El verdadero Kraken: así fue como un equipo de científicos capturó en vídeo al animal que inspiró la leyenda
El animal que se ha convertido en leyenda se deja ver a casi un kilómetro de profundidad en Mexico.

Las leyendas sobre monstruos gigantescos son una parte muy apasionante del folclore en todo el mundo. El monstruo del lago Ness o el Gigfoot son algunos de los mitos más extendidos, que han protagonizado películas y parecido en decenas de libros y videojuegos. Aunque la leyenda adorne los detalles, muchas de estas historias tienen su raíz en un animal real, que aunque no tenga las características que aseguran las historias, sí que guarda semejanza. Es el caso del legendario Kraken, que pese a lo que muchas personas creen, es un animal que existe de verdad.
No te preocupes, es poco probable que la próxima vez que te subas a un barco seas arrastrado a las profundidades por el Kraken, pero si sabes donde buscar, puedes llegar a verlo. Esa era la esperanza que llevó al doctor Nathan Robinson a reunir un equipo de investigadores del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC para buscar al legendario animal. Las historias hablan de un pulpo o calamar gigante capaz de engullir barcos enteros, y es una de las historias más populares de la mitología escandinava. El animal que inspira la leyenda no puede presumir de ser tan monstruoso, pero aun siendo mucho más pequeño, es increíblemente difícil de ver.
Se ha documentado la existencia del calamar gigante por varias fuentes, pero nunca había sido grabado en vídeo en el momento en el que arrancó la expedición del CSIC. Para intentar conseguir imágenes, Robinson y su equipo crearon una plataforma pasiva sumergida entre 557 y 950 metros en el Golfo de México, y allí, esperaron. Dejaron una cámara encendida en todo momento, pero los calamares gigantes son criaturas muy esquivas, que no se confían con facilidad.
Una criatura esquiva que jamás se había dejado ver delante de las cámaras
Para atraer la atención del animal, el equipo utilizó una medusa falsa como cebo. A esas profundidades es difícil ver, y uno de los mecanismos de defensa de las medusas de estos ecosistemas es emitir una luz luminiscente. Los calamares no suelen comer medusas, pero el equipo construyó este cebo para que se activase en el momento en que algún animal entrase en contacto con ella. El equipo dejó la trampa preparada y esperó durante días.
Finalmente, en junio de 2021 pudieron captar por primera ver un espécimen en su hábitar natural. El calamar se paseó por delante de la cámara exhibiendo su increíble envergadura y pasando a la historia por ser el primer individuo de esta especie que se ha conseguido documentar en vídeo. El canal de Technorites en Youtube ha recopilado algunos de los planos más impresionantes, pero si quieres ver todo el metraje, lo tienes disponible en esta publicación científica en Science Direct
Las profundidades marinas son unos de los lugares más remotos e inexplorados del planeta. El fondo del mar es en muchos casos terreno completamente virgen, pero con los avances tecnológicos estamos desarrollando cada vez más herramientas que nos permiten explorarlo. Todos los años se descubren nuevas especies, tanto de fauna como de flora, que consiguen adaptarse de manera diferente a este despiadado ecosistema. La fisionomía de estos animales, adaptados a condiciones tan extremas, jamás dejará de sorprendernos.