Por qué algunos velocímetros tienen un punto rojo en los 50, 90 y 130 kilómetros
Es algo así como un truco, pero que no tiene tanta utilidad en nuestro país

El cuadro de instrumentos de cualquier coche está diseñado para darnos toda la información posible sobre el estado del vehículo, obteniendo información instantánea sobre el ritmo al que vamos, las revoluciones, el combustible que nos queda, la temperatura o la presión del aceite. Sin embargo, solemos mirarlo para poco más que saber la velocidad a la que circulamos.
Y de velocímetros va hoy la cosa. Algunos coches tienen un pequeño punto rojo en determinadas velocidades, que casi siempre suelen ser 50, 90 y 130 kilómetros por hora. ¿Tiene alguna utilidad, o es algo meramente estético? Pues salgamos de dudas.
Un recordatorio “Made in France”

Estamos ante una recomendación de un coche francés que se puede traducir en multa en España
Pues no, no es nada estético. Aunque, a decir verdad, en algunos cuadros, esto de los puntitos de colores queda bastante bonito. Los puntos rojos en determinadas velocidades no dejan de ser una ”chuleta”, como aquellas fórmulas de física que apuntabas en los bolis Bic con la aguja del compás.
El fabricante del vehículo, con esos puntitos, lo que nos está recordando son las velocidades máximas de las vías principales. Pero no las de España, caro. Sino las de Francia. Y es que este pequeño recordatorio lo vas a encontrar únicamente en vehículos de marcas galas:
- 50 km/h: el punto indica que es la velocidad máxima para circular en ciudad. En España tenemos la misma limitación, aunque cada vez son más las zonas urbanas que se limitan a 30 kilómetros por hora.
- 90 km/h: es la velocidad que se utiliza en nuestro país vecino en carreteras de un solo carril por sentido. En nuestro país es más o menos igual, aunque es bastante común encontrar zonas con muchas curvas que tienen kilómetros y kilómetros con límites de 70 kilómetros por hora o incluso menos.
- 130 km/h: la principal diferencia entre los límites españoles y los franceses es que ellos pueden circular un poco más rápido en autopistas y autovías. Si circulamos a 130 por España, es muy probable que nos acabe cazando un radar, tal y como ya vimos en el artículo de cómo aplicar la regla del 7 para evitar multas de velocidad.
Ahora, estarás pensando que este pequeño truco no tiene ninguna utilidad. Al fin y al cabo, ahora disponemos de vehículos que son capaces de leer señales de tráfico. También solemos circular con un GPS que nos dice en tiempo real la velocidad máxima de la vía. Sin embargo, esto no fue siempre así. Todas estas tecnologías son relativamente nuevas, por lo que no es de extrañar que algunos fabricantes pusieran un poco de su parte para facilitar un poco la vida al conductor.
Por cierto, esto de los puntos no es lo único que sirve de ayuda para los conductores franceses en coches franceses. En la mayoría de los vehículos de Peugeot y Citroën, los velocímetros están escritos en números impares (10, 30, 50, 70, 90, 110, 130…), mientras que en otras marcas, se suelen poner cifras pares.