Google presenta Gemma 3: la IA diminuta que cabe en tu móvil
Un modelo ligero que apuesta por privacidad, eficiencia y facilidad de uso

En los últimos años, la carrera de la inteligencia artificial ha estado marcada por modelos cada vez más grandes, alimentados por enormes granjas de GPU que consumen cantidades astronómicas de energía, cosa ya denunciada por todos los ecologistas. Sin embargo, Google ha decidido demostrar que lo pequeño también importa. La compañía ha lanzado Gemma 3 270M, una versión reducida de su modelo abierto Gemma, pensada para funcionar directamente en dispositivos locales como móviles o navegadores. Con apenas 270 millones de parámetros (frente a los miles de millones de sus hermanos mayores), mantiene un rendimiento sorprendentemente sólido.
Los beneficios de este enfoque son claros: más privacidad, menos latencia y un consumo energético mínimo. En pruebas realizadas con un Pixel 9 Pro, el nuevo modelo logró mantener 25 conversaciones en el chip Tensor G4 utilizando solo un 0,75 % de la batería. Esto convierte a Gemma 3 270M en la versión más eficiente hasta la fecha dentro de esta familia. Y aunque no compite con gigantes de miles de millones de parámetros como Llama 3.2, Google asegura que “da más de lo que parece” gracias a su capacidad de seguir instrucciones con precisión. En el benchmark IFEval, obtuvo un 51,2 %, superando incluso a otros modelos ligeros con más parámetros.
Google ve en Gemma 3 270M un aliado para tareas prácticas como la clasificación de textos, el análisis de datos o la generación de contenidos sencillos. Su tamaño reducido facilita la personalización: ajustarlo a casos de uso específicos es rápido y barato, lo que abre la puerta a desarrolladores y pequeñas empresas que no cuentan con la infraestructura de las big tech. Además, está disponible en múltiples plataformas como Hugging Face, Kaggle y el propio Vertex AI, tanto en versiones preentrenadas como ajustadas para instrucciones.
Modelo abierto, pero no del todo
Eso sí, conviene matizar lo de “abierto”. Google describe a Gemma como un modelo “open”, pero no completamente “open source”. Los pesos están disponibles y se puede descargar gratis, modificar y redistribuir, pero bajo una licencia personalizada que impone condiciones: nada de usos dañinos, nada de violar la privacidad y obligación de mantener visibles los términos en todas las versiones derivadas.
Con este lanzamiento, Google no pretende sustituir a sus modelos más potentes en la nube, pero sí marcar terreno en un nicho cada vez más relevante: el de la IA ligera, privada y al alcance de cualquiera. Una apuesta que podría cambiar la manera en que interactuamos con la inteligencia artificial en el día a día.