Grammarly lanza herramientas de IA para estudiantes y profesores
Con el objetivo de potenciar el aprendizaje y facilitar la vida a los profesores

Grammarly ha dado un paso más en su apuesta por la inteligencia artificial con el lanzamiento de varias herramientas diseñadas para afrontar retos concretos de la escritura académica. La compañía presentó estas novedades en docs, su nueva superficie de escritura “AI-native”, y lo hizo con un detalle importante: tanto los usuarios de la versión gratuita como los de la versión Pro podrán acceder a estos agentes sin coste adicional.
Jenny Maxwell, responsable de Grammarly para Educación, defendió la iniciativa asegurando que el objetivo no es reemplazar el aprendizaje, sino potenciarlo: “Los estudiantes de hoy necesitan una IA que aumente sus capacidades sin socavar su formación. Nuestros nuevos agentes actúan como compañeros reales, guiando a los alumnos para producir mejores trabajos mientras desarrollan habilidades que les servirán durante toda su carrera”.
Nuevas herramientas prometen mejorar la escritura académica y facilitar la detección de plagio
Entre las nuevas funciones destaca el AI grader agent, capaz de ofrecer una predicción de nota a partir de los detalles del curso y la información pública disponible sobre el profesor. Este agente no solo estima la calificación, sino que también sugiere mejoras específicas para aumentar las posibilidades de éxito antes de la entrega final. Otro de los más llamativos es el reader reactions agent, que anticipa las posibles dudas que podrían surgirle a un lector tras revisar el trabajo.
La oferta se completa con un corrector que hace sugerencias en línea (como el que añadieron tras la colaboración con Samsung en estos dispositivos), un agente de parafraseo que ajusta el estilo y el tono según la audiencia, un buscador de citas que genera referencias correctamente formateadas y un revisor experto que proporciona comentarios más profundos sobre el tema tratado. Todo un ecosistema pensado para acompañar al estudiante en cada etapa del proceso de escritura.
Pero Grammarly también ha pensado en los profesores. Dos herramientas exclusivas para usuarios Pro permiten revisar los textos de los alumnos: un detector de plagio, que contrasta el trabajo con bases de datos, artículos académicos y publicaciones en la web, y un AI detector, que asigna un porcentaje de probabilidad de que el texto haya sido redactado por una persona o por una IA.
La compañía confirmó que estas funciones llegarán también a empresas y educativos a lo largo de este año, junto a nuevos agentes aún por anunciar. La apuesta de Grammarly es clara: un futuro en el que estudiantes y profesores trabajen codo con codo con la inteligencia artificial.