Idean la forma de crear un nuevo combustible para el trabajo en el campo y su producción es sencilla
Una compañía estadounidense presenta un prototipo de máquina de manipulación de materiales que combina electricidad y biometano y que promete ahorros energéticos de hasta el 70 %
Una de las ferias de maquinaria agrícola más grandes e influyentes, Agritechnica 2025, ha sido el escenario elegido por la empresa New Holland para mostrar un prototipo de manipuladora telescópica híbrida, que ya no tiene que elegir entre baterías o combustibles fósiles. Y parece que se ha conseguido romper una barrera presente en el sector: máquinas con la potencia y la autonomía que exige una jornada completa, pero sin las limitaciones de los modelos solo eléctricos ni la dependencia del gasóleo tradicional.
La manipuladora que une potencia, autonomía y energía limpia
La apuesta de New Holland es ambiciosa: mezclar un sistema de propulsión eléctrica, el sistema completo que convierte la energía eléctrica en movimiento, con un motor de biometano. Y los números de la manipuladora son muy interesantes: mide entre 7 y 9 metros y levanta hasta 4,2 toneladas, igual que una máquina similar diésel de tamaño medio. Este es el primer modelo híbrido pensado, de verdad, para las tareas agrícolas habituales.
Su secreto, según la información publicada en el comunicado de CNH Industrial, parece estar en cómo se reparten el esfuerzo la batería y el motor de metano. Si está a media carga, puede operar en el modo eléctrico durante unas cuatro horas y llegar hasta las seis horas con menos carga. Cuando llegan los trabajos duros es cuando entra en escena el motor F28 de cuatro cilindros alimentado con biometano, que aporta potencia extra y, al mismo tiempo, recarga la batería.
Si el día se alarga, la batería admite carga rápida y la combinación de electricidad y biometano permite seguir trabajando sin interrupciones. La idea clave es que el agricultor no tenga que estar pendiente de las cargas ni dependa del gasóleo para llegar al final de la jornada. Respecto al motor, hablamos de un total de 2,8 litros y 100 caballos. La batería, de 70 kWh, impulsa tanto el modo híbrido como el eléctrico. En las pruebas de campo, se consiguió ahorrar un 70% de energía y obtener un 30 % más de rendimiento y autonomía en comparación con una manipuladora diésel.
No hay que olvidar, además, una clara ventaja: el silencio de la manipuladora en establos y naves ganaderas. A menos ruido, menos estrés para animales y personas. La batería puede recargarse con electricidad procedente de paneles solares o de plantas de digestión anaerobia, capaces de generar biometano con residuos agrícolas.
Marco Gerbi, responsable de producto de manipuladoras y tractores de la empresa, asegura que "con este prototipo, New Holland demuestra su compromiso continuo con la estrategia "Líder en Energía Limpia", basándose en nuestro liderazgo en máquinas de combustible alternativo". Y poder utilizar máquinas que mantengan la productividad, pero con una huella climática menor es un paso adelante increíble en el sector primario.