Qué ventajas tiene comprar un coche pequeño
Los coches pequeños, conocidos como utilitarios, son una gran solución para la movilidad urbana. Sin embargo, este tipo de vehículos están más capacitados de lo que muchos piensan.
La movilidad está cambiando y hoy en día parece casi obligado adquirir un SUV de un tamaño considerable cuando se compra un nuevo vehículo. Mientras este tipo de vehículos destierran a segmentos como el de las berlinas o los monovolúmenes, lo cierto es que existen opciones de mercado igual o más interesantes. Es el caso de los vehículos compactos o utilitarios, un segmento en pleno resurgimiento por la deriva que está tomando la movilidad urbana.
Lejos del estigma que podían tener en el pasado, los compactos y utilitarios son vehículos que presentan una gran cantidad de ventajas, incluso para su uso lejos de la ciudad. Muchas veces, menos es más. Hoy en día no se necesita un vehículo de grandes dimensiones para tener un coche con unas prestaciones interesantes, buen equipamiento y con una versatilidad superior a la que muchos pueden imaginar.
Las siete ventajas de un coche pequeño
Si bien siempre hay que realizar una comprar responsable y decantarnos por el vehículo que mejor se adapte a nuestras necesidades, hoy hemos recopilado algunas ventajas de los coches pequeños respecto a opciones de mayor tamaño. Entre otra cosas porque en la actualidad hay opciones de todo tipo, desde los que buscan coches pequeños y potentes a los que quieren dar el salto a la movilidad eléctrica y apostar incluso por coches eléctricos sin carnet.
Amplia oferta
Aunque como hemos comentado los SUV han colonizado la oferta de los fabricantes, ninguna marca renuncia a tener un utilitario. La oferta hoy en día de vehículos pequeños con espíritu urbanita es muy amplia, pero también existen opciones para los que buscan un coche utilitario con carácter deportivo, ágil y con buenas prestaciones. Como decimos la oferta es realmente amplia y no son pocas las firmas que incluso están ofreciendo vehículos minimalistas pensados para conducir sin carnet.
En este sentido, también hay que tener en cuenta que los vehículos pequeños son una plataforma perfecta para la electromovilidad. Por su contenido tamaño y peso, la electrificación de este tipo de coches es más sencilla y con trenes motrices de menor capacidad se consiguen unas autonomías más que respetables. Por ese motivo, los coches pequeños son una gran opción para dar el salto a la electromovilidad, sobre todo si su uso va a estar enfocado al transporte urbano.
Los vehículos pequeños tienen un precio más contenido y su equipamiento cada vez es más completo.
Menor precio
Además de existir una amplia oferta, los vehículos pequeños englobados en el segmento A son económicos. Bien es cierto que todo depende del nivel de equipamiento, pero como norma son coches accesibles y al alcance de casi todos los bolsillos. Al final, estamos hablando del tipo de vehículo que tiene un precio de partida más bajo cuando son matriculados por primera vez, pero que también tienen precios realmente bajos tanto en el mercado de los coches de ocasión como en el de segunda mano.
Al final, esta cuestión está vinculada a la amplia oferta. Al existir un gran número de opciones en el mercado, no es difícil encontrar vehículos pequeños a precios muy competitivos. Existe cierta facilidad para encontrar ofertas interesantes, ya que las marcas también han puesto sus esfuerzos en este segmento de vehículos para potenciar las ventas entre los clientes con un modelo de vida urbanita.
Seguro más barato
Siguiendo con la línea puramente económica, los vehículos pequeños tienen seguros con un precio realmente contenido. Al final, las compañías de seguros establecen los precios de los seguros para un coche en función de una serie de factores, entre los que está el tamaño, la cilindrada del motor o el precio de mercado del vehículo. En este sentido, los coches del segmento A tienen un tamaño pequeño, su motor es compacto y su precio de mercado bajo, por lo que eso repercute favorablemente en la prima del seguro.
Otro factor a tener en cuenta es que en muchas ocasiones los vehículos pequeños se enfocan en la movilidad urbana, por lo que el kilometraje anual también puede ser limitado. Otra cuestión que puede jugar a favor del propietario de un vehículo pequeño a la hora de contratar un seguro más económico.
Los vehículos pequeños tienen un menor gasto de combustible, por el peso del vehículo y el tamaño de sus motores.
Menor gasto en combustible
La última ventaja a la hora de comprar un vehículo compacto, en lo referente a la cartera, es el gasto en combustible. Por una mera cuestión de peso y su tipo de motorización, los vehículos compactos gastan menos combustible que los coches grandes. Los propulsores de los vehículos del segmento A suelen tener un tamaño pequeño, con una eficiencia energética muy alta y un consumo reducido.
Este axioma también se aplica a los vehículos utilitarios eléctricos, con o sin carnet, ya que el tamaño de sus baterías es menor a la de modelos de segmentos superiores y eso permite cargas más rápidas y un menor coste para una autonomía similar a la de vehículos de tamaño mayor.
Mayor facilidad de aparcamiento
Con una movilidad urbana cada vez más compleja, contar con un vehículo pequeño puede ser una gran ventaja. Al final, un vehículo utilitario o compacto es la mejor opción cuando se trata de movernos por la ciudad. Encontrar aparcamiento es una tarea más sencilla con este tipo de coches. Dentro de la masificación generalizada de las grandes ciudades, encontrar una plaza de aparcamiento con un vehículo compacto es más sencillo que con un coche de dimensiones más grandes.
Además, hay que tener en cuenta que con un coche pequeño resulta más sencillo callejear por las zonas más antiguas y estrechas de la ciudad por su gran maniobrabilidad. Si a eso se suma una motorización eléctrica, cada vez más común en este tipo de coches, la libertad a la hora de moverse por la ciudad es total, ya que no estarán sujetos a restricciones al tráfico por razones medioambientales.
Los vehículos pequeños son cada vez más versátiles y también son aptos para viajes de larga distancia.
Comodidad y equipamiento
Como decíamos al principio, hace años que se desterró la idea de que los coches utilitarios son incómodos y están poco equipados. Los conductores que apuestan por un vehículo pequeño también quieren comodidad y un equipamiento tecnológico de primer nivel. De hecho, hoy en día se pueden comprar coches del segmento A con un precio competitivo que cuentan con la misma tecnología y equipamiento que vehículos de segmentos superiores.
Bajo esta misma idea, los vehículos pequeños son igual de seguros que los coches más grandes, ya que equipan las mismas tecnologías de asistencia a la conducción, tanto pasivas como activas, así como sistemas de seguridad de primer nivel. El tamaño ya no limita la calidad o la seguridad del vehículo como sí pasaba hace décadas.
Versatilidad
De igual modo, la versatilidad ya es una seña propia de los vehículos compactos. Aunque en la mayoría de los casos están enfocados a la movilidad urbana, cada vez son más los conductores que no tienen problema en utilizar coches pequeños en otros ámbitos. Aunque el espacio de carga puede ser reducido respecto a otras opciones de mercado, hoy en día hay soluciones de sobra para mejorar la capacidad de los coches compactos.
En este sentido, un coche compacto es perfectamente válido para un viaje de larga distancia o un viaje familiar, ya que el espacio del habitáculo garantiza la comodidad de los pasajeros y la carga se puede transportar utilizando una vaca o un cofre de techo. Estos dispositivos son la perfecta solución para corregir uno de los pocos defectos de un coche pequeño, el contenido espacio de su maletero.