¿Cuánto vale mi coche para Hacienda? Así puedes saberlo
Si quieres saber el valor fiscal de tu coche para realizar una compra-venta podrás saberlo gracias a éste artículo.
Si estás pensando en comprar o vender un vehículo será de vital importancia conocer a la perfección el valor fiscal del mismo, de la misma manera que será muy importante saber si se ha de abonar algún tipo de impuesto por la operación en cuestión. En este artículo vamos a explicarte cómo conocer el valor de tu coche para Hacienda, cómo calcularlo y cómo se debe de proceder en una compra-venta de un coche de segunda mano entre particulares.
¿Cómo puedo saber el valor fiscal de mi coche?
Lo primordial y más importante es saber qué es el valor fiscal de un coche. Pues bien, el valor fiscal de un vehículo es el valor que el Ministerio de Hacienda y la Agencia Tributaria determinan que tiene tu coche a partir del momento de su primera matriculación.
Hacienda, para establecer la cifra que se deberá de abonar al pagar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales cuando se realice un trámite de compraventa entre particulares regula el valor fiscal del vehículo en base a la marca, modelo, año de matriculación, kilometraje y depreciación según la antigüedad del mismo.
Tabla de depreciación de un coche
La tabla de depreciación de un coche es una herramienta que utiliza Hacienda para poder conocer el valor del vehículo a medida que éste envejece. Es de gran utilidad, ya que por ejemplo también es usada por las aseguradoras para efectuar las pólizas así como por los profesionales y particulares en el mercado de ocasión.
Esta tabla -que mostraremos a continuación- establece una relación directa entre la antigüedad del vehículo y su porcentaje de depreciación. Es decir: por cada año que pase, el coche va a valer fiscalmente menos.
| Antigüedad | Porcentaje |
|---|---|
| 1 año | 100% |
| De 1 a 2 años | 84% |
| De 2 a 3 años | 67% |
| De 3 a 4 años | 56% |
| De 4 a 5 años | 47% |
| De 5 a 6 años | 39% |
| De 6 a 7 años | 34% |
| De 7 a 8 años | 28% |
| De 8 a 9 años | 24% |
| De 9 a 10 años | 19% |
| De 10 a 11 años | 17% |
| De 11 a 12 años | 13% |
| 12 años | 10% |
Por lo tanto, una vez vista la tabla, podemos comentar que si el 100% es el valor fiscal total de un coche recién matriculado, a medida que vaya pasando el tiempo y por ende vaya disminuyendo el porcentaje total de su valor, el coche verá cada vez más devaluado su precio a ojos de Hacienda. Es por ello que si tenemos un coche matriculado en el año 2018, al estar en el año 2023, su porcentaje de valor actual es del 39%.
¿Y para qué sirve?
Además de para poder saber el valor fiscal del vehículo a ojos de Hacienda y las aseguradoras, tiene otra utilidad muy importante, y es la que le otorgan los particulares en las compra-ventas de vehículos de segunda mano. Y es que según el artículo 57 de la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria, se establece que uno de los medios para conocer el valor del coche son las tablas publicadas por Hacienda.
Compra-venta entre particulares
Tal y como acabamos de comentar, la compra-venta entre particulares se realiza en base a la tabla de depreciación del valor del vehículo para así poder saber cuál es la cantidad que se deberá de abonar a Hacienda a través del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales cuando rellenemos el modelo 620.
Éste impuesto además posee la particularidad de tener un tipo impositivo que depende de la comunidad autónoma en la que realicemos la compra-venta del vehículo, por lo que en algunas comunidades el valor añadido al precio mínimo fijado por Hacienda puede ser del 4% (como en la Comunidad de Madrid) y en algunas otras hasta del 8%.
Parte compradora
Si somos la parte compradora deberemos de tener en cuenta el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales. Cuando realicemos una compra en base a las tablas de Hacienda, el precio de compra puede ser mayor o menor, pero el resultante de realizar las operaciones anteriormente descritas será la cantidad en euros que deberemos de abonar al fisco.
Es importante saber que el valor de las tablas suele ser inferior al de compra-venta. Y es que las tablas son el valor mínimo que Hacienda estima que tiene el coche a efectos fiscales, por lo que si la operación se tasa en un precio inferior al de las tablas, Hacienda puede realizar un procedimiento de comprobación de valor para reclamar al contribuyente la cantidad que falta.
Página oficial de la Comunidad de Madrid en la que se explica cómo realizar la compra-venta de un vehículo entre particulares en base al modelo 620
Bien es cierto que existen excepciones, como por ejemplo el pagar menos por un coche accidentado -y por ende pagar menos a Hacienda a través del ITP- aunque de la misma manera el fisco puede llevar a cabo una comprobación. Además, también existen numerosos casos en los que podremos desgravar a Hacienda por la compra o uso de un vehículo.
Parte vendedora
Si somos la parte vendedora del vehículo no deberemos de abonar ni el ITP ni rellenar el modelo 620, sino que, en caso de que sea necesario, deberemos de tributar en el Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas por la ganancia patrimonial obtenida. Esto quiere decir que el valor del coche para Hacienda será el valor de venta y la ganancia patrimonial será la diferencia entre el precio al que lo compraste y el precio al que lo vendiste.
Aunque lo más normal es obtener un resultado negativo, es decir, haberlo vendido por menos dinero del que lo compraste, es posible que no. Si se ha obtenido una ganancia patrimonial al realizar la diferencia entre los precios de compra y venta se deberá de tributar en el IRPF.
Ejemplo práctico
Para explicar todo lo detallado con anterioridad vamos a finalizar con un ejemplo de cómo podremos calcular el valor fiscal de nuestro coche.
Imaginemos que tenemos un Renault Kadjar 1.2 TCe Energy 130 S-Edition 6V matriculado entre el 2015 y el 2016, es decir, con 7 años de antigüedad. El precio de éste coche recién matriculado es de 18.400€ por lo que, aplicando los valores de la tabla de depreciación para vehículos con una antigüedad de 7 años (28%) el valor fiscal del mismo es de 5.152€.
El valor fiscal de un vehículo es el resultante de la depreciación porcentual respecto de su precio inicial de matriculación
Por lo tanto, a Hacienda habrá que declarar esta última cifra de 5.152€ más el tipo impositivo de cada comunidad autónoma. Por ejemplo, si la operación se realiza en la Comunidad de Madrid, habrá que aplicar una cuota tributaria del 4% respecto del valor fiscal, resultando en 206,08€.
En última instancia es importante dejar claro que el valor fiscal del un vehículo puede que no sea representativo de la realidad si lo comparamos con el valor de mercado real, ya que al sólo medirse la antigüedad del mismo, hay otros factores que hacen variar este precio, como lo son los equipamientos extras o el kilometraje. El valor fiscal por tanto, tal y como hemos comentado a lo largo de todo el artículo, resulta ser el precio mínimo que fija Hacienda.