Así es la contradicción de Elon Musk en relación con la movilidad sostenible

El coche eléctrico será el principal protagonista de la movilidad sostenible en los próximos años. No obstante, ante el voluminoso número de automóviles con mecánicas de combustión interna, todo parece indicar que la transición será cosa de varios años en los que las opciones eléctricas deben primar por encima de todo.

Ahora bien, ¿es esta la única alternativa? Lo cierto es que no. La flexibilidad que aporta esta innovación hace posible que existan múltiples plataformas en las que un motor eléctrico y un conjunto de baterías tenga un papel fundamental. De hecho, ya se está viendo un impulso por esta tecnología sobre todos medios de transporte como bicicletas y patinetes eléctricos.

Observando la competencia que existirá en el medio plazo en términos urbanos, ¿podría decirse que existirá una competencia entre estas diferentes alternativas? El propio Elon Musk ha sacado a relucir este debate destacando lo que para él representa el patinete eléctrico. ¿Por qué ha decidido atacar el fundador de Tesla a una solución que puede dejar atrás emisiones contaminantes?

Es importante recordar cómo hace unos años, cuando el Model S comenzaba a despuntar, se ofreció a decir que los demás coches eléctricos del sector no eran competencia directa de Tesla. Por aquel entonces, argumentaba que cualquier disposición de opciones eléctricas era positivo para contribuir en la electrificación del parque automovilístico.

¿Por qué ha decidido, en esta ocasión, criticar el uso de este medio de transporte en plena demanda creciente? ¿Podría afectar al futuro de Tesla la popularización de los patinetes eléctricos? En principio, por la diferencia de precio no será. Entonces, ¿por qué podría haber comenzado un crudo enfrentamiento entre la firma de Palo Alto con fabricantes del tamaño de Xiaomi?

Una competitividad que tendrá sentido en el medio plazo

Tesla, en la actualidad, comercializa coches por encima de los 35.000 dólares. Cuando llegue la versión estándar, estaremos ante un producto que podría considerarse generalista en muchos mercados. En contraposición a ello, compañías como Xiaomi ya ofrecen patinetes que, en muchos casos, pueden tener unos precios que oscilan entre los 300 y 400 dólares.

Teniendo en cuenta que la principal virtud del coche eléctrico es su circulación en el medio urbano, parece que queda claro que en un futuro ambas tecnologías están condenadas a ser rivales en términos de usuarios. De hecho, muchos usuarios podrán llegar a plantearse si de verdad les es necesario gastar unos cuantos miles de dólares en función a sus necesidades.

Tesla, en base a estos datos, podría ver cómo en un futuro el patinete eléctrico puede llegar a robar alguna que otra venta de algún vehículo. Ante este potencial escenario, Elon Musk ha decidido sacar la artillería pesada en busca de un objetivo; hacer caer la popularidad que está obteniendo el patinete eléctrico.

El patinete eléctrico carece de dignidad.

Tal y como uno puede imaginarse entonando tal frase, según se puede leer en el portal Vox, no es de extrañar que todas las voces apunten a que Elon Musk ha vuelto a hacer una de las suyas frente a los micrófonos. ¿Acierta el magnate sudafricano acusando a este medio de transporte bajo esta premisa?

El número de defensores del coche eléctrico no para de incrementarse

Las mecánicas eléctricas se han posicionado como una de las soluciones más lógicas para aquellos que buscan un medio de transporte sostenible. El desarrollo del patinete que no emite partículas contaminantes podría frenar el crecimiento de Tesla en el largo plazo. De hecho, en apenas un par de años se ha multiplicado de manera exponencial su uso.

El uso de los patinetes eléctricos de Xiaomi pare no tener límite. <a href="https://computerhoy.com" rel="nofollow" target="_BLANK">Computer Hoy</a>

Ante esta situación, una pataleta de Elon Musk confirma la estandarización de una nueva alternativa que ha conseguido superar de largo la venta de bicicletas eléctricas. Ahora bien, ¿y si esta afirmación está especialmente relacionada con este otro medio de transporte que acabamos de poner en escena? ¿Y si Tesla podría lanzar una bicicleta con baterías en el corto plazo?

Esta otra opción ha cobrado un mayor sentido. La firma de Palo Alto podría estar creando una solución disruptiva, con un diseño innovador y con unas aptitudes que podrían estar muy próximas a las que ofrece el clásico patinete eléctrico. ¿Veremos una nueva competición por parte de Tesla con el objetivo de hacerse un hueco en esta industria?

Para ello, la firma con sede de producción en Freemont debería vigilar muy de cerca la variable precio. Teniendo en cuenta el coste que supone una unidad fabricada por un fabricante como Xiaomi, lo lógico sería pensar que la alternativa de Tesla fuese competitiva. Aun así, todavía están todas las líneas abiertas. ¿Alguna otra posibilidad?