Descubre qué tesoro dorado están a punto de abrir los astronautas de la Estación Espacial Internacional
El primer vuelo del carguero HTV-X marca un hito en la cooperación espacial y anticipa el futuro de lo que podría ser la logística lunar
 
 La escena parecía sacada de una película de ciencia ficción: una nave dorada, brillante y metálica, avanzaba lentamente hacia la Estación Espacial Internacional. La Tierra, con sus nubes de fondo, era testigo de un acontecimiento histórico. Estamos ante el HTV-X, el nuevo carguero espacial japonés, que completó con éxito su primera misión de suministro al laboratorio orbital internacional.
Japón abre su caja del tesoro dorada en la Estación Espacial Internacional
Este tesoro no tiene monedas antiguas ni piedras preciosas, pero sí tiene un valor incalculable para la comunidad científica y para la historia de la era espacial. El encuentro, que puedes ver bajo estas líneas, se produjo a 420 kilómetros de altura sobre el Atlántico Sur, donde el astronauta japonés Kimiya Yui, a bordo de la EEI, capturó el vehículo con el brazo robótico de la estación. Con un escueto "captura del HTV completada", el astronauta dejaba claro el éxito de la intrincada maniobra. Y añadió, emocionado:
Este es un evento histórico para el programa espacial japonés. Esta nave espacial es tan hermosa y brillante, y representa nuestro brillante futuro. Gracias de nuevo por entregar estos importantes suministros y experimentos. ¡Estoy deseando abrir esta caja dorada del tesoro!
Pero, ¿por qué mencionaba la palabra tesoro? ¿Acaso había dinero, joyas o ídolos como en las películas de Indiana Jones? En realidad, esta metáfora no iba tan desencaminada, ya que bajo el recubrimiento aislante del HTV-X, la nave transportaba experimentos científicos, comida, bebida y repuestos vitales para la tripulación de la Estación Espacial Internacional.
Este vehículo japonés es el heredero del H-II Transfer Vehicle, que entre los años 2009 y 2020 completó hasta nueve misiones antes de ser retirado. La Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón, también conocida como JAXA, decidió entonces apostar por una evolución más ambiciosa: un carguero más eficiente, capaz de llevar más carga por menos coste. Sabemos que el HTV-X mide 8 metros de largo y, aunque es algo más corto que su predecesor, ofrece un 25% más de capacidad, superando las cuatro toneladas de carga presurizada.
Sin embargo, las mejoras no son solo tienen que ver con su volumen. Este carguero también estrena paneles solares desplegables, sistemas de navegación avanzados y una propulsión que le permite maniobrar con mayor autonomía. Tal y como puedes ver en el vídeo que te dejamos sobre estas líneas, la nave despegó días antes desde la isla de Tanegashima, a bordo de un cohete H3, también de nueva generación y fabricado por Mitsubishi Heavy Industries.
La unión del cohete H3 y el HTV-X permite a Japón asegurarse un lugar privilegiado en los futuros programas de exploración lunar. De hecho, la JAXA ya planea que el HTV-X sea quien transporte suministros a la estación que orbitará la Luna dentro del programa Artemis, conocida como Gateway. El país asiático, con su brillante tesoro dorado, nos recuerda que la cooperación internacional sigue siendo fundamental para esta era de exploración espacial. Y es que toda tecnología, si queremos que sea relevante, debería ser compartida para maximizar todo su potencial.