Los drones tendrán brazos a partir de ahora: tendrán muchos usos y podrían transformar la industria

Los drones están de moda. De vez en cuando, incluso ocupan titulares de decenas de medios digitales, en papel, televisión y radio, como fue el reciente caso del ataque a bases aéreas rusas por parte de Ucrania a través de 117 drones. El ataque fue planeado durante 18 meses por el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) y es considerado uno de los más grandes de la historia.

Aunque muchos los relacionan con el cine, la televisión y hasta el fotoperiodismo, lo cierto es que los drones tienen una amplia variedad de usos: mapeo y cartografía, agricultura (detección de plagas, aplicación de pesticidas y monitoreo), situaciones de emergencia y rescate, seguridad y vigilancia, así como construcción, transporte y hasta defensa militar.

No obstante, muchos presentan dificultades para interactuar físicamente con el entorno, siendo poco adecuados para desplazarse por espacios reducidos o ángulos incómodos. Un grupo de investigadores de la Universidad de Hong Kong (HKU) cuenta con una solución que les permite superar dichos límites.

Lo que necesitaban los drones para ser todavía más útiles en situaciones de emergencia

El profesor Peng Lu, junto a su equipo del Departamento de Ingeniería Mecánica, ha creado la Trompa de Elefante Aérea (AET), un brazo robótico flexible que cambia de forma, se adhiere a los drones y maneja tareas de manipulación complejas con facilidad. Esta invención podría ayudar pronto a los drones a asumir funciones más prácticas, desde limpiar escombros provocados por desastres naturales hasta mantener líneas de alto voltaje.

Muchos robots aéreos con brazos mecánicos rígidos con pinzas tienen problemas con los límites de peso y rango de movimiento. La Trompa de Elefante Aérea llega para solucionar dichas limitaciones. Como su propio nombre indica, su estructura suave y flexible para sujetar objetos está inspirada en la fluidez y adaptabilidad de una trompa de elefante.

Al diseñar un brazo continuo aéreo altamente compacto, podemos realizar diversas tareas de manipulación aérea en entornos complejos

La AET no requiere pinzas convencionales, ya que se envuelve alrededor de objetos de diversos tamaños y formas, lo que le permite sujetar objetos que los drones convencionales no pueden. "Es extremadamente diestra en comparación con los manipuladores aéreos existentes, ya que su cuerpo puede adoptar cualquier forma", comentó el profesor Lu.

Es capaz de agarrar objetos de diversos tamaños y formas con su cuerpo; una capacidad casi imposible para los manipuladores aéreos convencionales, que solo pueden agarrar los objetos mediante sus pinzas. Esta capacidad le permite adaptarse, haciéndolo especialmente útil en entornos impredecibles.

Destaca donde la mayoría de los drones actuales presenta dificultades. La AET puede maniobrar a través de tuberías estrechas, sortear obstáculos y realizar tareas detalladas en espacios especialmente reducidos, lo que marcaría un antes y un después en la actuación en situaciones de desastre.

La Trompa de Elefante Aérea podría retirar escombros de edificios derrumbados o líneas eléctricas dañadas tras un desastre. Además, su alcance y precisión la hacen adecuada para inspecciones y reparaciones en puentes u otras infraestructuras de difícil acceso por tierra. Todavía habrá que esperar para ver aplicaciones de la AET en el mundo real, aunque es un concepto, desde luego, muy prometedor.