El "flow" tiene explicación científica: la gente que fuma marihuana anda diferente
Las drogas causan multitud de efectos en tu organismo. Muchos de ellos ya los conocemos, pero otros no tanto. ¿Sabías que las drogas pueden cambiar tu forma de caminar?

Sabes de sobra que las drogas son perjudiciales para la salud, incluso las llamadas "drogas blandas" como el alcohol y el tabaco. Todas provocan efectos en tu organismo desde el momento del primer contacto, por lo que debes tener en cuenta cómo pueden afectarte.
Las drogas perjudican a tu organismo desde el primer contacto
Dejando a un lado las sustancias más o menos aceptadas por la sociedad, hoy nos centraremos en los químicos responsables de los peores estragos. Estos son capaces de provocar cambios en el correcto funcionamiento de tu organismo, cambios que ni imaginas.
Como bien reflejan en Xombit, un único contacto con sustancias estupefacientes como el cannabis, la heroína o la cocaína, ya da lugar a repercusiones en todos tus sistemas. Las más graves afectan a tu cerebro, por lo que estamos hablando de un tema realmente serio.

Los daños más graves son los que afectan a tu cerebro. Retiro Verde
Afectando a tus químicos
La adicción a las drogas, que puede surgir con muy pocas dosis, se basa en una serie de afectaciones cerebrales. Estas alteran el correcto funcionamiento de lo que conocemos como sistema cerebral de recompensa, y del cual hablaremos a continuación.
Afectan de manera devastadora a tu cerebro
Al igual que muchos otros estímulos como la música, las drogas provocan una gran liberación de dopamina. Espera, ¿dopamina? Sí, se trata de un neurotransmisor que se genera en tu cerebro, y es descargado dando lugar a sensaciones de placer.
Como apuntan desde Vix, el sistema cerebral de recompensa se encarga de que repitas aquellos comportamientos que te hacen sentir bien, en este caso, el consumo de drogas. Lo peor, sin embargo, viene después.
El fatal síndrome de abstinencia
Como nos cuentan desde Omicrono, el síndrome de abstinencia es uno de los efectos más duros y devastadores del consumo de drogas. Pero, ¿qué es exactamente? ¿A qué se debe? La clave está, como no, en tu cerebro.
Nos encontramos ante el principal responsable de la adicción
Cuando tu organismo se acostumbra a las inmensas liberaciones de dopamina que producen las drogas, no hace más que pedir nuevas descargas. Si estas no se producen, tu cerebro tomará represalias, haciéndote sufrir hasta que vuelvas a calmarlo con más sustancias. Un auténtico círculo vicioso.
El malestar que puede producir el síndrome de abstinencia es muy grande, provocando incluso daños neurológicos que son capaces de desembocar en un coma. Entre los efectos psicológicos podemos llegar a encontramos con depresión y pensamientos suicidas.
Cambiando tu forma de caminar
Existen otros muchos cambios que producen las drogas, y los cuales aún no conocemos. Por esto, investigadores de todo el mundo estudian cada día las consecuencias que tienen este tipo de sustancias, en busca de respuestas.
Otro de los efectos de las drogas, en este caso del cannabis, ha sido descubierto por investigadores de la Universidad de Australia del Sur. Según los científicos, el consumo habitual de esta sustancia puede afectar a la forma de caminar de las personas. ¿Cómo es posible?
Demasiado "flow" puede ser muy peligroso
Aunque los responsables del estudio no encontraron diferencias neurológicas entre consumidores y no consumidores de la droga, existían claras diferencias entre sus movimientos. Como podemos leer en Daily Mail, aquellos que solían fumar marihuana tenían los hombros más rígidos, codos más flexibles y rodillas más rápidas. Además, en general andaban a una mayor velocidad.
Pearson-Dennett, uno de los principales responsables de este trabajo, añadía tras mostrar los resultados:
El principal mensaje es que el consumo de cannabis puede dar lugar a cambios en la forma de moverse de las personas.
Sin embargo, estos no son los únicos cambios, a nivel de movilidad, que pueden provocar las drogas. Numerosos estudios a lo largo del tiempo han demostrado que estas sustancias afectan a nuestra capacidad de reacción, haciéndonos más lentos ante estímulos imprevistos.
Este es el motivo por el que realizar acciones como conducir bajo el efecto de sustancias estupefacientes es prácticamente sinónimo de accidente. Es más, tampoco tenemos que irnos a drogas duras, el alcohol también produce unos efectos muy parecidos.