Los Tyrannosaurus rex también eran inmigrantes. Llegaron a América desde muy lejos, según un nuevo estudio
El nuevo estudio afirma que el T. Rex viajó a Estados Unidos desde Asia

La mayoría de personas sabe algo sobre los dinosaurios gracias al cine, siendo Parque Jurásico, la película de Steven Spielberg, la que despertó la curiosidad e interés por estos seres vivos tan terroríficos como fascinantes que habitaron la Tierra hace millones y millones de años. Pero no podemos fiarnos de todo lo que «aprendemos» en las obras de ficción.
Existen varios dinosaurios, por decirlo de una manera, icónicos. El Triceratops, Velociraptor, Diplodocus y Braquiosaurio son algunos de los más populares, pero el más conocido, sin duda alguna, es el Tyrannosaurus rex, cuyo nombre significa «rey de los lagartos tiranos». Vivió hace unos 66 millones de años, a finales del período Cretácico.
Con una longitud de hasta 12-13 metros de largo, alrededor de cuatro metros de alto en las caderas, y un peso que podía alcanzar las nueve toneladas, es considerado uno de los depredadores más temibles. Aunque se saben unas cuantas cosas sobre él, al no estar vivo y haber pasado tanto tiempo, es difícil determinar hechos con precisión. Si bien habitaba en lo que hoy conocemos como América del Norte, un nuevo estudio sugiere que llegó allí desde Asia.
Nuevos hallazgos sobre el «rey de los lagartos»
Un grupo de investigadores del University College de Londres utilizó modelos para determinar el origen de los ancestros del T. rex. Este modelo sugiere que estos antiguos tiranosaurios viajaron a través de un puente terrestre que conectaba Asia y América del Norte, el estrecho de Bering (porción de mar que une América y Asia. Empieza en las costas de Alaska, Estados Unidos, y se extiende hasta las costas de Siberia), hace más de 70 millones de años.
El origen del T. rex sigue siendo objeto de debate entre los estudiosos y expertos. La opinión está dividida entre si su ancestro provino de Asia o América del Norte, afirma Cassius Morrison, estudiante de doctorado y autor principal del estudio: "Nuestro modelo sugiere que los «abuelos» del T. rex probablemente llegaron a América del Norte desde Asia, cruzando el estrecho de Bering entre lo que hoy es Siberia y Alaska".
Los hallazgos del estudio se alinean con resultados anteriores que muestran que el T. rex comparte una relación evolutiva más estrecha con tiranosaurios asiáticos como Tarbosaurus que con otros gigantes de América del Norte como el Daspletosaurus. A pesar de que se han descubierto sus fósiles en Norteamérica, los investigadores creen que los restos de su ancestro directo todavía estarían por ser descubiertos en Asia.
Este estudio no solo se enfocó en los T. rex, sino que también profundizó en la historia de los megaraptors. Estos dinosaurios tenían cabezas estrechas y brazos notablemente largos que terminaban en impresionantes garras que podían alcanzar hasta los 35 centímetros de longitud. Se ha descubierto que estaban más extendidos de lo que se creía, y los investigadores aseguran que se originaron en Asia hace 120 millones de años.
Existe la posibilidad de que los megaraptors se extendieran a Europa y luego a la masa continental austral de Gondwana, que incluía la actual África, Sudamérica y la Antártida. Esta distribución global y su anatomía única indican que los megaraptores pueden haber cazado presas diferentes a las de sus primos tiranosáuridos.