Jeff Bezos, CEO de Amazon, da las claves para ser emprendedor en el mundo de la tecnología: "Si duplicas el número de experimentos que haces, duplicarás tu inventiva"
Cuantas más cosas se hagan, más posibilidades hay de triunfar en alguna de ellas

Parece que en 2025 es imposible innovar y lanzar un producto revolucionario que te vuelva millonario, ya que da la sensación de que «todo está inventado», pero la prueba de que no es así está en la inteligencia artificial. Esta tecnología de reciente creación y popularizada por el bot conversacional ChatGPT es el futuro, y cada vez hay más servicios que la utilizan para implementar nuevas funciones o mejorar las existentes.
Un buen ejercicio para obtener inspiración y contexto es leer y aprender sobre algunos casos de éxito. Por ejemplo, el de Jeff Bezos. El fundador de Amazon no nació con una fortuna milmillonaria bajo el brazo. Nacido en Albuquerque, Nuevo México, en el año 1964, desde joven mostró interés por la tecnología y la ciencia, lo que lo llevó a estudiar en Princeton, una de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos. Allí se graduó en Ingeniería Eléctrica y Ciencias de la Computación.
Bezos trabajó en varias empresas tecnológicas y financieras de Nueva York, incluida D.E. Shaw, conocida por desarrollar modelos matemáticos complicados y programas informáticos para explotar anomalías en el mercado. Fue en D.E. Shaw donde descubrió el potencial de Internet, ya que se dio cuenta de que el tráfico web crecía de manera vertiginosa cada año. En 1994, Jeff Bezos abandona Wall Street para seguir su sueño.
Probar y probar hasta dar con la tecla
Aunque suene a leyenda urbana o un cliché, Bezos fundó Amazon.com en el garaje de su nueva casa en el estado de Washington. El sitio web empezó como una librería online por un simple motivo: los libros eran productos más fáciles de almacenar y enviar. Y su enfoque fue todo un éxito: durante las primeras semanas, Amazon había logrado generar ventas en todo Estados Unidos y en 45 países de todo el mundo.
De este modo, Bezos obtuvo aproximadamente un millón de dólares en financiación inicial de unos 20 inversores entre 1995 y 1996. La empresa experimentó un mayor crecimiento después de su salida a bolsa en 1997 y tras diversificar el catálogo de productos que ofrecía en la tienda online. Con el tiempo, se adentró en los servicios de Internet con Amazon Web Services, la suscripción Amazon Prime, el eReader Kindle y muchas otras ideas innovadoras para la época.
Si duplicas el número de experimentos que haces al año, duplicarás tu inventiva - Jeff Bezos
Actualmente, Amazon es una de las empresas más valiosas del mundo. Sorprende como una «simple» librería online se transforma en un imperio tecnológico que toca distintos palos en muy pocos años, incluidos el de la inteligencia artificial, que es la tecnología del momento. Por eso la frase citada de Jeff Bezos unas líneas más arriba es tan interesante y tiene tanta razón: hay que probar y probar hasta dar con la tecla.
El caso de Jeff Bezos es una excepción; no todos los empresarios de éxito dan en la diana en su primer intento —aunque parezca que los grandes magnates tecnológicos besaron el santo con la primera idea que tuvieron—, lo importante es no frustrarse y seguir adelante.