Una dentadura inteligente que analiza la saliva: lo último en tecnología wearable para medir tu salud
La medición de nuestro organismo empieza a ser demasiado profunda, ¿no crees?

Disfrutamos de excepcionales dispositivos en la actualidad, aunque si de wearables estamos hablando, nadie en su sano juicio mencionaría una dentadura inteligente. Podemos medir nuestras constantes y la actividad física a través de pulseras y relojes inteligentes, pero nunca antes habíamos escuchado hablar acerca de aparatos dentales o prótesis con capacidad de analizar parámetros del interior de la boca. Ahora, dos compañías se ponen de acuerdo para enseñarnos que esto es posible.
Un sensor en la boca y un wearable para analizar saliva
La empresa Silicon Labs ha presentado recientemente en su página web un nuevo procesador, de un tamaño tan diminuto como el que puedes ver en el tuit bajo estas líneas y que estará disponible para hacer funcionar aquellos dispositivos inteligentes y wearables que así lo requieran. En este caso, la compañía se ha asociado con la firma Lura Health para combinar el poder de su último chip con un sensor dental de última generación, tal y como se muestra en la web de la empresa de salud.
Remember when we said smaller than a tooth? Lura Health, a medical device manufacturer and participant in the Alpha program for our BG27 is using a tooth mounted sensor to test for over 1,000 health conditions via data from saliva. More here from @verge: https://t.co/MVwHtNBQUB
— Silicon Labs (@siliconlabs) March 14, 2023
El chip xG27 cuenta con conectividad Bluetooth y ya está siendo probado en un sensor que permitirá que el paciente que lo lleve puesto, literalmente porque va pegado al diente, pueda tener un diagnóstico casi inmediato a través del análisis de su saliva. El sensor se incorporaría en lo que se ha denominado un 'retenedor inteligente', que iría pegado al diente por personal especializado, y según la propia compañía, éste podría ser capaz de detectar más de 1.000 enfermedades.
Otras empresas han intentado implantar este tipo de sensores, pero muchas de ellas han tenido que vérselas con la administración norteamericana, que no ha aprobado su uso. Sin embargo, Lura Health parece que ya ha finalizado la fase de pruebas con pacientes, gracias a la colaboración con la Escuela de Medicina Dental UConn, y está preparando someterse al proceso de regulación de la Administración de Alimentos y Medicamentos. En caso positivo, podríamos ver a las primeras personas con este sensor en sus bocas en cuestión de uno a dos años.