El objeto más caro del mundo en relación a su peso es este curioso sello: alguien pagó casi 10 millones por él

Dudamos mucho que quienes entran a disfrutar de nuestros artículos tengan la capacidad de comprar artículos como el que te mostraremos a continuación. Más bien, permitidnos la intuición, estáis en nuestro barco, ese que zarpa en busca de las mejores 5 webs de alertas de bajada de precios en vuelos u ofertas de cualquier tipo. En cualquier caso, un sello parece que se ha hecho con el honor de ser el objeto, por peso, más caro del mundo, ya que costó la friolera de 9,5 millones de dólares a Stuart Weitzman, un importante diseñador de calzado, en el año 2014.

Un sello procedente de una antigua colonia británica tiene el honor de ser el objeto más caro del mundo a tenor de su peso

Eso sí, la historia de este sello no acaba en el año 2014, ya que después de casi 7 años y varias exposiciones de por medio, el sello retornó al lugar donde fue subastado anteriormente, que no es otro que la lujosa casa de subastas Sotheby. El día 8 de junio de 2021, una nueva subasta ponía el foco en el sello magenta, nunca hemos sabido describir este color, que acaba siendo adquirido por Stanley Gibbons Ltd., una empresa dedicada a la venta al por menor de sellos postales coleccionables. ¿Su precio? Fueron 8.307.000 millones de dólares los que hicieron que el objeto cambiase de manos.

El que ya ha sido bautizado como el 'sello más raro del mundo' tiene una historia curiosa, que comienza en Georgetown, localidad de la Guayana británica, concretamente en las oficinas de la Royal Gazette. Allí es donde se imprimían los sellos, aunque su producción a menudo renqueaba, lo que sucedió por primera vez en el año 1856, que es la fecha en que el sello más caro del mundo fue creado. Debido al problema de abastecimiento, una tirada de emergencia tuvo que ser creada y aquí es donde aparece el denominado ONE CENT.

A partir de entonces, esta historia es muy famosa entre los filatélicos más entusiastas, el sello fue cambiando de manos, empezando por las de un niño de 12 años que lo encontró en unos papeles familiares en 1873, pasando por su venta a un aficionado a los sellos de Liverpool como parte de una colección, hasta que en el año 1922 acabó siendo adquirido por Arthur Hind, un millonario americano que pagó 7.343 libras por este sello, que a partir de entonces se convirtió en el más raro del mundo.