Así es como afectará el 6G al sector de los coches eléctricos
¿Cómo beneficiará la tecnología de conectividad 6G al mercado del coche eléctrico y, sobre todo, autónomo? He aquí las claves de lo que está por llegar.

Echando un rápido vistazo a la tecnología actual que hay presente en el mercado, el 5G parece que poco a poco está llegando al grueso duro de productos. Lo que comenzó como una opción reservada a los modelos más destacados del panorama del smartphone, poco a poco ha ido calando en los segmentos de mitad de tabla. Ahora bien, ¿qué podemos esperar de una tecnología de sexta generación? El 6G ya está siendo desarrollado y promete importantes avances en diversos sectores tecnológicos. Uno de los que se verá más afectado será el de la movilidad.
En un futuro en el que se espera que el nivel 4 o 5 de autonomía pueda ser estándar en, quizás, una década, parece vital tener presente la gran cantidad de dato que tendrán que gestionar los fabricantes. En este sentido, se antoja especialmente importante conocer cómo puede afectar esta innovación al mercado del coche eléctrico. Se trata de una apuesta que destacará por ser un referente en lo que se refiere a al tratamiento de la información.
Veamos, por tanto, cómo afectará el 6G al sector de los coches eléctricos, por qué es fundamental la estandarización de esta tecnología dentro de este segmento y, por supuesto, hasta qué punto nos encontramos ante la inminente llegada de este tipo de servicios al automóvil. Al fin y al cabo, los automóviles estarán conectados y, al mismo tiempo, deberán ser capaces de obtener y analizar información procedente de cámaras y toda una serie de sensores.
Por qué la tecnología 6G se presenta diferencial para los coches eléctricos
Ya son varias las empresas que están trabajando para incorporar este tipo de servicio de conectividad en automóviles. El objetivo es dotar a las centralitas de una capacidad diferencial para que puedan ser capaces de gestionar todo tipo de situaciones que podemos encontrar a diario en las carreteras. Compañías muy próximas a la automoción, tales como Bosch, están desarrollando programas piloto a nivel interno para investigar sobre ello. En este caso en particular, Bosch ha denominado este conjunto de actividades 6G-ICAS4Mobility.

El coche autónomo se beneficiará de la llegada de la tecnología de conectividad 6G. Imagen: Investor Times
El funcionamiento de la tecnología en la que se está trabajando parte de la existencia de una nube digital. Los automóviles que están siendo objeto de pruebas transfieren toda la información en tiempo real, lo cual es posible gracias a la existencia de una velocidad de transmisión muy alta. Gracias a este sistema, es posible disponer de datos de gran relevancia en un espacio que, a su vez, permitirá el acceso a otros vehículos situados en las proximidades. El objetivo es que los demás automóviles puedan leer esta información de relieve.
Las pruebas de este programa piloto tendrán un recorrido de hasta 3 años. No obstante, es importante tener en cuenta que nos encontramos ante una tecnología que tiene una serie de inconvenientes. El más notable, sin lugar a dudas, es que para que este tipo de tecnología tenga sentido, todos los usuarios que participen en la vía deberían contar con la opción de compartir información y recibir la de los demás. Esta es la principal dificultad del sistema basado en 6G. Cabe recordar que el parque móvil de España supera ampliamente los 13 años.
Y bien, ¿qué esfuerzos están haciéndose a nivel estatal? En una economía que se muestra cada vez más digitalizada, la existencia de este tipo de servicios puede ser un factor de gran relevancia a nivel de riqueza. Esto ha provocado que los Estados ya estén moviendo ficha para adaptar la tecnología a la potencial llegada de la conectividad 6G. Países como Alemania ya han desarrollado programas de inversión por valor de 700 millones de euros, mientras que el conjunto de la Unión Europea está haciendo lo propio al invertir hasta 900 millones de euros.
La llegada de esta tecnología irá de la mano de la conducción autónoma, por lo que los coches eléctricos, gracias a sus múltiples ventajas frente a los convencionales de combustión interna, podrán aprovechar todas los beneficios que ofrecerá esta innovación relacionada con la conectividad.