personas mayores, el asunto se torna muy serio y peliagudo. En esta ocasión tenemos como protagonista principal a Anthony Locke, un hombre de negocios del Reino Unido, que ha sido condenado a cinco años de prisión por 17 delitos de fraude por representación falsa y por tres delitos de blanqueo de capitales, según la información obtenida del medio de comunicación Daily Mail.

Imagen del condenado Anthony Locke. Daily Mail
La avaricia de los pensionistas ha sido la clave
A su vez, su socio en esta estafa, Ray King, ha sido condenado a tres años de prisión por 13 delitos de fraude por representación falsa. El engaño, algo resumido para no aburrir con detalles poco interesantes, consistió en la creación de una página web llamada Successful Pensions, algo así como Pensiones de Éxito. La gente que era estafada picaba un anzuelo muy suculento. Se les ofrecía un pago instantáneo de la mitad de su fondo de pensiones con la condición de liberarles completamente del mismo. Según la información obtenida en el medio digital Daily Echo, de haber sacado de forma anticipada ese dinero, los pensionistas habrían tenido que pagar un 55% de impuestos, con lo que Locke y King tuvieron una excusa perfecta para ejecutar su plan.
Aparte de ofrecerles la mitad del dinero en metálico, les aseguraban que la otra mitad sería invertida en una compañía con valores medioambientales denominada Nature Eco Investments. Sin embargo, la única misión de la pareja fue lucrarse a costa del dinero de aquellos menos sensatos o peor aconsejados, dejándoles sin pensiones, sin dinero en metálico y sin ningún tipo de inversión, ya que era una fachada para realizar el engaño de manera más creíble.
Coches y YouTube
La estafa no tendría más transcendencia en nuestra página, de no ser porque quien se encuentra detrás tiene un canal en la plataforma de Google bastante visitado, con vídeos sobrepasando las 500.000 reproducciones. Si buscas Gaskings en YouTube, te encontrarás con los vídeos que sube Anthony. Además de dedicarse al vil arte de timar a inocentes, también se le ha ocurrido la brillante idea de unirse al grupo de canales que se dedican a subir contenido que para nada resulta propio. En tu visita podrás ver, sobre todo, recopilaciones de vídeos con los coches como protagonistas absolutos.
No hay más que atar cabos para darse cuenta como continuó la estafa de estos indignos señores. Anthony gastó una fortuna en la compra de coches de lujo. Según el comunicado ofrecido por la comisaría de policía de la localidad inglesa de Dorset, el montante total de dinero robado ascendería a cerca del millón de libras, lo que equivaldría a 1.150.000 euros o 26.300.000 pesos mexicanos. De esa cantidad, el señor Locke utilizó más de 230.000 libras esterlinas, 262.000 euros o 6.000.000 pesos mexicanos, en dos Audi, un Mercedes, un Aston Martin, un Porsche y un Lamborghini Gallardo.
La estafa tendrá consecuencias penales para los dos condenados, consecuencias monetarias para los estafados, pero también podría tener implicaciones para éstos últimos, debido al intento de evasión de impuestos. En declaraciones del investigador del caso, el oficial Paul Sullivan:
Locke fue el arquitecto de este sofisticado fraude, junto con King como su empleado. Entre septiembre de 2013 y abril de 2014, Locke obtuvo casi un millón de libras esterlinas de distintas compañías de pensiones. Sus víctimas no sólo han perdido la mitad de sus pensiones, sino que ahora podría enfrentarse a multas financieras por parte de la HMRC, la agencia británica de impuestos, que querrá recuperar sus impuestos perdidos.