Reconocimiento facial, la mejor baza de China para "cazar" fugitivos
La seguridad vuelve a superar a la privacidad en el territorio chino. ¿Cómo usa China el reconocimiento facial? ¿Tienen la privacidad necesaria sus ciudadanos?

China vuelve a demostrar que está decidida a utilizar la tecnología para proteger y vigilar a sus ciudadanos. Solo han pasado unas semanas desde que se conociese que el país utilizará las cámaras de móviles y Smart TVs para controlar a la población. Ahora, una nueva noticia confirma que la táctica elegida por el gobierno chino ya está dando sus frutos.
La idea de China se centra, especialmente, en el poder del reconocimiento facial. Esta técnica ya ha demostrado su eficacia al ser empleada por una empresa francesa para asegurar la atención de los alumnos. Sin embargo, tiene una función totalmente diferente en el territorio chino, donde el reconocimiento facial se usa para vigilar a la ciudadanía y luchar contra el crimen.
Si eres delincuente en China, olvídate de salir a la calle sin ser cazado por los millones de cámaras instaladas
Nada nuevo bajo el sol, ya que hasta la policía china dispone ya de unas gafas inteligentes que pueden reconocerte al instante y buscar toda tu información personal. Según el gobierno chino, estos dispositivos se utilizan solo para detener a delincuentes, aunque es fácil darse cuenta de que el total de la población está controlada de esta forma.
Como decíamos al inicio, la táctica basada en el reconocimiento facial ya está dando sus frutos, ya que ha servido para diferenciar a un fugitivo que se encontraba entre una masa de 60.000 personas. ¿Cómo ha sido posible? ¿Qué técnica se ha empleado para ello?
El concierto trampa para los delincuentes
China quiere garantizar que la seguridad del país sea impecable y para ello tiene que acabar con todos los delincuentes que pululan libres por sus calles. Esa libertad parece tener los días contados por culpa de la tecnología de reconocimiento facial implantada en cámaras situadas en las zonas públicas.
Por esta medida, salir a la calle se ha convertido en todo un peligro para aquellos delincuentes perseguidos por la policía. El ejemplo claro es "Ao", apodo referente al fugitivo que copa las noticias chinas. La agencia informativa ECNS ha sido la encargada de comunicar los datos del caso que demuestra que el gobierno chino no anda con tonterías.
El foco de interés se localiza en el estadio International Sports Center, situado en Nanchang, al sudeste de la República Popular China. Ao se disponía al ver el concierto del famoso cantante Jacky Cheung junto a su mujer y unos amigos. Lo que debería haber sido una jornada divertida para él, se convirtió en toda una pesadilla.
¿Las culpables de este cambio drástico? Las cámaras de vigilancia instaladas por la policía china en un estadio con capacidad para 60.000 personas. Gracias a la tecnología de reconocimiento facial con la que contaban esas cámaras, detectar a Ao entre tantas personas fue pan comido para los agentes.
Ao era buscado por la policía por ser responsable de supuestos delitos económicos en la región de Guangxi Zhuang. El supuesto delincuente confiaba en que era imposible su hallazgo entre decenas de miles de personas, desconociendo claramente las técnicas empleadas ahora por los agentes de seguridad de China. Pero, ¿en qué consiste exactamente esta nueva estrategia?
Nadie está a salvo del reconocimiento facial
El concierto del importante cantante Jacky Cheung se caracterizó por las fuertes medidas de seguridad adoptadas por la policía. Según explica BBC, el señor Ao fue detenido poco después de entrar al estadio por los agentes, que no tuvieron ningún problema en detectarlo entre 60.000 personas. Al descubrir la situación, el delincuente admitió que no hubiese ido al concierto de haberlo sabido.
Pero ya era tarde para contrarrestar los efectos de las cámaras de vigilancia de la policía. ¿Cómo eran estos dispositivos para poder detectar una sola cara entre tanta gente? Li Jin, uno de los policías presentes en Nanchang, explicó la táctica empleada durante el concierto:
El concierto atrajo a más de 60.000 visitantes, así que prestamos mucha atención a la seguridad. Por esto, instalamos varias cámaras en las taquillas, que estaban equipadas con tecnología de reconocimiento facial.
Las cámaras instaladas en el estadio están preparadas para analizar las características faciales de todas las personas grabadas. El reconocimiento facial estaba conectado a la base de datos de la policía, por lo que se iba analizando uno por uno la información personal de cada asistente al concierto.
El sistema fue suficiente para detectar que Ao tenía conflictos económicos en otra provincia y que su detención era requerida. No es la primera vez que esto sucede en China, ya que la agencia de noticias Ecns asegura que el pasado agosto hasta 25 personas fueron detenidas en el Qingdao International Beer Festival utilizando justo el mismo sistema de reconocimiento facial.

El arrestado, conocido como Ao, era seguido por delitos económicos. Ecns
Estas mismas cámaras de vigilancia, que cuentan con reconocimiento facial, han sido instaladas en zonas públicas como estaciones de metro, facilitando también la detención de tres sospechosos en tan solo 9 días. Actualmente, China cuenta con 170 millones de cámaras colocadas, a las que se sumarán 400 millones más antes de 2020.
Gracias a estos dispositivos, el país chino cuenta con "el sistema de vigilancia de cámaras más grande del mundo", a costa de la privacidad de sus ciudadanos. El gobierno tiene claro que la seguridad debe prevalecer y eso está demostrando con un sistema de reconocimiento facial al que ningún ciudadano puede esquivar.