Sabemos cuál es el estado favorito de Elon Musk: más cargadores para coches eléctricos que surtidores de combustibles convencionales

Si hay un lugar en Estados Unidos que desde que comenzara el movimiento hacia la implantación de un modelo de transporte limpio ha liderado la carrera ese es el estado de California. No en vano cuenta con cerca de un millón de coches eléctricos en su parque automovilístico, casi una tercera parte sobre el total de la nación. Sin duda un dato que sacará una sonrisa a Elon Musk en un momento delicado por la crisis con los Cybertruck.

Buena culpa de alcanzar esos datos la tiene la continua expansión de puntos de carga para los coches eléctricos del estado, que se sitúa a la cabeza en cuanto a número de cargadores se refiere con 178.549 entre públicos y privados, frente a los 120.000 surtidores de gasolina con los que cuenta. Esto supone un 48% más de puntos de recarga limpia frente a las estaciones de repostaje de hidrocarburos.

Esta cifra fue facilitada por el gobernador californiano Gavin Newsom que celebraba en su comparecencia el hecho de que sus conciudadanos respaldasen las medidas impulsadas desde la administración local para abordar un futuro más sostenible en materia de transportes: “mientras el gobierno federal trabaja para dificultar la carga de su coche eléctrico, California está haciendo lo contrario. Ahora tenemos casi un 50 % más de cargadores que surtidores de gasolina en el estado, lo que significa que tienen más opciones que nunca para cargar su vehículo”, destacó.

Estamos abrazando nuestro futuro de autos limpios y brindando a los consumidores más opciones, sin importar qué mandatos del ‘gran gobierno’ salgan de Washington.

Las palabras de Newsom contaban con el respaldo de la Comisión de Energía de California tanto en lo referente a datos como a la satisfacción de los conductores, línea en la que se pronunció el presidente de la comisión, David Hochshild: “El estado continúa invirtiendo en infraestructura para vehículos eléctricos, con especial énfasis en zonas de difícil acceso, lo que facilita la compra de estos vehículos para quienes compran autos nuevos. La experiencia de los conductores de vehículos eléctricos en California mejora día a día”, afirmó sin ningún género de duda.

Para fomentar aún más la adopción de los vehículos eléctricos y esa transición al transporte limpio, California pone a disposición de sus ciudadanos y empresas subvenciones y reembolsos, como el plan de inversión de 1.400 millones destinado a la instalación de más estaciones de carga eléctrica y reabastecimiento de hidrógeno dentro del programa de Transporte Limpio de la CEC. A buen seguro que entre los que ya hay instalados y los que se instalen en el futuro habrá muchos de los que analizamos hace unos meses.

Estas iniciativas, junto con la expansión de la infraestructura de carga y otras políticas centradas en las mejoras en la infraestructura del transporte público y ferroviario, posicionan a California como líder en la transición hacia un futuro de transporte más limpio y sostenible y como abanderado en Estados Unidos de este movimiento verde.