La escasez de microchips hará que algunos BMW pierdan la pantalla táctil
BMW incorporará tecnología descatalogada en algunos modelos debido a la crisis de los microchips. He aquí las claves de la polémica de las pantallas táctiles.

El mercado del automóvil se ha visto gravemente perjudicado por los problemas que se han generado a raíz de la pandemia. La vuelta a la normalidad no es algo que vaya a suceder de la noche a la mañana. Al fin y al cabo, algunas industrias funcionan con piloto automático y navegación de crucero. Es romper el ciclo de producción y todo se va al traste. Si a ello unimos que los microchips son un elemento esencial en la economía, el problema se agiganta.
Los fabricantes del mercado del automóvil están haciendo malabares para poder tener acceso a las unidades de fabricación. Se calcula que los principales holdings del mercado dejarán de producir centenares de miles de automóviles durante los próximos años. El tiempo de espera, por otro lado, no hace más que dilatarse, reduciendo las expectativas de compra por parte del público. Esto está provocando, de forma colateral, un incremento en el coste de productos de ocasión.
Si incluimos todos los ingredientes anteriores en una coctelera, obtenemos como resultado un desastre a nivel económico. Algunas compañías han decidido interrumpir de forma escalonada la producción, mientras que otras empresas están recurriendo a soluciones alternativas. Dentro del cupo de la segunda opción, BMW es una de las que más conforme se ha mostrado a ello. Entre las consecuencias de esta decisión está la ausencia de determinadas opciones de configuración.
Sin embargo, no sabíamos hasta qué punto podría afectar a un elemento tan básico como es la disposición de la pantalla táctil en el salpicadero. Poder controlar con un dedo aspectos como el volumen o la navegación es algo que se puede observar en segmentos generalistas. Algunos modelos de BMW, en cambio, serán comercializados con esta función. Sí, se trata de un retraso a nivel tecnológico, pero lo cierto es que es la única forma que hay de mantener estándares de producción decentes.
¿Merece la pena renunciar a propuestas que son básicas en los modelos actuales o se trata de una tecnología secundaria a la hora de escoger un producto de estas características? Veamos cuál puede ser la repercusión de esta política y, sobre todo, cómo puede pasarle factura esta solución a una empresa de estas características.
BMW conoce que deberá renunciar a algunas de sus pantallas táctiles
Sí, los microchips están afectando a la mayoría de elementos de la cadena de suministro de los fabricantes de automóviles. BMW, conocedor del increíble problema que se cierne próximamente, ha decidido introducir un sistema analógico para poder acceder a los comandos a través de la pantalla. Una especie de trackpad clásico es la forma con la que se podrían manejar algunas de las funciones en un BMW de última generación. Suena extraño, ¿verdad?
Las imágenes que puedes ver justo aquí arriba se corresponden con una tecnología que implementaba BMW en el año 2016. Por aquel entonces, solo Tesla y algún que otro fabricante se habían atrevido con las opciones táctiles. En la actualidad, cualquier modelo generalista, orientado al público mayoritario, ya disfruta de esta tecnología en el automóvil. Pues bien, tal y como se puede leer en el portal especializado The Verge, BMW retomará una solución parecido para salir del paso.
Como es lógico, el usuario será informado de esta apreciación, obteniendo un descuento de unos 500 dólares. ¿Puede parecer suficiente? Teniendo en cuenta lo sencillo que resulta toquetear con una pantalla táctil, la disposición de una rueda con superficie táctil puede resultar muy incómodo. Muy interesante en 2016, pero lo cierto es que ha pasado más de un lustro desde su presentación en sociedad. ¡Qué rápido avanza todo!
Una decisión que llega tras comprobar que el problema no será temporal y pasajero
Una industria tan específica en problemas puede tardar mucho tiempo en retornar a la producción tradicional. Esto es sabido por la industria del automóvil y, por ello, se están empezando a observar este tipo de políticas con más frecuencia. Se espera, de hecho, que el próximo año se sigan produciendo coletazos derivados de los meses de inactividad que tuvieron lugar. Y bien, ¿es preferible optar por una propuesta de estas características?
Según se puede leer en el portal anteriormente mencionado, escoger esta alternativa implicará que el usuario deberá rellenar y firmar un formulario admitiendo que conoce esta funcionalidad. De esta forma, BMW se asegura que no se llevarán a cabo acciones contra la compañía. Y bien, ¿merecería la pena apostar por esta tecnología a sabiendas que luego se podrá instalar la versión actual a un posible mejor precio cuando todo se haya calmado?
Lo cierto es que no será tan sencillo. BMW introducirá una actualización específica para estas unidades afectadas. De esta forma, se podrá realizar toda la gestión con el objetivo de establecer patrones de funcionamiento adecuados al sistema de acceso al sistema. Habrá que esperar todavía más información para ver si sería posible sustituir esta versión clásica por la de última generación en un futuro.