Un ascensor a la Luna, así es el alocado plan de unos investigadores

Hubo un tiempo en el que la conquista del espacio fue una de las misiones más destacadas llevadas a cabo por las principales potencias del mundo. La Guerra Fría tuvo uno de sus principales episodios la llegada del ser humano a la Luna, un hecho histórico que cambiaría la carrera espacial para siempre. ¿Ha llegado el momento de dar nuevos pasos en esta frenética fuente de inspiración?

Buscar la habitabilidad de la Luna o Marte son algunos de los propósitos de muchos proyectos aeroespaciales actuales. Sin embargo, la naturaleza no nos ha dotado la capacidad para sobrevivir en las condiciones que en cada uno de estos espacios hay vigentes. Ahora bien, ¿y si fuese posible disfrutar de una relación física con el satélite más destacado para el Planeta?

Un equipo de investigadores cree que, al menos en el largo plazo, será posible unir la Tierra y la Luna a través de una especie de ascensor. Esto permitiría facilitar el envío de expediciones en busca de un objetivo; colonizar el primer territorio más allá de la atmósfera que nos rodea. ¿Puede llegar a ser esto posible teniendo en cuenta las limitaciones presentes actualmente?

Esta potencial infraestructura kilométrica permitiría reducir el coste de forma exponencial en términos de desplazamientos de astronautas y equipamiento. La instalación de un campamento base sería mucho más factible si se pudiese disfrutar de una conexión continua entre la Luna y nuestro planeta. Ahora bien, ¿qué probabilidad real existe a la hora de ofrecer esta tecnología?

Es importante recordar que la distancia que separa ambas figuras es de 384.400 kilómetros, por lo que implicaría la disposición de grandes inversiones para hacer real un proyecto que, a día de hoy, parece muy difícil de convertirse en realidad. Aun así, ¿qué podemos esperar de esta curiosa solución técnica? Veamos en qué están pensando diversos organismos internacionales.

Un proyecto del que se lleva hablando casi 10 años

Desde hace varios años, esta alternativa parece que va tomando forma a medida que suceden los años. Si los primeros movimientos factibles tuvieron lugar al comienzo de década, en la actualidad estamos viendo cómo el proyecto Spaceline va tomando un cáliz distinto. Al parecer, según se puede leer en el portal Futurism, este proyecto está fundamentado en la conexión de un cable con unas peculiaridades determinadas.

Lo primero que llama la atención es que se contaría una unión que tendría un cable con un filamento muy grueso en la parte central y 2 extremos más finos. De esta forma, se conseguiría ganar robustez en el área que separa a la Tierra y la Luna con un objetivo principal; garantizar que no se produce ningún contratiempo a causa de los meteoritos.

La principal particularidad es que este cable se mantendría suspendido en el extremo que conectaría con la Tierra con una finalidad; servir de acceso para las misiones en el espacio de camino a la luna. Así, se conseguiría disfrutar de un ahorro multimillonario en el medio plazo, momento en el que se espera que se incremente la actividad en relación con los proyectos espaciales.

Este movimiento está centrado particularmente en el desarrollo de una red de cooperación que buscaría la conexión con nuestro principal satélite. De esta forma, podría ser posible disfrutar de mayores inversiones a gran escala. ¿En qué punto se encuentra actualmente esta innovación? Este curioso proyecto está ratificado por Academia Internacional de Astronáutica, organismo con potestad para dar credibilidad al plan estratégico.

Todavía quedan muchos cabos por atar para asegurar su viabilidad

El principal problema de esta obra faraónica está relacionada con las limitaciones materiales presentes por doquier. Teniendo en cuenta la gran distancia que habría que cubrir, lo más probable es que se tarde varias décadas para culminar esta obra. Sí, es cierto que ya existen anteriores acciones de gran envergadura como el canal de Panamá, pero esto es muy diferente.

Este ascensor lunar no tiene aún un proyecto determinado para realizar las correspondientes obras de instalación. <a href="https://www.muyinteresante.com.mx" rel="nofollow" target="_BLANK">Muy Interesante</a>

La limitación más drástica está relacionada directamente con el propio sistema de transporte. El cableado debería soportar velocidades muy altas, por lo que se está barajando la utilización del carbono. Aun así, este material no dispone de tales niveles de producción como para sostener un raíl de unas características que todavía están por definirse.

Aun así, es pronto para adelantar acontecimientos al respecto. Se espera que a lo largo de los próximos meses se conozcan nuevos detalles sobre un proyecto que aún se encuentra dentro de un marco teórico de realización. ¿Podría estar lista esta tecnología en los próximos 20 años? ¿Qué tal para el año 2050? Habrá que estar atentos a las nuevas informaciones que se faciliten al respecto.