La impresión 3D llegará a la construcción mediante proyectos como este

La construcción de edificios podría estar a un paso de sufrir una profunda conversión. ¿Es la impresión 3D el nuevo modelo de negocio a explotar en este ámbito? He aquí las claves.

La impresión 3D llegará a la construcción mediante proyectos como este
La casa de impresión 3D está mucho más cerca de ser una realidad. Forbes

La tecnología actual está muy ligada a la digitalización, pero lo cierto es que hay otras ramas que tienen por delante un gran porvenir. En el mercado podemos encontrar múltiples ejemplos, tales como la conducción autónoma en la movilidad o el desarrollo de drones con diversos objetivos. Sin embargo, hay una línea de investigación que está, todavía, un paso por encima.

La impresión 3D se ha convertido en una de las innovaciones con mayor potencial de mejora para los próximos años. De hecho, se espera que a lo largo de los próximos años tanto su demanda como oferta llegue a muchos más sectores. Entre todos ellos, el de la construcción es uno de los que podría tener un mayor recorrido. ¿Por qué? La clave está en los muchos recursos que ofrece para el público.

El sector de la construcción podría tener su futuro en la impresión 3D

En el pasado te mostramos algunas de las aplicaciones que permite. Es cierto que algunas de ellas como el diseño y producción de armas requiere una cierta legislación, pero en términos generales, se trata de un gran paso hacia adelante en lo que se refiere a competitividad. El denominado cuarto sector de la economía, el del ladrillo, es la base de la innovación que pasamos a mencionar.

¿Sabías que ya hay máquinas de impresión 3D capaces de realizar estructuras de edificios básicas? El grado de especialización será fundamental para requerir, con el paso del tiempo, una menor presencia de operarios de carne y hueso. Se espera que esta tecnología, de hecho, consiga culminar más rápidamente edificaciones con tan solo apretar el botón START. Y bien, ¿cómo funciona el proceso?

A continuación te mostramos cómo tiene lugar todo el proceso de construcción de una casa desde la perspectiva de Stylish, una casa cuyo objetivo es terminar flotando en un lago. Está en República Checa, se ha diseñado para ser factible su producción mediante una impresora 3D y, curiosamente, descansará sobre el agua. ¿Estamos ante un modelo nuevo de producción de vivienda?

Stylish, la vivienda construida mediante un programa de impresión 3D

Los diseñadores y productores de la casa aseguran que su fabricación será hasta 7 veces más rápida que si se siguiese el protocolo habitual. Esto es así, principalmente, gracias a la presencia de un brazo robótico que podría ser utilizado durante las 24 horas del día en un único turno. Así, se conseguiría acelerar todo el proceso de instalación de la pasta de fabricación.

En particular, esta curiosa vivienda unifamiliar ocupa una superficie de 43 m[sup]2[/sup]. Para este caso, se ha utilizado una unidad robótica procedente de la industria del automóvil. Por ello, se espera que su estandarización no supusiese un gran coste en términos de instalación y montaje de la maquinaria. Ahora bien, ¿dónde está la clave para conseguir un resultado eficiente?

La utilización de diferentes ingredientes hace que la masa obtenga mucha dureza en días

El filamento que se desprende del robot a su paso está compuesto por polipropileno, plastificantes y aceleradores de fraguado mezclados, los cuales se disponen sobre la superficie a una velocidad de 15 cm/s. Es importante tener en cuenta que durante el proceso, el robot instalará múltiples capas, lo cual permite la consecución de una estructura vertical.

De igual manera que ocurre con los canales de producción tradicionales, el material requiere asentarse, algo que se producirá pasados solamente 24 horas. No obstante, para contar con su máxima durabilidad es preciso esperar hasta 28 días, momento en el que se alcanza la dureza definitiva. Tras ello, la vivienda estará operativa para su disfrute completo.

Diferente concepción de casa para reducir su coste de producción

Los creadores de esta original idea aseguran que una casa producida a través de impresión 3D podría soportar unos 100 años sin que se produjesen señales sobre posibles fallos en la estructura. Además, permitiría jugar más con el diseño de las estructura, ya que no sería puramente necesario que hubiese esquinar o pilares incómodos.

La impresión 3D llegará a la construcción mediante proyectos como este

La impresión 3D es la base de esta casa del futuro. <a href="https://www.estav.cz/" rel="nofollow" target="_BLANK">Estav</a>

En este caso, aprovechando que se trata de una tecnología más sostenible con el medioambiente, se han introducido soluciones para hacer autosuficiente a la estancia en cuestión. Por ello, dispone de ducha de recirculación, techo repleto de plantas con posibilidad de instalar un huerto y depósitos de agua potable. De esta forma, se garantiza un mayor autoconsumo y menor despilfarro de recursos.

Stylish permitirá un menor impacto ambiental en su construcción y demolición

Stylish, según se puede leer en el portal tecnológico New Atlas, reduce hasta en un 20% las emisiones de CO[sub]2[/sub]. Tanto es así que su fabricación y demolición será mucho más sencilla. ¿Estamos ante el nuevo modelo de edificación que podría estandarizarse en los próximos años?

Habrá que esperar todavía un tiempo para saberlo. No obstante, es una apuesta que lleva ya años ligada a la construcción. El diseño de los planos y la capacidad física de los brazos robóticos ha mejorado de forma exponencial en la última década. Podría ser, por tanto, el momento para ir un paso más allá y probar su comercialización.

Para ti
Queremos saber tu opinión. ¡Comenta!