Crean un submarino que se convertirá en próximo capricho de los más adinerados
Si fueses millonario/a, ¿comprarías un submarino para tus escapadas en el yate? Esto es justo lo que pretende una empresa dedicada a la fabricación de esta tecnología.

En la actualidad, el número de ricos por millón de habitantes es mucho mayor que el que había hace unas décadas. Pese a haber superado una crisis económica en los últimos años y estar a punto de comenzar una nueva etapa de recesión, lo cierto es que el número de personas con unas cuantas cifras en el banco no ha parado de incrementarse. Esta tendencia, de hecho, continuará en el futuro.
Ante esta situación, el mercado próximo al mundo del lujo ha experimentado, por tanto, un fuerte crecimiento. Tanto es así que cada vez surgen propuestas más disparatadas para atender nuevas necesidades. Los yates, por ejemplo, hace ya un tiempo que se han convertido en uno de los caprichos por antonomasia de los nuevos acaudalados. Ahora bien, ¿creías que iba a ser suficiente?
U-boat Worx es la empresa que se encarga de la producción del submarino para ricos
Los accesorios a este medio de transporte de recreo podrían ser muchos, tales como una pequeña lancha o un par de motos de agua acopladas en la popa del barco. Lo cierto es que una nueva alternativa podría cobrar sentido en el estrafalario mundo del dinero. ¿Puede un submarino ser el próximo capricho de los más ricos? Esto es justo lo que se plantea la empresa U-boat Worx.
Esta compañía acaba de presentar un modelo que está especialmente diseñado para ofrecer una experiencia diferencial en el sector. Gracias a la tecnologías que incorpora el modelo Nemo, sería posible visitar las profundidades del océano por tiempo limitado y bajo una serie de condiciones específicas. Como es lógico, por otro lado, su coste no es accesible a todo el público, algo que no será problema.
Veamos cuáles son las cualidades de este modelo tan curioso, por qué estamos ante el desarrollo de un nuevo sector en el que se espera una mayor demanda en el futuro y, por supuesto, hasta qué punto se espera que pueda ser exitoso entre la población más acaudalada. He aquí las claves de un proyecto que está llamado a crear un nuevo segmento.
Un submarino creado exclusivamente para los más ricos
Adquirir el modelo Nemo no es accesible para cualquier persona con más de 7 cifras en su haber. Para contar con una de las unidades que se realizarán de forma limitada, es preciso tener un yate o bien, disponer de un automóvil con capacidad para remolcar sus 2.500 kilogramos de peso. Solo así se podrá contar disfrutar de una tecnología que permitirá recorrer el fondo marino.
Se trata de un modelo que está especialmente fabricado teniendo en cuenta la variable peso. De esta forma, se han utilizado en su producción los materiales más livianos del mercado. De esta forma, se consigue mejorar su autonomía, la cual estará limitada a las 8 horas de uso teóricas. No obstante, cabe recalcar que todo dependerá del tipo de uso que se le dé en cada circunstancia.
La velocidad máxima del submarino bajo el agua está limitada a 3 nudos
Por otro lado, está pensado para poder sumergirse a una profundidad máxima de unos 100 metros. Así, será compatible para ser utilizado en una gran parte de las zonas por las que discurrirá el yate sobre el que, en teoría, se transportará por mar. En relación con su velocidad máxima, es importante mencionar que estará limitada a 3 nudos, algo común en el ámbito subacuático.
Aun así, el proceso de adquisición de una unidad del Nemo no es tan sencillo como parece. No requiere instructor o piloto que se ponga al mando de los mandos. Sin embargo, sí que se requiere un conocimiento expreso de uso del submarino. Por ello, se deberá superar un curso de hasta 12 horas para poder manejar y controlar cada uno de los parámetros que tiene cada una de las unidades.
Un submarino que solamente será producido bajo pedido garantizado
El submarino en cuestión, según se puede leer en la propia página web de la empresa, tiene un precio fijado en unos 975.000 euros sin incluir impuestos y otros cargos adicionales. No obstante, se trata de un proyecto sobre el que deberán realizarse importantes inversiones. Por ello, solamente se producirá si existe un número mínimo de clientes potenciales, los cuales deberán pagar una parte en concepto de señal.

Este submarino solamente será una realidad si hay una serie de pedidos mínimos. Megaricos
Este ambicioso programa, por tanto, todavía no está garantizado. Aun así, si finalmente consigue salir adelante, estaríamos ante una nueva forma de entender el mercado más elitista. ¿Hasta qué punto tener un submarino en propiedad será una realidad más pronto que tarde? Esta es, sin duda, una de las claves a tener en cuenta teniendo en cuenta la actual situación.
Sea como fuere, lo cierto es que los primeros pedidos no llegarían a materializarse hasta dentro de un par de años. Por ello, es pronto para determinar hasta qué punto estamos ante un nuevo salto en lo que se refiere a gustos estrambóticos.