Así es el parque eólico marino más grande del mundo a vista de dron
Los parques eólicos se han posicionado como una de las tecnologías más recurrentes para obtener energía eléctrica de manera sostenible. Algunos, como el situado en Walney Extension, son alucinantes.

En los últimos años, la obtención de energía eléctrica a través de procesos sostenibles se ha convertido en una necesidad. El cambio climático está provocando que el uso de medios mucho más contaminantes como la extraída del tratado del carbón, se haya tenido que regular y, por supuesto, limitar. En su defecto, los procesos renovables se han posicionado como principal sustitutivo.
Entre las alternativas diferentes para obtener energía eléctrica para el consumo, el uso de la energía disfrutable gracias al viento se ha posicionado al frente. Los denominados parques eólicos se han vuelto una estampa común en las zonas donde más incide el aire. Tanto es así que ya no hay distinción entre zonas montañosas, llanuras o, incluso, mares.
Los parques eólicos marinos se han convertido en un punto de atracción turístico
En referencia a este último caso, esta opción se ha posicionado como una de las más empleadas con el objetivo de disfrutar de energía eléctrica más barata de obtener y con un menor inciso en el medio ambiente. Tanto es así que se han vuelto auténticas atracciones turísticas por lo curioso que resulta ver estas obras de ingeniería emplazadas y clavadas como estacas en el agua.
¿Por qué resulta tan emocionante este espectáculo? Basta con que veas las imágenes que se ofrecen a continuación para entender cómo estos proyectos multimillonarios ejercen una labor con una función primordial; reducir la dependencia de opciones basadas en los recursos fósiles como el carbón, el gas natural o el petróleo.
El parque eólico marino, el de Walney Extension, es considerado como uno de los más grandes del mundo, ofreciendo un máximo de energía eléctrica a la población británica valor de 590.000 hogares. De esta manera, se consigue evitar el uso de medios tradicionales, mucho más contaminantes que esta opción, la cual ya es considerada como una de las más eficientes del sector.
Unos aerogeneradores con una extensión para producir 659 MW
Este conjunto de aerogeneradores ocupa una superficie total que discurre en torno a los 145 kilómetros cuadrados, lo que da buena cuenta de la inversión que se ha llevado a cabo por las entidades públicas y privadas residentes en Reino Unido. Operando a máxima capacidad, es capaz de producir 659 MW, convirtiéndose así en la tercera central de estas características en lograrlo.
Tal y como se puede observar en las imágenes anteriores, ofrecidas por el canal de YouTube del medio de comunicación Guardian News, este conjunto de instalaciones han sido grabadas por la cámara de un dron. Cada uno de los molinos de viento cuenta con su respectivo reforzamiento para reducir los daños ante un posible accidente con un barco.
El coste de mantenimiento de este parque eólico es más importante que otros en tierra firme
De igual modo, solamente se puede acceder al interior de los mismos para su reparación a través de una escalera accesible solamente por barco, por lo que los trabajos de mantenimiento y reparaciones implican la existencia de una serie de costes anexos que merece la pena apostillar. No obstante, los números cuadran, ya que esta centrar ofrece energía limpia a más de medio millón de hogares en Reino Unido.
Según se puede ver en la página web de la compañía, existen 2 modelos de molinos de viento, de 188 y 195 metros de longitud. En relación a los primeros, cada una de las unidades dispuestas es capaz de generar hasta un total de 7 MW, mientras que el segundo incrementa su volumen de producción en un MW adicional.
Una instalación pensada el efecto tras muchas cabilaciones
Este parque eólico marino, con una inversión multimillonaria, se llevó a cabo bajo un estricto programa de certificaciones. Las múltiples compañías que invirtieron en el proyecto tuvieron que realizar decenas de estudios de viabilidad en términos de calidad del aire, incidencia en los hogares y, sobre todo, en materia de infraestructura.
Esta obra faraónica solamente será amortizada si se lleva a cabo un uso primordial de la energía eléctrica que se produce. Esta especie de huerto eléctrico permitirá el cierre, en un futuro, de centrales nucleares, uno de los objetivo que se ha fijado Reino Unido y el resto de la Comunidad Europea en el medio plazo.
Como es lógico, este tipo de instalaciones tienen una especial incidencia en la economía. Tanto las familias como las empresas ganarán poder adquisitivo y competitividad, respectivamente, al aprovecharse de un precio energético menor.
Esta modalidad de obtención energética se ha popularizado en los últimos años de la mano de inversiones realizadas en materia de biomasa, solares o instalaciones hidroeléctricas. ¿Llegará algún día en el que no sea necesario el empleo de las fuentes de energía tradicionales?