ChatGPT pedirá verificación de edad: va a convertirse en una plataforma subida de tono

Sam Altman promete nuevos controles de seguridad mientras relaja las restricciones para adultos

ChatGPT pedirá verificación de edad: va a convertirse en una plataforma subida de tono
Dentro de poco se podrá ser pícaro dentro de ChatGPT
Publicado en Web3

OpenAI se prepara para dar un nuevo paso en la evolución de sus modelos de inteligencia artificial y parece que este más reciente llegará con polémica. Ha sido el propio Sam Altman, director de la compañía, el que anunció que a partir de diciembre los usuarios adultos verificados podrán mantener conversaciones eróticas con ChatGPT. Sí, conversaciones eróticas. No te marches, que ahora te contamos que implicaciones tiene el movimiento.

OpenAI abre la puerta a la erótica en ChatGPT

Los últimos meses en una de las plataformas de IA más populares en todo el mundo han ido modelando su panorama, entre la permisividad y una estricta censura. Sam Altman, en una reciente publicación en X, afirmaba que esta controvertida decisión era su manera de "tratar a los adultos como adultos" y que después de añadir nuevas herramientas para detectar signos de angustia mental, se pueden relajar la mayoría de las restricciones.

Fue el pasado mes de agosto cuando la compañía endureció sus políticas, debido a una demanda presentada por los padres de un adolescente fallecido por suicidio. Estos, atacando al modelo, alegaron que ChatGPT le habría animado en tomar esa dirección. Si nos vamos unos meses antes, en febrero, OpenAI ya permitía cierto nivel de erotismo, lo que llevó a los reguladores internos a ir variando las restricciones.

En marzo, ChatGPT parecía ser excesivamente complaciente con el usuario, algo que hizo que los usuarios asegurasen que estaban ante un modelo demasiado optimista. Más tarde, el modelo se endureció y bajó ostensiblemente el tono humano que muchos usuarios apreciaban. Ahora, un nuevo anuncio abre las puertas a una incertidumbre emocional.

En la actualidad, ChatGPT es una herramienta que debería ser un asistente inteligente, pero que también hace las veces de compañero dispuesto a solucionar todos tus problemas. Es por ello que OpenAI ha creado un consejo, formado por ocho expertos en salud mental y tecnología, para intentar crear límites en el modelo.

Por el momento, más allá de saber que se podrán mantener conversaciones eróticas con el modelo, Sam Altman no ha explicado nada acerca de los detalles técnicos ni acerca de cómo se implementará la verificación de edad y la filtración de contenidos sensibles. El equilibrio entre la libertad de expresión y el cuidado mental es muy delicado, con lo que diciembre marcará un nuevo hito en la historia de ChatGPT. ¿Será para bien o para mal?

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