Google Chrome contra las cuerdas: el juicio antimonopolio continúa adelante
El navegador web tiene una cuota de mercado superior al 60%, mucho más que Safari, Edge y Firefox juntos

Google es la reina de Internet. La compañía de Mountain View cuenta con varios de los servicios en línea más utilizados en todo el mundo. Su motor de búsqueda es el más popular del planeta, con una cuota de mercado aproximada del 90% y alrededor de 5,9 millones de exploraciones por minuto. Muchas de las peticiones de los usuarios se realizan a través de su navegador Chrome.
Aunque Safari y Edge le han quitado un poco de protagonismo —Firefox está en horas bajas—, Google Chrome continúa siendo el navegador web más usado. En marzo de 2025, su cuota de mercado era de algo más del 66%, seguido de la propuesta de Apple (17,59%) y de Microsoft (5,18%).
Chrome es la puerta de acceso a Internet de miles de millones de dispositivos: está preinstalado en los smartphones y tabletas con sistema operativo Android, además de en los ordenadores Chrome OS. Como es lógico, el buscador por defecto es Google. Y esto no le gusta a los Estados Unidos de América, que ve al navegador web como la herramienta del gigante tecnológico para ejecutar prácticas monopolísticas.
La hegemonía online de Google podría acabar para siempre en las próximas semanas
El Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos ha propuesto que Google se deshaga de su navegador web Chrome como medida para detener su negocio monopolístico en el mercado de las búsquedas en línea. La propuesta surgió a raíz de una sentencia de agosto de 2024, en la que el juez federal Amit Mehta determinó que Google había mantenido ilegalmente su dominio en el sector de las búsquedas.
Las próximas semanas podrían afectar seriamente a la estructura de Google para siempre. A partir de ahora, el Departamento de Justicia de Estados Unidos intentará convencer al tribunal de que Google debería verse obligado a despojarse de Chrome, desvincular Android y realizar otros cambios fundamentales. Por su parte, Google intentará alegar que la postura del gobierno es demasiado extrema, manteniendo así la esperanza.
De momento, el DOJ tiene la sartén por el mango. Google perdió la fase de responsabilidad en este juicio al determinarse que había violado la Ley Antimonopolio Sherman al "adquirir y mantener deliberadamente un poder monopolístico". A los ojos del tribunal, la compañía tiene un monopolio ilegal en los servicios de búsqueda y la publicidad online.
Google no ha salido bien parada en otros juicios relacionados con casos antimonopolio, como el de Google Play, respaldado por Epic, la compañía tras la tienda de videojuegos Epic Games y el popular videojuego Fortnite. Las medidas correctivas de la tienda de aplicaciones de Google están suspendidas al momento de escribir estas líneas, a la espera de la apelación.
El Departamento de Justicia de los Estados Unidos de América considera que este es el caso antimonopolio más importante en la historia del país norteamericano desde el juicio contra Microsoft en la década de 1990. El DOJ ha sugerido la existencia de numerosas entidades que podrían adquirir Chrome y realinear instantáneamente la situación del mercado online, y presentará testigos de Yahoo!, DuckDuckGo, Microsoft y otras compañías para explicar cómo Google obstaculizó sus negocios de búsqueda y cómo la venta de Chrome podría ser la solución al problema.