La fusión nuclear cada vez está más cerca. En China acaban de dar un nuevo paso gracias a este robot
Ingenieros chinos crean potentes y precisos brazos robóticos para trabajar en los entornos extremos de las futuras plantas de energía de fusión
Los reactores de fusión prometen ser la energía limpia e inagotable del futuro, pero construirlos y mantenerlos exige una precisión mecánica casi sobrehumana. Sin embargo, científicos del Instituto de Ciencias Físicas de Hefei, dependiente de la Academia China de Ciencias, han desarrollado una nueva generación de robots diseñados para asumir un gigantesco reto: manipular componentes de varias toneladas dentro de cámaras radiactivas sin margen para el error.
China perfecciona robots para el mantenimiento de reactores de fusión
Recientemente, según el artículo publicado en la revista científica Engineering Applications of Artificial Intelligence, hemos descubierto tres innovaciones clave para la implementación de robots capaces de ayudarnos en tareas extremadamente complicadas en el entorno de un reactor de fusión nuclear. La primera sería un nuevo tipo de articulación robótica para tareas pesadas. Los investigadores consiguieron ganar espacio interno, habitualmente destinado a cables, sin tener que aumentar el tamaño del conjunto. Además, ha podido ganar en fuerza bruta y precisión quirúrgica.
El segundo avance aborda uno de los mayores quebraderos de cabeza de la robótica industrial: insertar piezas con tolerancias microscópicas en entornos de baja visión. A través de aprendizaje por refuerzo profundo, los científicos enseñaron al robot a integrar los datos de una cámara 2D con las lecturas de un sensor de fuerza y par. El resultado fue una precisión inferior a una décima de milímetro, que permite montar los intrincados módulos internos de un reactor de fusión.
La tercera clave, según la información publicada en EurekAlert, reside en el modelo de inteligencia artificial TCIPS, que permite a los robots interpretar el entorno tridimensional. El sistema es capaz de identificar superficies planas, esferas o cilindros y mejora la detección de bordes y relaciones espaciales. Esa comprensión geométrica del entorno permite al robot moverse y orientarse con seguridad en espacios repletos de maquinaria.
Por tanto, la combinación de estas innovaciones permiten dar un salto enorme hacia la automatización inteligente de tareas que hasta ahora eran exclusivas de seres humanos protegidos por gruesos blindajes y gestión remota. Si la fusión nuclear consigue ser una fuente real de energía, lo será gracias a tecnologías como estos robots, capaces de operar con precisión y autonomía cerca de los reactores donde los átomos se unirán para desatar todo su poder.