Yelmo Cines multada con 30.000 euros por prohibir la entrada de comida del exterior a las salas

A pesar de que la ley está de parte del usuario, algunas cadenas de cines se empeñan en poner trabas a los espectadores.

Yelmo Cines multada con 30.000 euros por prohibir la entrada de comida del exterior a las salas
Acudir al cine con comida del exterior es algo completamente legal.
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Creo que todos los espectadores que han acudido al cine, al menos en alguna ocasión, ha acabado pagando el precio correspondiente a la entrada y las palomitas de turno, que se han convertido en el complemento ideal de cualquier película. Sin embargo, desde siempre, el espectador también ha podido acudir a la sala con la bolsa de chucherías de su tienda favorita o con comida del exterior. Eso sí, esto ha cambiado en los últimos años, con una polémica que continúa vigente, a juzgar por una reciente multa impuesta a la empresa Yelmo Cines.

Yelmo Cines sigue empeñada en poner trabas a los espectadores

Tal y como señala la agencia EFE en uno de sus últimos comunicados, Kontsumobide, el Instituto Vasco de Consumo, ha impuesto una multa de 30.001 euros a la empresa de distribución cinematográfica por su insistencia en prohibir a las personas que se acercan a sus instalaciones a introducir comida del exterior.

Tanto la Asociación de Personas y Consumidoras y Usuarias Vasca como Facua-Consumidores en Acción habían ayudado a ocho personas a denunciar a Yelmo Cines y fue el pasado mes de enero cuando Kontsumobide comenzó una investigación que ha finalizado con la mencionada multa.

Eso sí, Yelmo Cines no parece que vaya a quedarse cruzada de brazos, dado que ya ha interpuesto un recurso de alzada frente a las denuncias, que, por cierto, apuntaban directamente a varios establecimientos del País Vasco, concretamente los ubicados en los centros comerciales Megapark y Artea de Bizkaia y en el centro comercial El Boulevard de Vitoria.

Yelmo Cines incluye en dichos establecimientos el siguiente mensaje: 'La compañía no permite el acceso a estas instalaciones con alimentos y/o bebidas adquiridas fuera de Yelmo', algo que, según FACUA, unido al demasiado manido derecho de admisión es contrario a la legislación vigente.

Si escuchas a diferentes expertos en este tipo de normas, habrás oído que esta prohibición está realizada por un establecimiento cuya actividad esencial es la exhibición cinematográfica y no la restauración, con lo que se derecho de admisión no podría ejercerse. La multa, que había sido solicitada por un valor de 150.000 euros en un principio, es una muestra más de que las salas de cine deben continuar reinventándose si quieren que los espectadores confíen de nuevo en ellas para ver películas de ciencia ficción que mostraron tecnologías adelantadas a su tiempo o entidades extraterrestres que nos han alucinado en la gran pantalla.

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