Cómo aparcar un coche rápido y fácil: todas las formas de estacionar
Aparcar es una de las maniobras más repetidas en el día a día, pero tiene su ciencia. Cada tipo de aparcamiento tiene sus trucos y hoy vamos a repasarlos todos para aparcar fácil, rápido y a la primera.

Aparcar es una de las situaciones más habituales a las que se debe enfrentar un conductor. Si bien al final se trata de una maniobra mecánica, es cierto que también se trata de uno de los aspectos que más impone a los conductores nóveles o que están aprendiendo para sacarse el carnet de conducir. Por ese motivo existen algunas claves para llevar a cabo esta maniobra, sea cual sea el vehículo y el tipo de maniobra que se tiene que realizar para estacionar.
Haciéndonos ecos de las claves y enseñanzas que se aplican en las autoescuelas hemos recopilado una serie de 'tips' o consejos para aprender a aparcar. Con todo, si está a punto de empezar tus clases prácticas, te vas a examinar del carnet de conducir o eres un conductor novel te recomendamos que sigas siempre las indicaciones concretas de los profesionales de la enseñanza.
Cómo puedo aparcar y qué debo saber
Dejando al margen situaciones puntuales, como conductor se puede aparcar de tres modos distintos: en línea, en batería y en oblicuo. Cada maniobra tiene unos pros y contras, así como unos pasos y claves para aparcar perfectamente. Una vez aparcado el vehículo, cabe recordar que hay ciertas prácticas que pueden ser multadas incluso si el coche se encuentra detenido.
Aunque es cierto que en las autoescuelas hacen especial incidencia en estos pasos y claves para aparcar de manera correcta en línea, batería y oblicuo sea cual sea la circunstancia, entre otras cosas porque el examen de conducir suele incluir una de estas maniobras, también es verdad que como mejor se aprende a aparcar es con el tiempo y a base de práctica.
De igual forma, conducir en el día a día el mismo vehículo también ayuda a 'hacerse con las medidas' más rápidamente y conseguir unas maniobra de aparcamiento mucho más fluidas, incluso si el espacio disponible es más ajustado.

Aparcar en línea requiere más maniobras, pero es la forma más habitual de aparcamiento.
Trucos para aparcar
Cada tipo de maniobra tiene una serie de pasos y trucos que, como decíamos, se enseñan en la autoescuela. Aunque es cierto que se hace especial incidencia en aprender el procedimiento para aparcar en línea, hay 'tips' para aparcar de cualquier modo. Aunque estacionar es algo que debemos hacer como conductores, siempre nos podemos apoyar en aplicaciones para encontrar aparcamiento o incluso para recordar dónde se ha dejado el vehículo.
Trucos para aparcar en línea
El aparcamiento en línea es el más frecuente, pero también el más complejo. Por ese motivo, en las autoescuelas se hace especial incidencia en esta maniobra para encontrar una serie de trucos con los que ajustar el aparcamiento. Con todo, cada coche tiene sus medidas y hay que ajustar los cálculos hasta que se automatiza la maniobra, sobre todo en momentos en los que hay poco margen de espacio o tiempo.
- El primer paso es señalizar la maniobra con el intermitente, permitiendo así que el resto de conductores conozcan nuestras intenciones.
- A continuación hay que situar el coche en paralelo al vehículo que está aparcando delante, dejando la distancia de un metro con el vehículo estacionado. Un truco para hacerlo perfecto es ajustar la trasera de los coches y, de forma menos exacta, haciendo coincidir los retrovisores.
- Una vez situado el coche en paralelo hay que dar marcha atrás en línea recta hasta que por la ventanilla trasera derecha / izquierda se vea la esquina trasera izquierda del otro coche.
- Llegado a este punto hay que girar del todo hacia la derecha / izquierda y retroceder hasta que por el retrovisor izquierdo / derecho (según sentido del aparcamiento) se vea el faro delantero derecho / izquierdo del vehículo de detrás. También se puede tomar como referencia el inicio de la matrícula delantera.
- En ese momento, el coche tendrá un ángulo de 45º con los vehículos aparcados y se podrá empezar a volver hacia la derecha / izquierda para terminar de meter el coche. También se puede buscar tocar el bordillo con suavidad con la rueda y luego ajustar el aparcamiento moviéndonos hacia delante.
- Es importante encajar el vehículo y regular la distancia para que el coche quede más o menos a la misma distancia del vehículo de delante y el de detrás.

La maniobra para aparcar en batería y en oblicuo son bastante parecidas.
Pasos para aparcar en batería
Aparcar en batería es una maniobra más sencilla que hacerlo en línea, pero también se pueden seguir una serie de pasos y trucos para optimizar la ejecución. De hecho, si se automatizan se puede aparcar en una única maniobra, teniendo siempre cuidado con los coches de al lado y los bordillos. El gran problema de aparcar en batería es que en muchas ocasiones los coches de al lado pueden golpear el tuyo al abrir las puertas.
- Como siempre, hay que señalizar en primer término con el intermitente la maniobra.
- Una vez que se comienza la maniobra, hay que colocar el coche en perpendicular a los que están aparcados a distancia de un metro aproximadamente.
- Cuando se alcanza el borde del vehículo que quedará a nuestro lado en la plaza de aparcamiento, hay que girar la dirección del todo a la derecha / izquierda e ir retrocediendo mientras se mira el retrovisor para comprobar que no se golpea el coche ya aparcado.
- Si la maniobra es correcta, el coche se irá alineando con los vehículos aparcados mientra se va enderezando la dirección. Se debe comprobar por los retrovisores si el coche queda en paralelo a los vehículos aparcados. Siempre se puede volver a salir ligeramente para corregir la trayectoria y dejar el coche completamente en paralelo.
Pasos para aparcar en oblicuo
Aparcar en oblicuo es bastante similar a hacerlo en batería. De hecho, se puede considerar que este tipo de aparcamiento es un derivado del aparcamiento en batería en el que se busca de algún modo facilitar la maniobra a los conductores. Se trata de un método de aparcamiento sencillo. Cada vez se opta más en los entornos urbanos por aparcamientos oblicuos, ya que no ocupan mucho más espacio que los aparcamientos oblicuos y la maniobrabilidad es mucho mejor. Aunque se trata de una maniobra sencilla, te recomendamos seguir los siguientes pasos:
- Como toda maniobra de aparcamiento debe empezar dando el intermitente hacia el lado en el que se vaya a aparcar para que otros conductores se puedan anticipar a nuestros movimientos.
- Una vez señalizada la maniobra procedemos a girar la dirección del coche y avanzar lentamente hasta que el frontal del coche encaje en el hueco disponible.
- Durante la maniobra debemos vigilar en primer término por las ventanillas laterales que no vamos a rozar el coche o los coches que tenemos al lado. Según el coche avanza en la plaza de aparcamiento, la vigilancia se hará por los retrovisores.
- De igual forma, hay que tener cuidado con no rozar las esquinas delanteras de nuestro vehículo.
- Para salir de la plaza de aparcamiento se debe hacer marcha atrás y en línea recta, girando toda la dirección a la derecha/izquierda (según sentido) cuando el eje trasero de tu coche llegue a la esquina trasera del vehículo que tienes en el lado hacia el que vas a girar.