Este país europeo ha dado con la mayor fuente de energía verde hasta la fecha: su explotación y viabilidad centrarán los esfuerzos hora
Como sucede en más de una ocasión el hallazgo se llevó a cabo en el proceso de una investigación que buscaba algo diferente a lo finalmente encontrado
Cuando un grupo de investigadores publica un estudio, lo hace con la responsabilidad de saber que aquello que está saliendo a la luz puede cambiar la visión de colegas de profesión, modificar sus ámbitos de estudio o redefinirlos y también tener efectos en el resto de seres humanos. Cuando se trata de fuentes de energía la repercusión acaba siendo mayor si cabe y una muestra la tenemos incluso en cómo puede cambiar el paradigma de nuestra movilidad.
Este horizonte es el que se abrió con el resultado de los análisis realizados por Philippe de Donato y Jacques Pironon, profesores de investigación del Laboratorio GeoRessources y del Centro Nacional de Investigación Científica francés (CNRS). El equipo investigador se encontraba en la región de Lorraine y bajo la población de Folschviller han descubierto un posible depósito natural de hidrógeno blanco que podría suponer la mayor reserva de este gas del mundo que ya cuenta con proyectos de cara a crear las infraestructuras que permitan su distribución.
Cuando la búsqueda no da el resultado esperado, sino uno mejor
Se da la circunstancia de que el equipo buscaba en su prospección metano, pero con lo que parecen haber dado a una profundidad de 1250 metros es con un depósito de hidrógeno blanco de un volumen espectacular. El hidrógeno "blanco" es la nomenclatura que se ha elegido para designar al dihidrógeno que se forma de forma natural bajo tierra.
Así lo explica el propio profesor Pironon: "se llama 'blanco' porque su producción no genera gases de efecto invernadero. A diferencia del hidrógeno 'negro' y el 'gris', que se fabrican procesando carbón y gas natural respectivamente; es decir, combustibles fósiles que generan grandes cantidades de gases de efecto invernadero, el hidrógeno blanco está disponible directamente”, detallaba en su estudio.
Las características propias del hidrógeno sugieren mayores concentraciones del gas conforme se desciende a mayor profundidad, lo que ha llevado a unos cálculos al equipo científico junto a los geólogos: “según las simulaciones iniciales, a 3000 metros los niveles podrían superar el 90% de concentración”, informaba de Donato. Si estas cifras son correctas, la reserva localizada podría contener aproximadamente 46 millones de toneladas de hidrógeno natural, el equivalente a más de la mitad de la producción anual mundial actual de hidrógeno gris y que algunos medios han valorado en 92.000 millones de dólares.
Ahora y como sucede siempre con este tipo de hallazgos falta por ver si se encuentra el modo más eficiente no solo para su extracción sino también para su utilización. De ser capaz Francia de dar con las claves para ello a buen seguro que otros países de todo el mundo se lanzarán a investigar en la localización de reservas naturales de hidrógeno.