Cómo saber si el vado de un aparcamiento es falso o ilegal
La señal de vado permanente prohíbe aparcar delante de la misma, circunstancia que a veces se aprovecha para colocar señales falsas

Una de las señales más frecuentes en el ámbito urbano es de la de vado permanente. Pese a todo, hay muchas dudas acerca de su regulación y eso se traduce en que las multas por aparcar en un vado permanente están en la parte más alta de la lista de infracciones más comunes en materia de tráfico. Si bien el vado en si mismo no impide el aparcamiento como tal, si que determina el permiso de paso de vehículos desde la calzada al inmueble a través de la acera.
Por ende, el vado permanente no prohíbe aparcar como tal, sino que prohíbe que un vehículo pueda evitar el acceso al garaje que queda bloqueado. Cabe señalar a modo de curiosidad que la normativa especifica que el vado permanente se aplica al ancho de la puerta de acceso al garaje más 50 centímetros por cada lado con el fin de permitir las maniobras de acceso.
- Qué es un vado
- Cómo saber que un vado es falso
- Vados legales en proceso de adaptación
- Multas vinculadas con los vados
Qué es un vado
El vado, vado de aparcamiento o vado permanente es un permiso o licencia municipal que se concede para invadir espacios públicos a la hora de definir acceso a garajes, viviendas, locales u otro tipo de infraestructuras, además de llevar consigo la prohibición tácita de aparcamiento en la zona delimitada por el vado. Los vados de aparcamiento están regulados de manera muy clara en el Reglamento General de Circulación, aunque son concedidos por los ayuntamientos.
Precisamente por tratarse de licencias municipales, los consistorios tienen la potestad de añadir ciertas limitaciones extra a las naturalmente asociadas a los vados permanentes. El vado es una licencia anual con un precio mínimo de 70 euros, si bien cada ayuntamiento puede incrementar esta cuantía. Su renovación se debe hacer, como decimos, de forma anual para que la vigencia del mismo siga activa.

Existen varios detalles que nos pueden hacer sospechar que un vado no cumple con la normativa vigente
Cómo saber que un vado es falso
Aunque sólo la comprobación del número de licencia del vado permanente nos puede dar la certeza de que estamos ante un vado permanente legal o ante un vado ilegal, sí que hay ciertos detalles que nos pueden hacer sospechar que estamos ante un vado que no cumple con la normativa vigente. Sobre todo, si estos detalles se dan de forma simultánea, ya que no dejan de ser indicativos de una posible ilegalidad, que no reflejo de una certeza absoluta.

Las líneas amarillas en el suelo pueden ser una gran pista a la hora de saber si estamos ante un vado legal o ilegal
Mirar las líneas del suelo
En la mayoría de localidades, el vado permanente no sólo se indica a través de la pertinente señal, sino que se suelen pintar una raya amarilla en la calzada o en el bordillo para definir la zona en la que está prohibido aparcar. Aunque es cierto que hay en ocasiones que son los propios ciudadanos los que pintan estas rayas amarillas sin permiso, lo norma es que si hay una correcta señalización con estas rayas amarillas estemos ante un vado legal.
De igual forma, sobre todo si el vado permanente está en el centro de grandes ciudades o en zonas donde haya un sistema de pago por aparcar, la zona del vado no presenta las líneas verdes, azules, blancas o de otros colores que delimitan el aparcamiento convencional en la vía pública. Si la licencia del vado se deja de pagar o se pone una placa de forma ilegal, las líneas de aparcamiento pueden darnos una pista sobre la ilegalidad de ese vado.

La altura de la acera y los elementos anexos también nos pueden dar pistas sobre la legalidad del vado
Comprobar la altura de la acera
Uno de los detalles que nos pueden hacer sospechar de la legalidad de un vado es la altura de las aceras. De manera habitual y con el objetivo de facilitar el acceso de los vehículos al garaje y/o infraestructura que marcar el vado, la altura del bordillo de la acera se rebaja. Si la altura de la acera es la normal, por lo que presenta un bordillo de altura estándar, puede ser que el vado sea ilegal.
Sin embargo, esto no se puede tomar como un axioma inquebrantable ya que puede ser que siendo el vado legal no se haya procedido a rebajar el bordillo de la acera por cuestiones temporales u económicas. Lo que sí que es cierto que un vado con el bordillo rebajado o con elementos de separación respecto a las plazas de aparcamiento tiene muchas más opciones de ser un vado completamente legal.
Revisar el estado de la placa del vado
Encontrar una paca de vado permanente en mal estado o demasiado deteriorada nos puede dar una pista de que estamos ante una señal que no sea verdadera. En este sentido, un buen método para comprobar si estamos ante una placa falsa es comparar su diseño con las placas de vado cercanas, ya que los ayuntamientos cada vez están siendo más estrictos con este tipo de señales y están apostando por su estandarización para evitar precisamente este tipo de fraudes.
De hecho, las señales de vado permanente de infinidad de municipios incluyen desde ya hace años el escudo y/o logo del ayuntamiento, además de especificar el número de licencia. Los nuevos modelos de señales de vado incluso incluyen la fecha de validez de vencimiento de la licencia en activo. Algunos municipios incluso ya han incorporado un código QR a las señales de vado para que los ciudadanos puedan comprobar rápidamente la validez de la licencia.

Un vado puede no cumplir algunas de las características anteriores y ser legal, por lo que hay que tener cuidado
Vados legales en proceso de adaptación
Pese a lo comentado, se puede dar la circunstancia que un vado sea legal y no cuente con las características referidas, ya sea porque no cuenta con las líneas pintadas en la calzada y bordillo o la altura de la acera no haya sido rebajada, sin que eso sea sinónimo en este caso de que estemos ante un vado ilegal. Simplemente puede ser un vado de nueva creación, por lo que los operarios municipales todavía no han tenido tiempo a adecuar e identificar, o incluso un vado que ha estado durante un tiempo inactivo y se ha vuelto a pagar la licencia correspondiente.
Por ese motivo hay que dejar claro una vez más que los aspectos que hemos señalado como posibles indicadores de un vado falso son eso, indicadores, pero no reflejan una verdad absoluta, ya que la gestión de los vados es municipal y en muchas ocasiones los plazos de ejecución de la adaptación de la infraestructura al vado permanente se demoran, sobre todo en los municipios con pocos habitantes donde la capacidad económica y funcional de los consistorios es más limitada. Además, también se puede dar el caso contrario, en la que la licencia de vado se ha dejado de pagar y aún no se han eliminado las señalizaciones asociadas al mismo.

Colocar una placa falsa para simular un vado puede suponer una multa de hasta 901 euros para el infractor
Multas vinculadas con los vados
Las multas asociadas a los vados permanentes son de distinta naturaleza, ya que pueden afectar a la persona responsable de colgar el cartel si la licencia es falsa, pero también al conductor que aparca en el vado si es legal. Una situación esta última que incluso puede ser denunciada por los agentes de movilidad, sin que sea necesaria la presencia de la policía municipal, como pasa con los estacionamientos indebidos en las zonas naranjas o en las zonas de aparcamiento de uso diferenciado o de alta rotación.
Multa por aparcar en un vado
Como conductor, aparcar en un vado supone una multa que asciende a 200 euros, si bien se puede rebajar a 100 euros por pronto pago. Además, puede llevar asociado gastos de retirada del vehículo del depósito municipal si se retira el vehículo con grúa. Igual que se pueden denunciar distintas actitudes en los garajes comunitarios, cabe señalar que esta multa es incluso aplicable al dueño del inmueble y/o solicitante de la licencia de vado, por lo que a un conductor le pueden multar por aparcar en su propio vado permanente. Lógicamente, aparcar en un vado que es ilegal o con la licencia caducada no implica multa alguna.
Multa por falsear un vado
La persona responsable de colgar un cartel de vado falso al no poseer licencia o al haberla adquirido de forma ilegal se enfrenta a una multa que oscila entre los 200 y los 901 euros, dependiendo de la infracción. Las multas de un menor importe se reservan para la colocación de placas falsas, mientras que las de un mayor montante son las reservadas a la adquisición de licencias de manera fraudulenta.