Muchos coches de Porsche en Rusia han dejado de funcionar. Todo apunta a que fue un sabotaje

Como Porsche no ofrece un canal de soporte oficial en Rusia desde febrero de 2022 debido a la invasión a Ucrania, muchos conductores todavía no pueden utilizar sus vehículos

Muchos coches de Porsche en Rusia han dejado de funcionar. Todo apunta a que fue un sabotaje
Porsche 911 clásico | Imagen de Porsche
Publicado en Motor

Debido al alto valor que están alcanzando varios modelos de Porsche clásicos, como el 911, los robos de estos coches se están multiplicando. Por ello, el fabricante de automóviles de lujo de alta gama alemán permite dotarlos de sistemas antirrobo, los cuales constan de sensores ocultos conectados a una red de seguridad europea. Estos sistemas son compatibles con la mayoría de sus propuestas «antiguas», desde los clásicos 356 de seis voltios hasta el Carrera GT.

La firma asegura que extraer el hardware de los sistemas es muy complicado, y que cualquier intento de manipulación del vehículo resultará en una notificación para el propietario a través de la aplicación móvil del sistema antirrobo. Si el coche llega a ser robado, las autoridades son notificadas para que puedan rastrear su paradero a través de GPS. Utilizar inhibidores también activa su alarma.

El precio de la instalación ronda los 1.000 euros, y el coste mensual asciende a unos 20 euros. Una módica cantidad para dormir tranquilo por las noches. El problema es cuando este sistema es el responsable del bloqueo de los coches. Es lo que ha ocurrido a cientos de vehículos de Porsche en toda Rusia tras la desconexión de los sistemas de seguridad. Todo indica a que podría deberse a un sabotaje.

Un corte en la comunicación por satélite habría inutilizado los Porsche de Rusia

Porsche AG 2018

Porsche ofrece un sistema de seguridad que bloquea sus vehículos clásicos cuando son manipulados para robarlos | Imagen de Porsche

Los propietarios de cientos de coches de Porsche en Rusia se encontraron con que no funcionaban al intentar hacerlos arrancar. El problema está en el sistema de rastreo de vehículos, un sistema de seguridad satelital que, en teoría, protege contra robos. El pasado mes de noviembre, algunos propietarios ya reportaron problemas. En algunos casos, se apagan poco después de arrancarlos.

Rolf, el mayor grupo de concesionarios de Rusia, confirmó que el problema se debe a una pérdida total de la conexión satelital con este sistema de seguridad. Cuando se pierde la conexión, el sistema interpreta la interrupción como un posible intento de robo y activa automáticamente el inmovilizador del motor.

Por tanto, cualquier coche de Porsche equipado con este sistema es susceptible de fallar cuando se pierde la conexión satelital, ya que se activa el protocolo antirrobo, interrumpiendo el suministro de combustible y bloqueando el motor por completo. Este fallo afecta a los modelos anteriores a 2013 que incorporan el sistema de fábrica, incluyendo los Cayenne, Macan, Panamera, Taycan, 911 y los 718 Cayman y Boxster.

Algunos representantes de concesionaron apuntan a que la interrupción podría haber sido deliberada, aunque no hay pruebas que respalden esta afirmación. Sin el apoyo activo de la sede central de Porsche, los servidores regionales que gestionan estas conexiones podrían simplemente estar fallando. Otro creen que el problema podría deberse a interferencias satelitales.

Varios de los afectados aseguraron que recuperaron el control de sus vehículos tras desconectar las baterías de sus automóviles Porsche por hasta 10 horas, mientras que otros lograron restablecer la función, desactivando o reiniciando por completo el módulo del sistema de seguridad. Los concesionarios de Rolf han dado instrucciones a los técnicos de restablecer manualmente las unidades de alarma, lo que a menudo requiere desmontar parcialmente el vehículo.

Otros usuarios, a pesar de los intentos, tienen un carísimo pisapapeles de diseño en la puerta de casa o en el garaje. Y es una situación complicada, ya que Porsche detuvo las entregas y suspendió las operaciones comerciales en Rusia tras la invasión de Ucrania en febrero de 2022, lo que significa que no hay un canal oficial de atención al cliente en el país de Vladímir Putin.

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